GRACIAS POR ESTAR AQUÍ...

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...." el pueblo recoge todas las botellas que se tiran al agua con mensajes de naufragio. El pueblo es una gran memoria colectiva que recuerda todo lo que parece muerto en el olvido. Hay que buscar esas botellas y refrescar esa memoria". Leopoldo Marechal.

LA ARGENTINA DEL BICENTENARIO DE LA PATRIA.

LA ARGENTINA DEL BICENTENARIO DE LA PATRIA.
“Amar a la Argentina de hoy, si se habla de amor verdadero, no puede rendir más que sacrificios, porque es amar a una enferma". Padre Leonardo Castellani.

“
"La historia es la Patria. Nos han falsificado la historia porque quieren escamotearnos la Patria" - Hugo Wast (Gustavo Martínez Zuviría).

“Una única cosa es necesario tener presente: mantenerse en pie ante un mundo en ruinas”. Julius Evola, seudónimo de Giulio Cesare Andrea Evola. Italiano.

jueves, febrero 28, 2019

La nueva izquierda iniciada por Herbert Marcuse por Alberto Benegas Lynch (h)

Las utopías tienen su cara y su contracara. Por un lado un sentido peligroso y es la postura que pretende fabricar a la fuerza un hombre nuevo desprovisto de interés personal, abandonando el deseo de lucro y capaz de derrotar “la tragedia de los comunes” consecuencia del ataque a la institución de la propiedad privada. Este es el eje central de la nueva izquierda, en realidad inventada para sustituir a la izquierda stalinista con la idea de eliminar la violencia en este sistema, sin evaluar que no puede evitarse la fuerza cuando se imponen caminos distintos a los preferidos por el ser humano real. Este sentido de utopia con razón produce temor debido a la acción constructivista por cambiar la naturaleza humana, lo cual conduce a resultados sumamente dañinos. En  seguida volvemos esta acepción, pero antes aludimos a otra interpretación de la expresión de marras.

