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...." el pueblo recoge todas las botellas que se tiran al agua con mensajes de naufragio. El pueblo es una gran memoria colectiva que recuerda todo lo que parece muerto en el olvido. Hay que buscar esas botellas y refrescar esa memoria". Leopoldo Marechal.

LA ARGENTINA DEL BICENTENARIO DE LA PATRIA.

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“Amar a la Argentina de hoy, si se habla de amor verdadero, no puede rendir más que sacrificios, porque es amar a una enferma". Padre Leonardo Castellani.

“
"La historia es la Patria. Nos han falsificado la historia porque quieren escamotearnos la Patria" - Hugo Wast (Gustavo Martínez Zuviría).

“Una única cosa es necesario tener presente: mantenerse en pie ante un mundo en ruinas”. Julius Evola, seudónimo de Giulio Cesare Andrea Evola. Italiano.

lunes, septiembre 30, 2019

El artesano que desarrolló una red empresarial: Amoblamientos RENO.

El artesano que desarrolló una red empresarial: Amoblamientos RENO.

A 57 años de su creación como un pequeño talle particular de carpintería, Amoblamientos Reno se erige hoy como una compañía líder en Argentina y la región y con prestigio internacional. Su presidente-fundador cuenta la pobreza. El artesano que desarrolló una red empresarial: Amoblamientos Reno
Las firmes convicciones del éxito.
Reno Arcadigni nació en 1934 en el seno de una familia modesta de Álvarez, localidad vecina de la ciudad de Rosario.
Desde muy pequeño conoció el sacrificio y la responsabilidad. Con sólo siete años de edad, antes de las 7 a.m., repartía el pan que su madre hacía en un horno de barro. “Cuando volvía, me ponía el guardapolvo e iba a la escuela”, recuerda Reno Arcadigni. “Lo primero fue aprender a hablar español, porque al pertenecer a una de esas clásicas familias de inmigrantes italianos hasta allí solo hablaban en ese idioma, pero bueno… no fue difícil y además resultó simpático”.
A los 11 años, ingresó a trabajar en una carpintería de Álvarez, cuyo propietario lo capacitó en muy poco tiempo, a tal punto que rápidamente supo reconocerle la habilidad para el oficio y la voluntad que mostró desde el principio y mantuvo a través del tiempo. Así, siendo casi un adolescente lo participó con un 40% de las utilidades de la empresa, “Por cada peso que yo gane, 40 centavos son para vos”, le dijo, “Pero ocurrió que luego el dueño de la carpintería se jubiló, cerró y me quedé sin trabajo”. El problema era muy preocupante, pero a Reno Igualmente este hecho le sirvió para hacer sus primeras armas en lo que luego sería un futuro más que prominente.
Corrían los años 50, pero nadie imaginaba que aquel adolescente, con hambre de trabajo y desarrollo personal, lograría consolidarse como un prestigioso empresario en el mercado rosarino, regional, nacional e internacional. “Yo necesitaba mejorar mi calidad de vida y para lograrlo empecé a trabajar muy fuerte desde los 18 años”, cuenta Reno.
Con los primeros conocimientos de carpintería incorporados, sumado a su envidiable ingenio y manualidad, y frente a la situación que estaba atravesando Reno decidió trabajar por cuenta propia, “contaba en esos momentos con unos pesitos ahorrados y una bicicleta, que la rasqueteé y la pinté con la máquina de flit”. Así estuvo conformado, entonces, el capital inicial de la que, hoy en día, tras décadas de intenso trabajo, es considerada una compañía líder y vanguardista en diseño y fabricación amoblamientos.
Los primeros pasos de la empresa Amoblamientos Reno fueron en el año 1956 como un taller particular de carpintería. Su fundador recién cumplía, apenas 20 años. Por aquel entonces, Reno tenía un objetivo claro: trabajar fuerte para crecer.
Para alcanzar el reconocimiento que la marca ostenta hoy, Reno Arcadigni debió atravesar un camino de esfuerzo y dedicación durante 57 años. El presidente-fundador de la compañía cuenta que desde muy joven dedicó un importante tiempo de su vida al trabajo. “Esforzado, serio, con grandes sacrificios, pero siempre con mucha fe, esperanza y con objetivos claros. Íntimamente sabía que existía la oportunidad de progresar, y no me equivoqué”, afirma.