Otra variante se condice con el frontal rechazo a la arrogancia y soberbia implícita en la concepción que acabamos de puntualizar y, en su lugar, es más condescendiente y respetuosa con la naturaleza de las cosas y, en el caso de los seres humanos protege la santidad de sus autonomías individuales absteniéndose de diseñar al hombre como si fuera un muñeco de arcilla. Este es el sentido a que se refieren autores como John Hospers en “Freedom and Utopias” donde mantiene que “la única utopía digna de ese nombre es la utopía de la libertad individual, en donde no hay ningún plan general por lo que cada uno es libre de planificar su vida, mientras no interfiera por medio de la fuerza con los planes de otros para manejar sus propias vidas”.
Y es a lo que se refiere Hayek cuando escribe que “Carecemos de una utopía liberal, un programa que no sea una mera defensa de las cosas como están ni un tipo de socialismo diluido, sino un verdadero liberalismo radical” (en “Socialism and the Intellectuals”).   Por esto es que, en rigor, se consideran antiutopías las célebres de Orwell, Zamyatin, Taylor Caldwell, Jerome, Reisman y Huxley. Por último y al margen en este segmento introductorio, tengamos en cuenta que la asignación de derechos de propiedad vinculada a lo que se conoce como “la lockean proviso” fue desmantelada por Robert Nozick y reformulados por Israel Kirzner los fundamentos de la asignación original.
Habiendo dicho esto, retomamos la idea de la nueva izquierda cuyo patrocinante de mayor envergadura ha sido sin duda Herbert Marcuse quien adhiere al marxismo, pero como hemos consignado más arriba con la enfática condición que no se lo vincule para nada con el terror stalinista.
Marcuse pertenece a la primera generación de la Escuela de Frankfurt junto a otros prohombres del movimiento como Fromm con quien se enemistó a poco andar y  también representantes de esa escuela como Adorno y Benjamin. Se doctoró en la Universidad de Friburgo (paradójicamente la misma casa de estudios en la que enseñó Hayek en sus últimos años). Sus obras son múltiples pero las más conocidas son El hombre unidimensionalRazón y revoluciónLa sociedad industrial y el marxismo, Ética de la revolución Cultura y sociedad para citar solo algunas, pero a nuestro juicio la obra que mejor resume el pensamiento del autor está representada por una colección de cuatro conferencias bajo en título de La sociedad carnívora. Por razones de espacio solo me ocuparé de la primera y agrego que en la tercera luego de renegar del stalinismo afirmó que la construcción de la nueva izquierda “tal vez probablemente va a ser construido en Cuba, tal vez se está construyendo en China [de Mao]”
Esta colección se publicó en 1969 al año siguiente del mayo francés cuya cabeza intelectual más destacada fue precisamente Marcuse. En esta nota periodística me voy a concentrar en pasajes de este último libro, como  queda dicho, de su primera conferencia. La potencia oratoria y su estilo como escritor cautivó y cautiva multitudes, muy especialmente a jóvenes universitarios de todas las latitudes y a predicadores de varias religiones.
Lo primero que es necesario decir respecto de Marcuse y en general de los dirigentes de las izquierdas es su perseverancia en sus ideas y, sobre todo, su coraje para exponerlas sin rodeos y siempre caminando en dirección al fondo de lo que estiman son los problemas a resolver. Para volver a Hayek, por eso en el ensayo de su autoría que acabamos de citar exhibe como ejemplo a los socialistas por los motivos apuntados en contraste con muchos que se dicen liberales pero son timoratos y prefieren esconder y disimular sus propuestas con lo que los primeros terminan corriendo el eje de los debates y estableciendo las agendas correspondientes.
La tesis medular del marcusianismo consiste en sostener que el régimen capitalista ofrece mayores bienes y servicios pero no ofrece vida digna puesto que se crean necesidades artificiales por la publicidad que obligan a las personas a consumir sin descanso para lo cual trabajan en condiciones de autómatas que están todo el día buscando sustento, por ello es indispensable “la liberación del sistema represivo”. La primera conferencia la pronunció en Londres en 1967 organizada por el Instituto de Estudios Fenomenológicos y la tituló “Liberándose de la sociedad opulenta”. Allí Marcuse destaca que “El problema que enfrentamos consiste en la necesidad de la liberación, no de una sociedad pobre ni de una sociedad en desintegración, sino de una sociedad que desarrolla en gran escala las necesidades culturales del hombre así como las materiales –una sociedad que, usemos el lema, distribuye las mercancías entre una porción cada vez mayor de la población”. Necesitamos establecer “el reino de la libertad” y “pasar de lo cuantitativo a lo cualitativo” lo cual “presupone la abolición de las instituciones y mecanismos de represión”, que debe llevarse a cabo  por hombres que tengan las nuevas necesidades. Esta es de otro modo la idea básica subyacente en el propio concepto de Marx”. Hay que vencer al capitalismo “con propiedad privada de los medios de producción” que conducen a “un desperdicio acelerado”, se trata del establecimiento de “una sociedad libre que es bloqueada por la sociedad opulenta” en la que vivimos “la completa degradación del hombre hasta convertirse en objeto” donde “el resultado es una existencia humana mutilada, defectuosa y frustrada”. Subraya la “abolición del trabajo, el fin de la lucha por la existencia, es decir, la vida como un fin en si misma y no más como un medio para un fin” lo cual “presupone un tipo nuevo de hombre” que no esté sujeto más a los dictámenes de la lucratividad y la eficiencia capitalistas” puesto que “creo que la idea de un universo así también guió el concepto de socialismo de Marx”. “Es innecesario decir que la precondición para ese cambio cualitativo reside en la disolución del sistema existente” donde se encuentra “la amenaza del desempleo tecnológico”, en resumen, “debemos enfrentar el adoctrinamiento para la servidumbre con adoctrinamiento para la libertad”. Este es un extracto de la primera conferencia y la más extensa de la selección que comentamos.
Veamos estos temas centrales por partes. En primer lugar la importancia de la propiedad privada. Como se ha reiterado en muy distintas ocasiones, debido a que la naturaleza no provee de todo para todos todo el tiempo, es imprescindible asignar derechos de propiedad a los efectos de que los más eficientes para atender las demandas del prójimo tengan como premio ganancias y los que yerran tengan como castigo quebrantos. De este modo los respectivos patrimonios no son irrevocables sino que dependen de las votaciones diarias de las personas en el supermercado y afines. Este es el sentido de la antes mencionada “tragedia de los comunes” que ilustra los pésimos incentivos cuando todo es de todos y, por ende, de nadie. De más está decir que el sistema se contradice cuando irrumpen empresarios prebendarios fruto de la inaceptable alianza con el poder político para así explotar a sus semejantes.
En segundo lugar, la abolición del interés personal es una quimera contraria a la naturaleza del hombre puesto que si no estuviera en interés del sujeto actuante actuar como actúa nada explica su motivación. En este contexto, fabricar un hombre nuevo que no proceda por su interés ya se trate de acciones nobles o ruines es pretender torcer la naturaleza de las cosas arrogándose el planificador facultades propias de un tirano a costa de sufrimientos, sangre y muertes sin que puedan crearse seres distintos a lo que son (afortunadamente puesto que es inimaginable la cooperación social sin el interés personal que la mueve).
Tercero, el deseo de lucro está también en la naturaleza del hombre puesto que toda acción apunta a estar en una situación mejor respecto a la anterior al acto desde la perspectiva de quien lo lleva a cabo. No hay ninguna acción entonces que no persiga una ganancia sea psíquica o material. Este motor hace que en una sociedad libre cada uno para mejorar su situación deba mejorar la de sus vecinos, de lo contrario no obtiene la ganancia que pretende sea en una conversación, un rezo, un acto de caridad o una transacción comercial. Desde luego que esto también ocurre en los ladrones y asesinos, de allí la importancia de marcos institucionales que abran de par en par las posibilidades de intercambios voluntarios y pacíficos y se bloqueen actos que lesionan derechos de terceros.
Cuarto, las supuestas necesidades artificiales creadas por la publicidad presupone la imbecilidad de la gente excepto, por ejemplo, los que adquieren los libros de Marcuse. Una cosa es intentar persuadir a la gente y otra bien distinta es imponer un producto. Si esto último fuera así, con suficiente publicidad podría convencerse a la gente de volver a la luz de las velas con precios muchos más altos que la electricidad y así sucesivamente.
Quinto, el alegado desperdicio en el sistema capitalista no es tal puesto que dadas las circunstancias imperantes se saca el mayor provecho de los recursos disponibles y quienes no proceden en esta dirección ven mermado su patrimonio. Cuando se dice que en sistemas capitalistas se descartan bienes es porque se le atribuye más valor a lo humano ya que arreglar o enmendar el bien con averías resulta más caro que adquirir uno nuevo, sin perjuicio de los reciclados de lo anterior. Sin embargo, en países donde no tiene lugar el capitalismo es típico ver bicicletas y otros aparatos emparchados de los modos más rudimentarios puesto que es muy barata la mano de obra precisamente porque las inversiones son reducidas como consecuencia de sistemas anacrónicos del estatismo imperante.
Sexto, la así llamado desocupación tecnológica pasa por alto el hecho de que toda mejora en la productividad libera recursos humanos y materiales para atender otras necesidades que aun no han podido satisfacerse debido a que los siempre escasos recursos estaban esterilizados en la áreas anteriores. El empresario está siempre atento a nuevas capacitaciones para sacar partida de los arbitrajes que se presentan al poder encarar emprendimientos inconcebibles antes de la introducción de la tecnología desconocida hasta entonces.
Séptimo, tengamos en cuenta que “el reino de la libertad” no puede darse donde se imponen conductas contrarias a las que la gente prefiere. Administrar compulsivamente vidas y haciendas ajenas es característico de regímenes totalitarios fruto del adoctrinamiento que sugieren los simpatizantes de la nueva izquierda (tan vieja como la original) donde el hombre se cosifica y pierde su dignidad.
Octavo y por último, si por consumismo se entiende dar rienda suelta a una manía desesperada por adquirir productos sin ton ni son debe subrayarse que no es responsabilidad del sistema libre, abierto y competitivo sino el resultado de algunas manifestaciones de deterioro axiológico que no se corrige con el uso de la fuerza: es como echarle la culpa al cartero por una mala noticia. La sociedad abierta permite elegir donde cada uno asume la responsabilidad por lo que decide.
Cierro con otros comentarios de Marcuse bajo otros títulos de la selección que comentamos, los que deben ser especialmente atendidos por algunos de los que se consideran liberales pero son refractarios a decir toda la verdad. Son sobre la importancia de la teoría, sobre los conformistas y sobre la necesidad de ir al fondo con las ideas: “Si la izquierda se pone alérgica contra las consideraciones teóricas, entonces algo no funciona en la izquierda”; “La izquierda debe hallar los medios adecuados para quebrar el conformismo” y el título de una de sus conferencias que lo toma de un grafiti parisién del célebre mayo que debe ser adecuadamente sopesado para aquellos timoratos que creen que ser práctico es repetir las gansadas del momento en lugar de correr el eje del debate: “Seamos realistas, exijamos lo imposible”.
A cuarenta años de su muerte, muchos son los que extrañan la vibrante oratoria y la encendida prosa de Herbert Marcuse. Hoy resuenan sus ideas de la llamada nueva izquierda en academias, en púlpitos, en congresos y hasta en reuniones sociales a sabiendas o no de su origen.

miércoles, febrero 27, 2019

Brasil suspendió el ingreso de peras y manzanas argentinas. La medida obedece a la detección de la plaga Carpocapsa, un gusano que afecta a estas frutas, e impacta directamente a la producción del Alto Valle del Río Negro.

Brasil suspendió el ingreso de peras y manzanas argentinas.

La medida obedece a la detección de la plaga Carpocapsa, un gusano que afecta a estas frutas, e impacta directamente a la producción del Alto Valle del Río Negro.
La interrupción de las compras brasileñas de peras y manzanas rocedentes de la Argentina es un duro golpe para las exportaciones del sector frutihortícola , en particular la que se concentra en el Alto Valle del Río Negro.
A través de una resolución publicada en el Boletín de la Unión de Brasil, el gobierno de Jair Bolsonaro comunico que a partir del 26 de febrero dejaran de ingresar estos productos argentinos debido a los estrictos controles sanitarios.
La resolución expresa que el director del Departamento de Sanidad Vegetal e Insumos agrícolas resuelve “suspender el plan de trabajo que implemento el sistema integrado para el decrecimiento del riesgo asociado a la plaga de Cydia pomonella para la importación de las frutas frescas de pera (Pyrus spp.), manzana (Malus spp.) y membrillos (Cydonia de forma oblonga) procendentes de la Republica Argentina”, vigente desde noviembre de 2015.
La Carpocapsa o Cydia pomonella es una plaga también conocida con el nombre de gusano o polilla de pera y la manzana, es la principal plaga para estos frutos, así como para el nogal y el membrillero.
El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) de Argentina fue notificado en las últimas horas por el Ministerio brasileño de Agricultura (MAPA por sus siglas en portugués) del cierre de la frontera con Brasil para la fruta de la región.
Se trata de una grave noticia para la economía de Rio Negro y Neuquén en ya que el mercado hacia el país vecino representa el ingreso por 150 millones de dólares. El cierre del mercado brasileño amenaza el desempeño del sector, en situación vulnerable como le sucede a muchas economías regionales.
Un informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) revelo que el sector de peras y manzanas, concentrado en el Alto Valle de Rio Negro y Neuquén – que genera 28.000 empleos transitorios al momento de la cosecha- enfrenta costos de producción que superan ampliamente los precios finales que reciben los productores. El costo de ambas frutas es de 12 pesos por kilo, y el productor recibe 6 pesos por kilo de manzana y 4 pesos por la pera.

http://supercampo.perfil.com/2019/02/brasil-suspendio-el-ingreso-de-peras-y-manzanas-argentinas/

AVELLANEDA, SANTA FE. AVELLANEDA, BASTIÓN FRIULANO.

AVELLANEDA, BASTIÓN FRIULANO.


Cuenta la historia que las cien primeras familias oriundas del Friuli (Italia) que poblaron estos pagos llegaron al puerto de Reconquista a fines de 1878, en una balsa para ganado remolcada por un pequeño vapor. Varios días y penurias después, en enero de 1879, cruzaron el arroyo El Rey y tomaron posesión de las tierras donadas por el presidente Nicolás Avellaneda: 100 hectáreas para cada una, que los colonos pidieron reducir a 36 para poder defenderlas del probable ataque indígena. Traían con ellos su lengua furlan, su orgulloso linaje campesino y varios oficios ancestrales: purcitâr (faenar cerdos), marescalc (herrar caballos), cramârs (buhoneros de a pie), rivindulari(vendedoras de hortalizas). Ese espíritu se palpita recorriendo los siete parajes que componen el municipio –El Timbó, Santa Ana, El Carmen, Avellaneda Oeste, La Vertiente, Moussy, La Colmena– donde los descendientes de aquellos pioneros aún cultivan el amor por el terruño, el trabajo y la familia y juegan a las moras cuando se presenta la ocasión. Así lo relata Bruno Zupel, quien nos recibe con la mesa puesta en Los Brunos Lodge, un caserón "hecho a la antigua usanza" y orientado al sureste para que el sol pegue todo el año en sus amplias habitaciones. Guitarrero y cantor, farmacéutico de profesión y coleccionista todo terreno, Bruno es la viva encarnación del legado de sus mayores: ayudado por su esposa diseñó y construyó esta casa y, casi todos los objetos que vemos aquí y en sus otros hospedajes, salieron de sus manos temerarias a la hora de resignificar materiales.

Al despuntar el alba rumbeamos hacia el Bajo Venicapara la primera incursión terrestre en el mayor atractivo turístico de la zona: el Jaaukanigás. Un humedal de 492.000 hectáreas –primer sitio Ramsar en el río Paraná– donde convergen riachos, arroyos, lagunas, esteros, madrejones, bañados e islas. Jaaukanigás (pronunciar yaukanigas) significa "gente del agua", y era el nombre de una de las tres parcialidades que –junto con los riikahé o "gente del campo" y los nakaigetergehé o "gente del monte"– componían la nación de los abipones, moradores de estas vastedades desde, al menos, dos mil años antes de la llegada del huinca. Así los identificó el jesuita Martín Dobrizhoffer, quien por supuesto intentó, y en algunos casos logró, evangelizarlos. La entrada a los Palmares está "al costadito" del Club Defensores de la Costa. Como se estila en estos casos, el propietario del campo lindero –primo de Gustavo Venica, nuestro anfitrión– abre la tranquera y anticipa que será difícil alcanzar el Paraná. Dicho y hecho: llovió varios días seguidos y el barro nos obliga a volver un kilómetro antes de la costa. En el trayecto, aves de todo porte y plumaje, huellas de zorros entreveradas con los surcos que abren las camionetas, tacuaras, camalotales y una palmera de cuatro gajos, única en su "especie" y en el planeta: según dicen, un emblema de los cuatro hermanos Venica que echaron raíces en el Nuevo Mundo.



EL JAAUKANIGÁS EN PIRAGUA
En el largadero del Club Caza y Pesca, Alejandro Velázquez empuja las piraguas al río para una travesía que promete descubrir "el Jaauka" de manera relajada. Internándonos por la Laguna de los Deseos hacia los bañados del San Jerónimo, cruzamos barcas de pescadores que esperan el pique amparados bajo la abigarrada selva en galería donde imperan ingás, timbós y curupíes (los cazadores furtivos preparan con su savia el pega-pega, un adhesivo para atrapar bichos incautos). En la copa de un aliso, un mono carayá grita alarmado. "Habrá visto una curiyú o una ñacaminá", comenta Alejandro. Son serpientes constrictoras que –como el tuyango, la garza mora, el jabirú, el pato cuchara y el pato marueco– integran la fauna silvestre. En Tres Bocas, sobre el brazo del arroyo Amarillo, acampamos para la infaltable mateada con masitas y garrapiñadas elaboradas en la región. Regresamos aguas arriba por un canal estrecho flanqueado de casillas, esquivando remansos.
El Circuito de Turismo Rural Sabores de mi Tierra permite conocer a los productores locales, ver cómo trabajan y saborear delicias de primera mano. Cortos de tiempo como estamos, sólo alcanzamos a visitar a dos. Raúl Braidot, "de profesión manisero", siembra tres hectáreas de maíz confitero una vez al año y lo cocina como se hacía antes: en horno de barro. Pero cuenta con un aliado para agilizar el trámite: la máquina clasificadora que inventó su hijo Adrián, un tambor de lavarropas que, girado a mano, va descartando los maníes más pequeños. En Nonna Dora, otro de los establecimientos que participan del programa Agregar Valor, Nisi Delbon prepara sabrosísimos crostij sobre una mesa larga flanqueada por viveros. La receta –heredada de su madre, Victoria Urbani– se diferencia por el uso de levadura y el agregado de granitos de sal. Rematamos con ravioles caseros con pollo en el Il Nonno, en el viejo Almacén de Longhi, parada obligada de los vecinos cuando cae la tarde.
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martes, febrero 26, 2019

Mensajes de la Virgen de Medjugorje.