Comenzó con su bicicleta oficiando de, como él lo denomina, «carpintero remendón». Según narra, en aquel tiempo, las aberturas no se tiraban, sino que se reconstruían. Entonces, él cortaba el tramo deteriorado y lo reemplazaba por otro nuevo. De esa manera, explica, «yo compraba sólo el material que faltaba, y no el de toda la ventana o puerta, esa fórmula me permitía trabajar con una menor inversión y esto era para mi fundamental».
Con una conducta responsable, Reno Arcadigni supo capitalizar las ganancias que obtenía para empezar a alimentar su suelo. Él anhelaba una empresa importante, líder en el mercado. Por eso, ya en el año de su fundación había redactado un manuscrito en el que estampaba la filosofía de la compañía.
En ella, siendo apenas un proyecto artesanal, consideraba que la honestidad profesional sería el atractivo más importante de la empresa. También centró su pensamiento empresarial en construir un entorno de respeto mutuo, donde sea primordial el trabajo en equipo y la integración de los recursos humanos.
Una de las claves del éxito de Amoblamientos Reno es el impulso al desarrollo, capacitación y motivación de sus empleados; aspecto que muchas veces, por algún motivo, se descuida en las empresas y luego se pagan las consecuencias. «Es muy importante nivelar para arriba», señala.
«El éxito alcanzado fue logrado gracias a la capacidad y esfuerzo constante de cada una de las personas que integramos Amoblamientos Reno S.A. Nosotros impulsamos el crecimiento y el profesionalismo de cada uno de ellos de acuerdo a sus capacidades. Elaboramos anualmente un plan orientado a la capacitación permanente de nuestro staff», reza el manuscrito.
Por otra parte, la pasión que le imprime la empresa a sus trabajos hace de los mismos productos de excelente calidad, otro de los principios fundamentados en aquel manuscrito y que hasta hoy en día es una máxima de Reno. «Hacemos de la calidad una prioridad en nuestro trabajo diario, logrando una constante fiabilidad en todos nuestros productos. Incorporando nuevos materiales, perfeccionando nuestros sistemas de producción, capacitando intensivamente al personal y esencialmente, ofreciendo un producto innovador y superior», enuncia.
Otro principio importante para Reno Arcadigni es la funcionalidad de sus productos. «Nosotros sentimos la necesidad de decirle al cliente, qué es lo que le conviene. Una adecuada funcionalidad es una solución de mucha importancia a lo largo de la utilización del amoblamiento», considera el empresario. «Aunque los muebles que producimos sean miles, sabemos que cada familia tiene una necesidad diferente y nuestros amoblamientos serán parte de la vida de cada una de ellas», expone la empresa en su filosofía.
Siempre a la vanguardia.
Basados en tres premisas fundamentales: satisfacer al cliente, lograr el bienestar de su gente y ganar dinero, desde sus inicios netamente artesanales, la empresa se ha ido sofisticando y expandiendo a todo el país.
A lo largo de su historia, la innovación e inversión en nuevos sistemas productivos fueron también asuntos de desvelo para Reno Arcadigni. «Estamos a la vanguardia en muchos aspectos: fuimos los primeros en introducir el mueble de cocina modulado en nuestro país y casi siempre los primeros en incorporar nuevos materiales, que después nuestros colegas van incorporando».
La compañía ha ido marcando tendencias en cuanto a nuevos diseños, materiales y combinaciones de los mismos en los mobiliarios, sobre todo, destinados a los amoblamientos de cocina de los hogares. En la década del 70, Reno fue el primer empresario del rubro en importar maquinaria automatizada de Italia, Alemania, Holanda y Austria.
En la década siguiente, ya gozando de un crecimiento exponencial, la compañía instaló un departamento de investigaciones y diseño en Europa, con el objetivo de seguir de cerca los últimos avances del primer mundo e incorporarlos en Argentina.
Luego, llegarían los años 90, que a la compañía le sirvieron de catapulta al exterior. Amoblamientos Reno trascendió fronteras y comenzó a exportar a los países de la región (Chile, Uruguay, Bolivia, Paraguay y Venezuela) y a otros como Costa Rica, España y Estados Unidos, participando en ellos tanto en importantes edificios como en unifamiliares y además en los más destacados proyectos de Argentina.
«Creemos que hay que pensar en el comercio exterior siempre, no sólo cuando tenemos un cambio monetario favorable, porque el comercio exterior te permite jugar en las grandes ligas y competir con los grandes del mundo. Aunque no ganes el campeonato, te permite adquirir conocimientos que sirven para el mercado interno», sostiene Arcadigni.
En esta década de finales de siglo XX, además, la empresa creó un departamento de «prueba y envejecimiento de nuevos insumos y materias primas», logrando someter a sus productos a supervisiones constantes que aseguren la excelencia. Así, en 1999, la compañía obtuvo la certificación de la norma internacional ISO 9001.
El aporte familiar.
En los últimos años, la empresa ha logrado consolidar su arista comercial, a la par de la industrial, gracias a la formación universitaria de los dos hijos de Reno (Pablo y Aníbal). Ellos empezaron en la compañía, desde niños, enderezando clavos para reutilizar los mismos. Una vez que adquirieron experiencia y conocimientos en el rubro, y con sus estudios vinculados al área comercial, comenzaron a desarrollar estrategias de ventas para la empresa.
“Hoy, aunque la actividad más importante de Reno es la industria, ponemos mucha atención en el aspecto comercial. Tenemos varios canales de comercialización: proveemos a las obras en construcción y a las familias, y también hacemos exportación, pero comprendiendo la pendularidad de nuestro país en ese punto. Siempre destinamos un porcentaje de la producción que no afecte nuestra atención del mercado interno”, explica Reno.
Con un caudal de ventas ya destacado, en los comienzos del nuevo siglo, la compañía decidió activar un sistema de franquicias que le ha permitido tender una red en todo el país. Hoy en día, cuenta a lo largo de todo el país con más de 70 socios comerciales (franquicias). Como dato especial, uno de ellos inauguró su franquicia en el primer semestre de 2013 en la ciudad de Ushuaia. A las franquicias se les deben sumar los locales propios de la empresa, instaladas en las ciudades donde no se concretaron concesiones, como, por ejemplo, en Rosario.
En otro momento importante de su vida, en el año 2011, Amoblamientos Reno entendió que sus muebles para cocinas ya habían adoptado un reconocimiento a nivel nacional, regional y mundial, por lo que decidió ampliar su oferta con nuevas líneas de productos. Así fue como surgieron RenoLife, dedicada a la fabricación de amoblamientos de cocina y placares en general; Reno Exclusive, que apunta a un nicho de mercado “Premium” a través del sistema Minoru; y Esenciales, una unidad de negocios anexada con el fin de brindar soluciones de organización y funcionalidad para los espacios donde se instalan sus mobiliarios.
Cada persona cumple una misión.
Reno Arcadigni, a esta altura de su vida, si bien asevera que ha cedido, en forma gradual, gran parte de la misión ejecutiva de la compañía a sus hijos, aclara que aún mantiene la pasión por participar en los negocios de su emprendimiento fundado hace 57 años.
“Para la salud de la empresa, la mía y la de todo lo que nos rodea es muy bueno que mis hijos y sus equipos tomen las decisiones. No tengo dudas que serán las correctas, porque están muy bien preparados para afrontar con éxito esta nueva etapa de nuestra compañía”, afirma.
Pese a su progresivo alejamiento, confía en que la empresa seguirá por el camino trazado en estas casi seis décadas de desarrollo y éxito. Es que Amoblamientos Reno ha instaurado un “sistema de organización de red tendida, donde en cada pico de la misma están perfectamente marcados los derechos y las responsabilidades de cada funcionario. Y ese esquema nos demostró que, entre otros beneficios, el principal es que despersonaliza la mayoría de las tareas”, indica.
“Para mí, hay cosas que en una empresa son fundamentales, como ser por ejemplo la despersonalización, y saber separar claramente la gestión de la misión. Además es absolutamente necesario creer mucho en la práctica y la teoría, en el taller y en la facultad. Eso hace que se consiga una combinación de trabajo que, invariablemente, va camino a la excelencia, allí siempre veo un futuro promisorio. Claramente, aquí hace mucho tiempo que se dejó de cumplir la gestión, porque Reno le dio a sus seguidores participación en decisiones de la empresa. Entonces hoy, muchas decisiones se toman sin la participación de él. Eso permite formar el equipo y consolidad el grupo. Quiere decir que si Reno no está, Reno funcional igual”, explica. En ese funcionamiento, Reno Arcadigni visualiza perspectivas positivas debido a la profesionalización que ha logrado la compañía con la incorporación de personal joven universitario, altamente capacitado para brindar un servicio de primer nivel.