Mensaje de la Virgen en Medjugorje del 25 de febrero de 2019.
“¡Queridos hijos! Hoy los invito a una vida nueva. No importa cuántos años tengan: abran su corazón a Jesús que los transformará en este tiempo de gracia y ustedes, al igual que la naturaleza, nacerán a una vida nueva en el amor de Dios y abrirán su corazón al Cielo y a las cosas celestiales. Yo estoy aún con ustedes porque Dios me lo ha permitido por amor a ustedes. Gracias por haber respondido a mi llamado.”



MADRE DEL AMOR HERMOSO.

Interceda por nosotros, Señor, la gloriosa Virgen María, que, adornada con los dones del Espíritu Santo, te agradó a ti y engendró para nosotros a tu Hijo Unigénito, el más bello de los hombres, para que, rechazando la fealdad del pecado, busquemos sin cesar la belleza de la gracia. Por nuestro Señor Jesucristo.

Fuente de información e imagen: Mensajes de la Virgen de Medjugorje - Facebook.

El nacimiento del padre de la Patria. Páginas de la historia-"Hombres que volaron alto, dejaron huellas profundas." Por José Narosky.

No es fácil aludir a la figura de San Martín sin que parezca una lección de historia. Pero esta no es mi pretensión ni tengo los conocimientos necesarios. Trataré de encontrar en este ser humano excepcional mencionando algunas facetas que lo distinguieron en sus 72 años de vida.
Son innumerables las anécdotas que revelan su noble condición humana.
Sus padres, españoles, tuvieron 5 hijos. El menor fue José de San Martín. Y cuando este nació, su padre, Juan de San Martín, tenía ya 50 años. Era también militar y gobernador del departamento correntino de Yapeyú, donde nació nuestro protagonista de hoy un 25 de febrero de 1778.

Es increíble que una vida tan rica en acción haya sido también tan plena en hechos espirituales. Y digo rica en acción porque combatió en Africa, en España, en nuestro país, en Chile y en Perú. Pero San Martín sabía, siendo un militar, que una guerra aun siendo justa, podía dañar más que una paz injusta.
Era sí, de carácter fuerte. Odiaba la violencia y comprendía que las turbas -incluso aquellas que lo aclamaban- no tienen opiniones. Sólo tienen impulsos.
Un episodio poco conocido es su situación anímica durante el combate de San Lorenzo. San Martín, que tenía en ese momento 32 años, estaba casado hacía muy poco tiempo con María de los Remedios de Escalada. Su padre ya había fallecido y su madre, enferma en España, no había podido asistir a la boda de su hijo.
El primero de febrero de 1813, a escasos dos meses de su casamiento, recibió la orden de marchar, con su Regimiento de Granaderos a Caballo, hacia Santa Fe, para observar los movimientos de una fuerza española que había remontado el Río Paraná. Su joven esposa, Remedios de Escalada, de sólo 15 años, pero de fuerte carácter, estaba ligeramente enferma. Le pidió que no acudiera a Santa Fe.
Además, al mismo tiempo, San Martín había recibido noticias que su madre, que tenía ya 75 años, había enfermado gravemente en Europa -moriría al mes siguiente- y quería verlo antes de morir. Y estaba también la voz de la patria, que es a la que en definitiva, obedeció ciegamente.
Esa era la situación espiritual en la que San Martín llegó frente al Convento de San Lorenzo y libró la histórica batalla, en la que triunfó y fue ascendido a coronel mayor. El resto de su brillante campaña militar, que culminaría con la libertad de Chile y de Perú, es bien conocida.

Como también lo son su renunciamiento a todo beneficio material y a cualquier cargo público. Porque su verdadera recompensa era la satisfacción del deber cumplido. Es que muchos son el barniz. Pero pocos, como San Martín, son la madera.Y finalizo con una breve anécdota.
Previo al cruce de la cordillera de los Andes y la posterior liberación de Chile y de Perú, estando su ejército acampado todavía en Mendoza, San Martín ordenó a un soldado que custodiaba el depósito de pólvora que no permitiese a ningún militar que usase espuelas, penetrar en ese recinto. Porque al rozarse, estas podrían encender una chispa y provocar una explosión.
Al día siguiente, San Martín, que precisamente calzaba espuelas, pasó por el citado polvorín. Quiso inspeccionarlo. Encontró al mismo soldado, que no había olvidado su orden de no permitir a nadie el acceso.
-No puede pasar con espuelas, mi general.
-Tengo urgencia, soldado. Apártese, por favor.
-Discúlpeme mi general, pero tengo una orden y la debo cumplir.
San Martín se retiró simulando ofuscación. Horas después mandó llamar al subordinado, que acudió atemorizado por la posible sanción.
-Lo felicito, soldado. Por su sentido de la obediencia y por haberme dado una verdadera lección. Queda ascendido a cabo.

Esta anécdota es propia solamente de los grandes espíritus. Porque se necesitan virtudes para descubrirse carencias.
Y esta breve anécdota trae a mi mente este aforismo para este grande de la patria:"Transar en un principio, es transar en todos los principios. Hombres que volaron alto, dejaron huellas profundas".

Publicado en Diario "La Prensa", 25 de febrero de 2019.

En vez de "visita sorpresa", montaje de la campaña de Cambiemos La amiga pobre de María Eugenia Vidal En el video, la mujer agradece que el Gobierno diga “la verdad”. Se trata de Patricia Erazo, responsable de un comedor en Escobar, que ya había estado en un video con Stanley y en otro con Robledo.

La gobernadora María Eugenia Vidal sufrió otro tropiezo en su cibercampaña. Tras subir a las redes el video de una visita “sorpresa” a la casa de una desocupada –que se desarma en elogios al gobierno, al que le agradece que “esté diciendo la verdad”– un usuario descubrió que también la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley, y el ex subsecretario de Juventud de Cambiemos, Peter Robledo, habían grabado spots de recorridas-sorpresa en las que se encontraron con la misma mujer, y en la misma casa. La credibilidad de los timbreos de Cambiemos sigue en baja. 
Los cara a cara son el eje del marketing político del macrismo. Teniendo en cuenta que se trata de la fuerza que más invierte en la cibercampaña –y que los hogares pobres no escasean-, el uso repetido de la misma villa e incluso de la misma visitada terminó convirtiendo el asunto en viral.
El videogaffe se prestó fácilmente a lecturas irónicas. “Hace cuatro años que vivo en un país realista... ahora sí puedo decir que hace cuatro años que vivo en la realidad, que me están diciendo la verdad”, asegura paradójicamente la mujer en su encuentro con la gobernadora. 
También son sorprendentes los argumentos con los que expresa su apoyo a Cambiemos: “Yo creo en ustedes, creo ciegamente”, dice a Vidal, para a continuación contar que no tiene trabajo y que incluso “mis hijos salen a buscar laburo y no tienen”.
El video, breve, contiene otra idea del mismo corte. La mujer se queja de que “todo el mundo piensa que al pobre se lo compra con algo”. Luego explica por qué a pesar de no tener más que privaciones, va a votar a Cambiemos: “al pobre denle convicciones, denle un fundamento. Díganle ‘vas a ver que al final del camino tus hijos, tus nietos, van a estar mejor de lo que vos estuviste’”. Finalmente, ese estar mejor se reduce a bien poco: “Ustedes van a lograr que mis nietos vayan al colegio, que no se preocupen por el desayuno”, se emociona la dueña de casa.
La imagen de la grabación es muy simple, bien limpia. Un fondo de paredes de chapa, un equipo de mate en la mesa y la conversación entre la mujer y  María Eugenia Vidal, ataviada con los colores de la bandera. La gobernadora escucha con actitud atenta y compasiva. Toma de la mano a la mujer y sólo habla al final. “Vos decís que crees en mí; yo creo en la gente como vos, y  creo que por gente como vos vamos a salir”, le asegura a modo de cierre. 
Cuando se conoció que los equipos de campaña de  Cambiemos ya habían hecho, con la misma persona (pronto etiquetada como #lapobredeVidal), un spot para Stanley y  otro  para el ex Subsecretario de Juventud macrista, Peter Robledo, la pregunta pasó a ser de quién se trataba. 
Resultó ser Patricia Erazo, responsable de un comedor en un asentamiento de Escobar. Entrevistada por los medios, juró que no sabía que la gobernadora iba a pasar a visitarla el viernes, y que tiene un cartel del Ministerio de Desarrollo Social para que los vecinos vean “que el gobierno te ayuda cuando hacés algo bueno”. En el archivo de los medios zonales pueden encontrarse registro de la presencia de Erazo en actos de campaña de Cambiemos en el distrito.
La campaña de Vidal viene sumando tropiezos del mismo tipo, como el spot de la taza mágica: la gobernadora, desde su despacho, hace un llamado telefónico “sorpresa” a una vecina de City Bell que sufrió un robo. Por un descuido, el video sufre un error de continuidad, por el que una taza apoyada junto al teléfono cambia súbitamente de forma y de color. Esto puso en evidencia que estaba editado y que la supuesta charla no era lo que parecía.  La semana pasada ocurrió un hecho de gravedad mayor: directivos, docentes y auxiliares de un jardín y una secundaria de La Plata denunciaron que los chicos que asistían a una colonia de vacaciones habían sido utilizados para filmar un corto de la gobernación sobre los supuestos avances en la educación pública. Los responsables de producir el spot habían seleccionado varios grupos de niños, los vistieron con guardapolvos y los filmaron en escenas escolares luego editadas como reales. 
En los timbreos de la gobernadora también ya pasó que los vecinos abran la puerta antes de que Vidal llegara a tocar el timbre. Es evidente que en todos se usan micrófonos tipo jirafa, de tamaño considerable, que tienen que ser sostenidos por un asistente, para lograr buena calidad de aire. Otros eventos son transmitidos bajo el supuesto de que están en vivo... pero tienen subtítulos. 
 También le pasó a Mauricio Macri con un spot que lo muestra viajando en colectivo y charlando con los pasajeros. Se suponía que se trataba de un viaje real, pero había sido grabado en un colectivo parado a un costado de una ruta, con extras. 
Siguiendo esta escuela, el intendente macrista de Pilar, Nicolás Ducoté, quiso simular su preocupación con un video que en el que se mostró visitando en lancha las zonas afectadas por un temporal. Pero en realidad estaba en una zanja al costado de la ruta 8. 
Publicado en el diario "Página/12", 24 de febrero de 2019.

SATISFACCION


Pirulo de tapa SATISFACCION.

Los recitales se han convertido en caja de resonancia del malestar de la gente con Mauricio Macri. En las canchas de fútbol nació el hit del verano que se repite en más de un espectáculo masivo. Fue lo que ocurrió días atrás en el festival “Sabores del Litoral”, en Paraná. Allí, con transmisión en vivo de la Televisión Pública, Miguel Mateos salió al escenario y tras explicar que “la única razón por la que hemos venido es por un poco de satisfacción” remató: “Un poco de satisfacción Mauricio Macri la puta madre que te parió.”

Publicado en Página/12,24/02/2019.

Malvinas: Prohibido falklanizar el Viaducto. Por Edgardo Esteban.

En las cercanías del estadio de Arsenal hay un cartel que indica la distancia existente entre Sarandí y nuestras Islas Malvinas: 3.332 kilómetros. A pocos metros de ese cartel, en el club Arsenal de Sarandí, Mark Kent, embajador del Reino Unido, iba a ser homenajeado este domingo. Uno de los agasajos consistía en la presencia del diplomático en el  partido del equipo local frente al de Los Andes.
En twitter circula una foto del embajador británico junto al periodista Reinaldo Martínez con la siguiente leyenda: @Armartinez Aquí le traje al embajador @KentArgentina (hincha de Arsenal de Londres) la invitación a conocer el Viaducto, el Julio Humberto y @Arsenal solidario. Tenemos que hacerlo de @ArsenalOficial.
Los socios del club manifiestan tener desconocimiento sobre dicha  invitación. Por otro lado, dirigentes de Arsenal de Sarandí deslindaron responsabilidades sobre la actividad, dando a entender que quien organizó el evento fue el periodista deportivo y simpatizante del club, Reinando Martínez.
¿Qué pensó el periodista cuando organizó esta actividad? ¿Fue en soledad, apelando al cholulismo ingenuo, sin tener en cuenta que quienes amamos al fútbol y la causa Malvinas no íbamos a reaccionar? ¿O acaso el fútbol y Malvinas no son dos de nuestras mayores pasiones que nos unen? En la memoria colectiva, viven los dos goles de Maradona en el Mundial 86 al seleccionado inglés: La mano de Dios y el mejor gol en la historia de los mundiales. La magia del barrilete cósmico fue potenciada para los argentinos y la causa Malvinas por quien era el rival.
Cada vez que voy al estadio Monumental a ver a River Plate, es conmovedor encontrar en la tribuna, una inmensa bandera con la imagen de nuestras islas Malvinas. No hay equipo de fútbol en el país, incluido el de Arsenal de Sarandí, que no tenga algún símbolo de las islas en sus tribunas. El Club Atlético Lanús, por ejemplo, tiene una imagen de las Islas en la manga de su camiseta. Cabe destacar que cada dos de abril, cientos de clubes, homenajean a los ex combatientes. Multiplicando por miles el reconocimiento que nace del pueblo para con la historia detrás de Malvinas. Demostrando, de esta manera, que en el fervor popular anida una verdad inobjetable: Las Malvinas son argentinas.
El representante del Reino Unido ante nuestro país, no es justamente Heidi o una “Carmelita Descalza”, se trata de un hábil diplomático que trabaja intensamente para “falklanizar” la Argentina y la región. Es en este orden, que la embajada británica auspició, en el hotel Sheraton en diciembre del 2018, los premios FOPEA a la investigación del periodismo independiente argentino, donde por acción u omisión no se hizo referencia al cierre de numerosos medios de comunicación y de los 3500 periodistas despedidos.
Mientras el Reino Unido falklaniza, el Gobierno de Mauricio Macri actúa en complicidad facilitando, con total impunidad, el avance británico sobre nuestro territorio austral marítimo y las riquezas de nuestro mar y suelo austral.
Esta no fue una simple invitación a un embajador amigo a ver un encuentro futbolístico. Se trató de una acción más para efectivizar políticas colonialistas, manipulando el vinculo que tiene pueblo argentino para con el fútbol como con la causa Malvinas.
Como consecuencia del enojo de los hinchas de Arsenal y ex combatientes de Malvinas que comenzaron a repudiar la actividad y ante repercusión negativa generada en las redes sociales, finalmente el club decidió suspender la actividad de cholulismo criollo con el embajador británico.
Parece que la cuestión Malvinas sigue viva en el pueblo argentino. Seguramente, como en todas las tribunas, este domingo flameará en la cancha de Arsenal de Sarandí una bandera con nuestras islas Malvinas.
Viva el fútbol, que inventaron los ingleses, pero las Malvinas son argentinas.
* Periodista, ex combatiente de Malvinas; integrante del Grupo Por Soberania (GPS).
Publicado en el diario "Página/12", 24 de febrero de 2019.