Una empresa, varios hitos.
Tanto Amoblamientos Reno, como su artífice, Reno Arcadigni, han vivido varios acontecimientos que fueron coronando la labor desarrollada, a nivel empresarial, dirigencial y honorario.
Entre los numerosos hitos empresariales, cabe destacar la construcción de la nueva planta en la vecina localidad de Piñero, en un principio de 1000m2 en el año 1975, además el cambio tecnológico realizado ese mismo año, que permitió incorporar nuevas máquinas automáticas. Cinco años más tarde, en 1980, se amplió la planta multiplicando su superficie hasta los 3500m2. En 1990 llegaría el control numérico computarizado y una nueva ampliación de planta productiva a 6000m2, que en 1996 alcanzó los 9000m2.
Más tarde, durante 2006, Reno renovó la tecnología de la planta, ingresando la automatización. Dos años después, adquirió el campo lindero a la fábrica de cerca de 17 hectáreas para futuras ampliaciones. Hace apenas dos años, la planta de Amoblamientos Reno alcanzó los 10.000m2.
También en el año 2011 puso en marcha una nueva planta de producción, en este caso para fabricar placares.
Reno también sintió en mucho momentos de su vida la necesidad de participar activamente en actividades institucionales y sociales, es por eso que cuando tenía 27 años fundó junto a otros amigos la (C.C.R.A) Caja de Créditos Regional Álvarez, más adelante también fundó la mutual de socios S.F.C., luego el cablehogar y también ocupó la presidentcia del club. Luego fue Presidente de la (DAT) Dirección de Asesoramiento Técnico de la provincia de Santa Fe y posteriormente fue secretario de industria de la misma provincia, también fundador de (A.D.R.R.) Agencia de Desarrollo Regional Rosario y en su vida institucional fue consejero de la cámara de comercio italiana y luego asesor de presidencia, fue vicepresidente de la cámara de la madera de Cañada de Gomez y en la actualidad ocupa la presidencia de (F.E.G.C.O.I.) Federación Gremial de Comercio e Industria de Rosario.
Todo este trabajo le valió el reconocimiento de sus pares y de la sociedad, por eso entre otras cosas recibió de manos del entonces presidente de la república, Dr. Fernando De La Rua el premio “Carlos Pellegrini” máximo galardón otorgado a la industria nacional y además obtuvo el precio al mérito industrial de Santa Fe.
Desde el año 2012 ostenta el título honorífico otorgado por gobierno italiano de “Cavaliere al Merito della Repubblica Italiana”.
Los valores y la filosofía de Reno.
Sorprende leer las bases fundacionales que Reno escribió en 1956, cuando la empresa todavía no era más que un proyecto incipiente. Por entonces, la filosofía que se planteaba tanto para clientes, accionistas y recursos humanos, mostraba gran visión de futuro y compromiso con los valores empresariales.
El texto “Filosofía de Reno” en vigencia desde su fundación, sienta las bases que siguió la firma, entre ellas el respeto por el cliente, “lograr satisfacciones mutuas y tener claro que la relación comercial es beneficio para las partes”; por la necesidad de modernizarse “siempre hay que volcarse a la reinversión en tecnología, tanto en máquinas como en capacitación y no olvidar que cada empresa tiene tres premisas fundamentales: satisfacer al cliente, lograr el bienestar de su gente y ganar dinero”.
Además, traza el camino de la política de recursos humanos, solicitando ciertos valores “debemos contar con recursos humanos cuyas características personales destaquen por su honestidad, humildad, dedicación al trabajo”. Además, el texto requiere “pasión por lo que se hace” y destaca la necesidad de sentir orgullo por la empresa.
Reno es ante todo, una estructura de valores y principios, dotados por su fundador, y puestos al servicio de una empresa, comprometida por el largo plazo, la calidad y el compromiso con la excelencia.
El presente fragmento ha sido extraído del segundo volumen del libro «Pioneras Presentes: el espíritu empresarial que hace grande a Rosario», publicado por Fundación Libertad en el año 2013.

Cosas que confunden a los españoles cuando van a vivir a Argentina. Circular es deporte de riesgo y, a veces, parece que no compartimos idioma.

Cosas que confunden a los españoles cuando van a vivir a Argentina.

Circular es deporte de riesgo y, a veces, parece que no compartimos idioma.

Podría parecer sencillo mudarse a Argentina desde España, por aquello de que compartimos idioma. Sin embargo, los más de 10.000 kilómetros en línea recta que separan a las capitales de ambos países se notan en cuanto a costumbres, forma de conducir e incluso de hablar.
Argentina es el país del mundo con más españoles residentes fuera de España: 465.666 según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) correspondientes a 1 de enero de 2019. El dato ha aumentado un 6% desde el 1 de enero de 2016, cuando había 439.236 españoles en el país americano.
La cifra real de españoles en el país es todavía mayor: el dato del INE se elabora, tal y como explica en su metodología, a través de los datos del Padrón de Españoles Residentes en el Extranjero (PERE). Este no recoge a los emigrantes no residentes, es decir, a los que tienen prevista una estancia de menos de un año, ni a los que no se han inscrito en ese registro al mudarse de país.
Hemos preguntado a varios grupos de españoles en Argentina a través de grupos de WhatsApp y de Facebook por las cosas que más les sorprendieron al llegar al gigante latinoamericano. Y, como ocurrió con los que se mudaron al Reino Unido, Brasil, China o Alemania, las respuestas van desde temas como el idioma... hasta las fregonas.

COSTUMBRES

- Se dejan los ahorros en la fiesta de 15 cumpleaños de las hijas. El vestido, los zapatos, los regalos… Eso es como una boda.
- Cuando se pierde un niño en la playa o en un parque, los que están se ponen a aplaudir para que el niño sepa volver. Es muy práctico y solidario.
- ¿Y poner un bidón sobre el techo de un coche aparcado para indicar que esta en venta? ¡Esa es tremenda!
- Tener que bajar a abrir la puerta del portal cuando vienen a visitarte. Vienen a traerte unos muebles o lo que sea y, cuando terminan, dices: Gracias, adiós. Y se te quedan mirando hasta que te das cuenta de que hay que bajar a abrir. Deben pensar que los españoles somos unos pasmaos…
- ¡Se besan todo el rato! Vas al médico y te saluda con un beso. Vas a una entrevista de trabajo y te saludan con un beso. Entre hombres, también. Y encima solo es uno y no dos como nosotros. Todo muy confuso.
- En Argentina no hay fregonas. No puedo entender cómo limpian el suelo con un “trapo de piso” que exprimen con la mano.

- El amor y el respeto que tienen a su bandera. Los niños en los colegios la izan todos los días. Hasta los cartoneros, los más desfavorecidos, la llevan con orgullo en sus carros llenos de cartón.
- Mate a todas horas: por la mañana, la tarde, la noche… Eso sí, son muy hospitalarios. Están todo el día diciendo: Venite a casa a tomar un mate.
- Las expensas [los gastos de la comunidad de vecinos] son altísimas. Te cobran por todo.
- Eso de domiciliar es rarísimo. Puedes ir a pagarle autónomos, la luz o cualquier factura a otra persona al rapipago sin que tengas que estar autorizado. [Un canal de cobro extrabancario en el que se pueden pagar facturas de servicios públicos y privados e impuestos, a través supermercados, comercios o estaciones de servicio].
- Echo de menos los quioscos de España. En Argentina son como centros comerciales: venden alfajores, chocolate, pebetes [sándwiches], panchos [perritos calientes], refrescos... pero chucherías de las españolas, ni una.