lunes, febrero 25, 2019

Enrique Pinti, sobre Cristina vs. Macri: "Es la horca o la guillotina".

El actor atacó muy duro a los políticos y criticó la gestión de Macri: "confundió un país con un club de fútbol" y lo comparó con Marcelo Tinelli.
Al ser consultado sobre si Macri es o no un buen presidente, dijo: "¡No! Es lo mismo que (Marcelo) Tinelli. Ojo, no es una cosa personal: no sabe un carajo ese señor. Macri arruinó al padre, arruinó las empresas que tocó, lo único que hizo bien fue ser presidente de Boca. Y realmente confundió un país con un club de fútbol, y por bueno que sea, eso sí es un drama nuestro".
En una entrevista con Revista Noticias, analizó varias de las "frases hechas" que se lanzan al momento de elegir un candidato. "Nosotros decimos: 'Si es un buen empresario, tiene que ser un buen Presidente'. No, porque una empresa no es un país. Un país es un quilombo de cosas. En una empresa echás a cuatro, ponés a cinco, cerrás la empresa, la volvés a abrir. Un país es otra cosa. Y otra cosa: 'Los ricos no roban'. Los ricos sí roban. Cuando no son muy ricos, roban para hacerse ricos, como los Kirchner".
Crítico de todos los gobiernos, no manifestó sorpresa ante la posibilidad de que Macri sea reelecto pese a la crítica situación actual. "Es posible. ¿Sabes por qué? Porque es la horca o la guillotina. Y a mí la horca me gusta más que la guillotina, la guillotina me parte en dos, no sé qué decirte, es así. Entonces estamos eligiendo lo que menos nos duele o lo que menos creemos que va a doler", lanzó.
https://www.diariouno.com.ar/farandula/enrique-pinti-cristina-vs-macri-horca-o-guillotina-02252019_SJgC3uZ8N

La foto del día. Homenaje en los Estados Unido al Libertador Gral. José de San Martín.

domingo, febrero 24, 2019

La UCR: De Marcelo al ‘Chino’. Primera Parte. POR CARLOS PISTELLI.

La UCR: De Marcelo al ‘Chino’. Primera Parte.

Con la caída de Yrigoyen el 6 de septiembre de 1930, los radicales entran en un espiral de indefiniciones que hoy en día siguen inconclusas. Qué es el Radicalismo? Y qué intereses representan?

 El “Viejo Peludo” de Calle Brasil lo tenía bien en claro. El Radicalismo tenía un papel para la Historia, inclusive la continental; Debía cumplir un papel ejemplar en el Gobierno, moral, justiciero y popular; y la estructura del partido le respondía sin ambajes: Cosa que se cumplía muy a medias. El Partido, su estructura orgánica, era un berenjenal constante resuelto en los triunfos electorales y el ‘patriarcal’ liderazgo de Hipólito. Con su caída, y posterior muerte, todo se fue a la miércoles.

Marcelo capitalizó esa acefalía casi que ungido por el viejo Jefe. Nacido en 1868, contaba ya 63 años al volver al país y entrevistarse con el Dictador Uriburu: “Marcelo”, le dijo Von Pepe, “El Partido es tuyo, pero nada de la chusma yrigoyenista”. Ya sea que le molestó que lo ‘marcelonearan’, ya sea que al porteño de la élite, nieto de ilustres figuras como don Carlos y Ángel Pacheco, no le gustó el trato del salteñito, ya sea que le dio un ataque radical y popular, Alvear no le hizo caso.
 El caso de Marcelo, estudiado siempre a medias, sacando la mediocre biografía de Falucho Luna, comparada con la de Hipólito, muy menor, es tal vez único en la Historia. Un hombre con pergaminos propios, emparentado por familia con las más ilustres del páis, malquerido en el partido por ‘oligarca’, destratado por la aristocracia por volcarse al ‘plebeyismo’, y zarandeado por Yrigoyen, quien lo trataba como a su niño mimado, pero siempre recalcando lo de niño.
 En todo eso pensaba Alvear, seguramente, cuando Uriburu le quiso dictar lo que debía, y observaba como Justo le sonreía amablemente mientras le clavaba el puñal soterráneamente. No! Maximo Marcelo Alvear no había nacido para ser segundo de nadie, y era tiempo de demostrarlo.


 Venía de hacer una presidencia ejemplar, elegido a dedo por Yrigoyen, con el cual fue distanciándose por cuestiones singulares. El Caudillo no podía aceptar la autonomía del Presidente, y éste, protocolar y republicano, mucho menos que su cargo fuera una escribanía de calle Brasil. Miraban las cosas de manera diferente, en casi todo, pero mantuvieron las formas, entre ellos al menos, mientras el Partido sufría una nueva ruptura. Los que la provocaron, armados en su Presidencia (1922-1928), hicieron causa con Justo, su ministro, en 1931. Los yrigoyenistas estaban descorazonados.

¿Y adónde fue a meterse Alvear, a sus 63 años, con una tranquila estadía en París? A la chusma, para convertirse en el Don Marcelo de los pobres, el demócrata de la República, la esperanza de que todo tiempo pasado puede ser mejor. Los que no le querían, le recalcaban su Alvear: Pa’ recordarle que los había abandonado (los oligarcas) y los que no aceptaban sus formas de conducción (pa’ recordarle que era un oligarca). Han sido muy injustos con él. Alvear no era un hombre de dobleces (alguna que otra, señor/señora, es un político de la madre, no un apóstol de Jesucristo) , era franco y sin ambajes. Los forjistas que lo mataban por haber desviado “la línea” del Partido podían decírselo en la cara. Los recibía y se recontra puteaban, diciéndose de bonito, nada. Se carajeaban, y a ninguno se le ocurría sacar los pies del plato. Alvear no echó a nadie del Partido. Todos eran radicales para él, aún los que no le respondieran, y él, con sorna, y ternos, gran puteador si los hubo, decía “este pibe, qué queré, le falta”. “Con Honorio, que se acuesta con todos y piensa que con una confesión se santifica”. Así se lo dijo a Frondizi, alguna vez, a los cordobeses, que le pedían mayor anchura, a los jóvenes que empezaban a nuclearse en su contra. Se sentía a gusto entre punteros, mandando como Patrón de Estancia, llevando la conversación a intereses mutuos, con la pibada, con aquellos intelectuales destacados que le reconocían su prosapia; Con los propios y con los extraños, no era capaz de provocar agachadas ni abusar de la trampa para hacer daño: Si lo sabrá el trampero de Justo, quien le hizo las mil y una, agarrado con una pendeja entre sábanas, hija de un empresario poderoso que pensaba invertir en una obra crucial de su gobierno. Las fotos fueron a parar a Alvear: Se las mandó con un amigo en confianza en sobre cerrado: “Decile a Agustín que tenga más cuidado”, con una sonrisa socarrona.

 
Alvear fue un gran Jefe, sí, Jefe, del Radicalismo. Los que pregonan por Illía o por Alfonsín, le deben una disculpa histórica. 

  En esa cruzada religiosa que todavía los radicales, hoy, los que se consideran así, tienen en su corazón, Alvear cumplió con creces su parte. Si Alem fue el Profeta y Don Hipólito el Pedro y Pablo donde se edificó la Iglesia, Marcelo no desentonó como Papa. El problema para los radicales presentes, es que han montado culto de un cura de Parroquia, al que se le prenden todas las velas. Pero así es la historia, y uno la viene a contar, sin desmitificarla, porque el Radicalismo, aún hoy, sigue siendo, en quiénes se consideran así, un espíritu inmatable, una llama inapagable. Muerto Alvear, ese espíritu y esa llama, fue alimentada, aún por otros, fundamentalmente por el Chino Tripero de La Plata: Don Ricardo Balbín. 

Alvear y Balbín compartieron tribuna en la campaña electoral que le fraguaron al Radicalismo en 1937. Ingenuamente creyó Marcelo que no le iban a hacer fraude. Pensó que esas cosas no se le harían a él, ¡A un Alvear!. ¿Desde cuándo un mitrista apichonado pero mitrista al fin, se para en medios?: Justo hizo lo que creyó prudente, osando todas las habidas y por haber: Impuso sucesor, y andá a cantarle a Gardel. Con esa derrota, se fue apagando el viejo Marcelo. Pero continuó bregando, porque le iba la vida en ello.

COSAS DE MARCELO;

  Marcelo y Alvear, ésa es la cuestión.

 Alvear estaba enamorado de Radicalismo. Y cuando estaba enamorado, era Marcelo, o Don Marcelo, ¡El Pelado!. Seguramente quien lee estas líneas podrá criticar mi énfasis en recalcarlo, en que pierdo la seriedad historiográfica en sentimentalismo nostálgico: Lávese las nalgas, no estamos acá para agradar, estamos para pelear por lo que creemos. Alvear estaba convencido que el partido, ya para él el Radicalismo es un Partido, seguía siendo un camino que debía transitarse sacando las piedras, arrastrando a la gente, de ser necesario, porque el papel que le adjudicaba a su Fuerza Cívica era la redención de la República.
 Los radicales tienen un metejón con eso de la redención republicana, que en los casos de Alem e Yrigoyen iba más allá, y hablaban directamente de la Nación. Creían en las buenas artes de la Constitución para solucionar el drama argentino, como buenos alberdianos, Digo alberdianos, porque la palabra liberal está muy bastardeada hoy en día. Mas cuando ven que con eso no alcanza, les salta un frenesí federalista de los viejos tiempos, y portan armas, estandartes, y van a la guerra, a matar o morir, carajeando y sacándole la lengua a la parca. 

 Ahora cuando Marcelo era Alvear, y su virtud cívica entroncaba con ser razonable, dilapidaba sus quilates. Y no porque se rebajaba, es porque perdía enjundia. Cuando Savarese le dice que las coimas por la CHADE van a destrurir el Partido, se calienta: Vaya y distribuya que yo sé muy bien lo que el partido necesita! Ahí Marcelo perdió los estribos y el rumbo, y el Radicalismo perdió su alma. Esa alma impoluta que habían creado alredor de Yrigoyen. Justo, conocedor del paño, sujeto maravilloso para cantar la justa, jeh, otro desprestigiado al pedo, que debe ser analizado en tiempo y forma, expresó: Son el primer partido de la Historia que se corrompe en la oposición.

 ¿Lo sabía Alvear? ¡Claro que lo sabía! Estaba apretado en la hora, y no se detuvo a calibrar lo que significaba para la historia y para sus laureles el permitir la coima. Y he ahí, en su peor hora, que se nos revela su mejor actuación. Y Ud ahora me dirá que me he vuelto loco. Pues no, porque la historia tiene poco de moral, vaya a la Iglesia o a su madre, a pedírsela. Acá estamos hablando de otra cosa.
 ¿Hubiera hecho lo que hizo Marcelo? Claramente no. Por eso estoy escribiendo esto en un blog que leen, como mucho, cincuenta personas, y no conduzco un partido que significa millones. ¿Eso lo justifica, lo explica? Tampoco. ¿Entonces?

 Llega un momento en la historia de todo personaje público, donde la encrucijada es letal. No hay más que dos opciones. Sentado, y abatido, con la mano de Regina apoyándole el hombro, sintió la presencia de los fantasmas del más allá. Leandro lo palmeó a Hipólito, “ahí lo tenés a tu pollo”, con una sonrisa burlona y despiada. Afligido, Yrigoyen le hablaba: “Marcelo, Marcelo”, le repetía. Alvear le agarró la mano a su mujer, y gritó: “¡Qué carajos querés que hiciera, Yrigoyen!, ¿Dejar el partido en la tranquera?, ¿Aislado, vencido, sin opción de volver a ser? No, yo no soy como ustedes: Yo tengo que hacer lo que tengo que hacer”. Se enlodó hasta los tuétanos, se hizo cargo para la historia de la barrabasada, y siguió adelante. Otras voces lo juzgarán con dureza. Y seguramente me encuentro entre ellas. No se lo han perdonado, a Marcelo. Ni aún en la pobreza material que terminó sus días. Los radicales son ávidos de incorruptibilidad. Y está bien: Pero a veces se necesita de esas miserias para sobrevivir un tiempo, aunque la culpa cristiana azote nuestra conciencia. 