GASTRONOMÍA

- Me sorprende la soda con su sifón. Cada vez que lo veo, me acuerdo de Mafalda.
Cada que veo un sifón de agua mineral, me gustaría hacerme un traje espacial como #Mafalda.
- Se come todo muy seco nada de cuchara: empanadas, milanesas, carne asada... Cuando volví de vacaciones a España, le pedí a mi mamá un puchero.
- Me sigue chocando que haga calor en diciembre. Montar el árbol de Navidad y comer a saco para celebrar la Nochebuena mientras te chorrea hasta el alma.
- A un tipo de filetes los llaman "bife de chorizo" [es un tipo de corte equivalente en España a la chuleta o lomo alto] y al cuarto trasero de pollo lo llaman "pata y muslo".
- El pan se compra al peso.
- A los croissant los llaman medialunas. Y el resto de los bollos son facturas. Entre las facturas puedes pedir vigilantes, bolas de fraile y suspiros de monja. [Se llaman así porque el primer sindicato de panaderos fue anarquista].
TRÁFICO

- Hay que parar a los colectivos [autobuses] con la mano. Perdí más de uno hasta que me enteré. Pero espérate, que no basta con que uno levante la mano. La levantan todos los que están esperando en la parada. No se fían.
- ¡Una locura la circulación! La prioridad en las rotondas nunca se respeta y que se la queda el que entra y no el que está circulando.
- En las señales de STOP pone PARE.
 “Pare” es desacelerar hasta los 0 km/h (ley de tránsito). Tal vez la señal más importante y la menos respetada a la vez. #HechaLaLey
- Los coches no respetan a los peatones. Si vas a cruzar la "calle", es mejor que dejes pasar para no morir atropellado.
- Las motos no respetan las reglas de tránsito. Pasan los semáforos en rojo y es común que circulen por la vereda [acera]. Suele haber peleas entre peatones y "motoqueros", como le dicen a los que andan en moto.
- En las carreteras nadie utiliza la “luz de giro” [el intermitente] para anticipar un cambio de carril.

IDIOMA

- En Argentina, los que curran no trabajan, sino que roban.
- Las camisetas de asas se llaman musculosas.
- Si quieres comprar un recogedor de toda la vida, tienes que pedir una pala.
- A la chuleta para copiar en los exámenes le dicen machete.
- Tienen todo el día el pedo en la boca. Hay muchas expresiones con esa palabra...
- La lejía se llama lavandina.
- El pan de molde es pan lactal.
-  Me sorprende que te digan: ¿Cómo va? Yo pensaba que me preguntaban que dónde iba y se lo decía.
- A las bragas las llaman bombachas.
- Yo pido una bombilla y no me dan una bombilla, me dan un objeto para beber mate. Siempre el mate.

30 de Septiembre de 1942: El doctor Avelino Gutiérrez funda la Asociación de Cultura y Protección del Inmigrante Español

30/09/1942.
El doctor Avelino Gutiérrez, destacado médico español radicado en nuestro país, funda la Asociación de Cultura y Protección del Inmigrante Español, que luego se convirtió en el Instituto Hispánico Argentino.

* De lo publicado en Diario "Río Negro" en sección Almanaque (Edición impresa Nro.25.570 del día 28 de Septiembre de 2019, página 40).