La reconstrucción de un Partido.

  El Radicalismo que Alvear se apresta a conducir en 1931, estaba en jaque. Su papel en la historia, gigante hasta 1930, empieza a diluirse en las tramoyas del Régimen regresado. Alvear tenía que resucitar la vieja mística que se perdía en la larga agonía de Yrigoyen.

 Dejando la historia y las ganas de volver a ganar elecciones, había que reconstruir la fuerza cívica capaz de volver a hacer los milagros de antaño. El partido estaba quebrado, era una entelequia tironeada de reclamos populares y necesidades propias. Los antipersonalistas más enconados se fueron con Justo o hicieron rancho aparte; Los antipersonalistas alvearistas, esperaban todo de él; Los yrigoyenistas con votos le miraban de reojo; las patriadas de los últimos hipolitistas iban perdiéndose en el camino; El partido se tenía que reconstruir.
 Él nunca había estado en ese rol. Fue un brillante lugarteniente de Yrigoyen, que esperó la Presidencia en el ’16, que lo tuvo que cachetear al elegido para que agarrara cuando se hacía el Rosas, que se fue del páis cuando le ofrecían el ministerio de guerra. Su Presidencia no se abocó a organizar el partido, de eso se encargaron Gallo y Melo haciendo desastres. Criticó duramente a Yrigoyen por el golpe “Gobernar no es payar”, no es parloteando que se gobierna, es haciendo. Fue la critica más artera y la que mejor describió el proceso de 1928-1930: “Llegó con los votos que necesitaba en el ’16 pero doce años más viejo”, dirá después. 
 Todo eso está en crisis en 1931. Encima, Yrigoyen vivo. Lo pizarreaban; Todo caudillito con votos y aceptado en las tertulias de Yrigoyen le hacía la contra. Él se iba a Europa cada tanto, esperando su momento, para no tener que codear a personajes de segunda que le arrimaban el ‘bochín’. Cuidadosamente tejió su telar. Al principio operaba para él Ortíz, que viendo que Alvear se perdía en “el populismo” le abandonó agriamente. Nubló a los últimos ministros y jefes del Caudillo, durmió a Honorio recordando su pasado mitrista, y que no le daba el piné. Se hacía rogar. Terneaba (puteaba en buen castellano) cuando le jugaban contra, cuando armó la Convención de Santa Fe y le armaron una Revolución en sus narices. A todos decía que sí, para conformarlos, y entenderlos. Y el Viejo se murió en una de las manifestaciones populares más extraordinarias de los tiempos. Los que quedaban le seguían marcando la cancha, Justo no se la hacía fácil: De La Torre y Palacios, a quien hizo votar, ganaban favores entre el gentío, mientras él apenas aparecía. Falucho Luna le reclama que Lisandro ocupó un papel porque él se ausentó del debate. Es posible. Pero ningún Valdez Cora le dispara a un Alvear, y el Pueblo no se la juega por otro que no sea Marcelo. Él lo sabía más que ninguno. Ya no era el oligarca plebeyado, ni el galerita de la mesa servida: Era el Patricio del Pueblo. 

  Como el Rosas del ’29 o el Adolfito Alsina de tiempos posteriores. Tal vez le faltara el espíritu nacionalista que el Tirano protector de su abuelo, o las triquiñuelas del hijo del masón; pero tenía sus mañas y su gente pa’ jugar su chance en la ruleta de la política nativa. Como Rosas, Adolfito, o Yrigoyen, se estructuró en la provincia de Buenos Aires para mandar el partido. Santa Fe, donde el antipersonalismo había construido su propia clientela, le siguió. Con ese eje, dejó a un lado, sometido a Sabatini, quien nunca pudo hacerle sombra, y a la trenza porteña, yrigoyenista, que se le había atrevido al propio Caudillo. En las provincias sus retratos iluminaban las parroquias que los radicales llaman comités. El papado de Marcelo (a diferencia del apostolado del Caudillo) entendía de las miserias humanas de los que hacen política. Construyó en las convenciones y en sus reelecciones en el Comité Nacional una ‘caterva’ de seguidores rayanos a la genuflexión, pero que eran pilares de una forma de defender la vieja esperanza. Jauretche, con menos votos que Ud. y yo, con sapienza, sí, pero creído más que los cajones de verduras en donde daba furiosas arenga, se lo recuerda sin tapujos. UCR alvearista, UCReduccionista, UCR apaciguada. Allá Arturo con sus cosas en el sótano de Lavalle, además ya se habían puteado por el tema como narré oraciones ha. El otro Arturo de Bs. As. le marcaba que debía volver a la línea intachable de Yrigoyen: “¿Ud me va a dar la plata que necesito para gobernar, doctor Frondizi, Usted? Se me hace el nacionalista pero no lo veo vistiendo ponchos de vicuña: Sus trajes son todos de sastre europeo”. Daba en la tecla del realismo total. Y también soñaba, y soñaba a lo grande, como la gran plataforma electoral del ’37, que reivindicaba cosas que ni el propio Peludo se atrevió a manifestar. 

 En esa campaña, la presidencial del ’37, la del fraude escandaloso, un joven platense arengaba los mitines con una fuerza bíblica que Alvear admiraba. Lo palmeaba al muchacho, “bien mi’jo”, le decía cachetéandolo con una palmada paternal. Fue su momento cumbre. Hasta Sabatini, caudillo a la vieja usanza, envidió como en Córdoba Alvear era vivado hasta el delirio. 

 Le robaron inverosilmente la elección. A él, que se las daba de pragmático, fue nunca tan ingenuo. Desde entonces se arrastró en la derrota, en una militancia perseverante por salvar al país de caer en los flagelos del autoritarismo y la decandencia moral. Se le acusaba de ser cómplice del entuerto. Por donde iba, la gente le pedía la bendición, como si fuera algo más que un simple mortal Jefe Partidario. El Partido estaba agonizando para afuera, pero estaba vivo puertas adentro, porque resurgía una juventud dispuesta a cumplir un mandato, que Marcelo no quería, no estaba dispuesto, o ya los días finales de su existencia no podían concebir. Los homenajes forjaban en leyenda su viejo nombre. Su voz se apagaba fuera de los comités. Su feligresía menguaba con el tiempo. Pero el partido, el partido estaba intacto. Cumplió su cometido. La historia, le exigió mucho más. La historia partidaria no lo considera. Él hizo, y dejó un mensaje, un mensaje como posta, que debía ser retomado:

Ricardo Balbín. Biografía Documentada. Ricardo Soler- Raúl Pistorio.

 Marcelo Alvear, prohombre de la República, Salud!