Médico argentino nacido en 1864 en San Pedro de Soba (Santander, España) y fallecido en 1945 en Buenos Aires. En 1920 fue la primera persona en recibir el título de doctor honoris causa en la Universidad española. En 1926 fue pionero en la recuperación del término «hispanidad», en sentido político y cultural (en una «Carta abierta a D. José María Salaverría», que había cuestionado su artículo anterior, «Panamericanismo, latinoamericanismo e hispanoamericanismo», publicado también en El Sol, de Madrid).
Cursó el bachillerato en España y se trasladó a la Argentina, donde ya vivía un hermano suyo. Estudió la carrera de Medicina en la Facultad de Buenos Aires, donde muy pronto destacó: en 1885 fue nombrado, por oposición, profesor ayudante de esa Facultad, de la que más tarde llegó a ser catedrático de Clínica quirúrgica. Dirigió el Hospital Español de Buenos Aires.
Estimulado por el ejemplo de Santiago Ramón y Cajal –quien recibió el Premio Nobel de Medicina en 1906– y particularmente tras el fallecimiento de su paisano Marcelino Menéndez Pelayo (el 19 de mayo de 1912), decidió crear una «Institución Cultural Española», y realizó ese mismo año de 1912 una primera donación de 12.000 pesetas a la Junta para Ampliación de Estudios e Investigaciones Científicas de España, que mereció que el Rey lo agradeciese oficialmente, como puede leerse en la Gaceta de Madrid:
«Ilmo. Sr.: Vista una comunicación del Presidente de la Junta para ampliación de estudios e investigaciones científicas, participando que el Doctor D. Avelino Gutiérrez, de Buenos Aires, ha favorecido a dicha Junta con un donativo de 12.000 pesetas, destinadas a tres pensiones para ampliar estudios en el extranjero, en memoria y honor de los Profesores españoles Menéndez Pelayo y Ramón y Cajal. S. M. el Rey (q. D. g.) ha tenido a bien resolver que dada la importancia del acto realizado por D. Avelino Gutiérrez se le den en su Real nombre las gracias y oficialmente se le haga saber el singular aprecio que hace de su generoso donativo. De Real orden lo digo a V. I. para su conocimiento y demás efectos. Dios guarde a V. I. muchos años. Madrid, 19 de Octubre de 1912. Alba. Sr. Subsecretario de este Ministerio.» (Gaceta de Madrid, nº 299, 25 octubre 1912.)
La Gaceta publicó el 4 de noviembre de 1912 la convocatoria para concurrir a las tres pensiones de 4.000 pesetas cada una para que tres españoles pudiesen ampliar estudios en el extranjero durante un año: «Serán preferidos los de Química, Medicina e Historia literaria». Al año siguiente Avelino Gutiérrez volvió a realizar otra donación de 12.000 pesetas (como referencia, los sueldos de los catedráticos de universidad españoles en 1914 oscilaban, por antigüedad, entre 4.000 y 12.500 pesetas anuales):
«Ilmo. Sr.: El señor Presidente de la Junta para ampliación de estudios e investigaciones científicas da cuenta a este Ministerio de que el Doctor D. Avelino Gutiérrez, de Buenos Aires, ha hecho un donativo a dicha Junta de 12.000 pesetas, igual al que también hiciera el año anterior y con destino a sostener pensionados españoles en el extranjero. Sin perjuicio de que aquella Presidencia ha dado ya gracias por el generoso auxilio prestado por el Doctor Gutiérrez, el Gobierno de S. M. no puede ni debe dejar de hacer presente la gratitud debida a quien de tal modo demuestra su amor a la Patria española y tan eficazmente contribuye al desenvolvimiento de la cultura nacional, ayudando a que los pensionados propuestos por la Junta para ampliación de estudios e investigaciones científicas puedan continuar adquiriendo aquellos conocimientos que tan útiles han de ser para el fomento de los intereses españoles. Por estas razones, S. M. el Rey (q. D. g.) se ha servido disponer que oficialmente se haga público el desprendimiento del Doctor don Avelino Gutiérrez, y se le haga presente la gratitud que merece y que por este acto se testimonia. De Real orden lo digo a V. I. para su conocimiento y demás efectos. Dios guarde a V. I. muchos años. Madrid, 27 de Diciembre de 1913. Bergamin. Sr. Subsecretario de este Ministerio.» (Gaceta de Madrid, nº 1, 1º enero 1914.)
El mecenazgo de Avelino Gutiérrez hacia la Junta para Ampliación de Estudios se mantuvo (en la Gaceta de 31 de mayo de 1919, por ejemplo, vuelve el Rey a agradecer el «acto realizado por los Sres. D. Avelino y D. Ángel Gutiérrez», residentes en la República Argentina, por su donativo de 1.445 libras esterlinas) pero no fue el único. Santiago Ramón y Cajal dejó escrito en Recuerdos de mi vida:
«Algunos libros publicados. Vaya por delante mi obra de conjunto sobre la Degeneración y regeneración del sistema nervioso. Esta voluminosa obra en dos volúmenes e ilustrada con 317 grabados, copia de mis preparaciones, constituyó la principal empresa acometida durante los años 1912, 1913 y 1914. [...] Así lo expresé en el prólogo, donde procuré justificar mi labor con los siguientes términos: “El premio Nóbel con el Instituto Carolino de Estocolmo se dignó recompensar mis escasos méritos científicos, fue, entre los médicos de raza española, ocasión de patrióticos y entusiastas testimonios de afecto y consideración. Pero, entre los homenajes recibidos, ninguno más hermoso, por su forma delicada y espiritual, que el tributado al humilde hombre de ciencia por los compatriotas médicos de la República Argentina. No creyeron suficiente, para exteriorizar su fervor, agasajarnos con artístico diploma avalorado con sus firmas autógrafas; sino que, resueltos a que sus nobles sentimientos cristalizaran en algo útil y permanente, acordaron imprimir a su costa un libro nuestro necesitado de publicación. Tal fue el origen de la obra actual.” [...] Al texto precede entusiasta y sentida dedicatoria (probablemente escrita por el sabio médico y ardoroso patriota Dr. D. Avelino Gutiérrez, profesor de la Universidad de Buenos Aires), firmada por 47 simpáticos compañeros, esparcidos por todo el territorio de la República Argentina. Excusado es decir que a cada suscriptor fue oportunamente repartido un ejemplar, impreso en papel especial y afectuosamente dedicado.» (Santiago Ramón y Cajal, Recuerdos de mi vida, Editorial Crítica, Barcelona 2006, págs. 705-706.)
La «Institución Cultural Española»
La «Institución Cultural Española» fundada por Avelino Gutiérrez en 1912 en Buenos Aires comenzó en 1914 a invitar a profesores españoles para impartir cursos en la Argentina (a través de la Junta para Ampliación de Estudios; en 1914 Ramón Menéndez Pidal glosó la obra de Menéndez Pelayo; en 1916 Ortega trató de Cervantes y de la filosofía moderna, &c.), alcanzando esta entidad personalidad propia y perviviendo en el tiempo hasta que el 21 de junio de 1990 se fusionó con la Asociación Patriótica Española –fundada en 1896–, para dar lugar a la Asociación Patriótica y Cultural Española, que hoy [agosto 2010] recuerda así la historia de la ICE en su sitio de internet:
«A esta altura, creemos conveniente referirnos a la magnifica historia de la Institución Cultural Española de Buenos Aires, que nació en junio de 1912 para honrar la memoria del ilustre polígrafo español Marcelino Menéndez y Pelayo creando cátedras en la Argentina, la primera de las cuales estuvo a cargo del sabio filólogo español Ramón Menéndez Pidal. Ocuparon sucesivas cátedras las personalidades más significativas de la España intelectual, entre las que mencionaremos a José Ortega y Gasset, Julio Rey Pastor, Augusto Pí y Suñer, Blas Cabrera, Eugenio D’Ors, Manuel Gómez Moreno, Gonzalo Rodriguez Lafora, Esteban Terradas, Luis Jiménez de Asúa, Américo Castro, Luis de Olariaga, Pío del Río Hortega, María de Maeztu, Gustavo Pittaluga, etcétera. También dictaron Cursos autoridades en sus respectivas especialidades, como Andrés Ovejero, Lorenzo Luzuriaga, Amado Alonso, Enrique Moles, Pedro Sainz Rodriguez, Luis Recaséns, Roberto Novoa Santos, Claudio Sánchez Albornoz, Manuel García Morente, Salvador de Madariaga, Francisco Ayala, Gregorio Marañón y tantos otros.»
«Pensando en el porvenir de España, soy nacionalista y racialista; es decir, español e hispanoamericano. Lo primero no tiene nada de particular, reconociendo como reconozco que soy hechura de la historia de España. Lo segundo ya es más extraño; pero tampoco lo es tanto, pues América deriva de España y es también de nuestra familia. Al declararme nacionalista, me confieso egoísta, y al declararme racialista, lo mismo. Anhelo ansiadamente el adelanto de España; la quiero ver marchar a la cabeza del progreso, cumpliendo con todos los ideales universales o internacionales, y dando pautas a la civilización y a la cultura. Tengo fe firme en este progreso, y la tengo, en parte, por la España misma, y, en gran parte por la raza que ella ha creado. De este mi modo de pensar ha nacido el pensamiento de la Institución Cultural Española, institución a doble efecto, español y argentino; pero es más, y aquí viene mi pecado o mi tontería, que dirían muchos, y que tal vez lo sea, pero que a mí no me lo parece, y en todo caso es una tontería lógica. No sólo he propendido a fundar la Cultural Española, sino también, indirectamente, al Instituto Argentino de Cultura Itálica. Soy, en efecto, amigo íntimo del creador y presidente de este Instituto, ingeniero D. Nicolás Bessio Moreno, y hemos departido largamente con él sobre estos asuntos. Me he alegrado también de la creación del Instituto Argentino de Cultura Germánica, del que el ingeniero D. Nicolás Bessio Moreno es vicepresidente, y de ambos institutos soy socio (voluntariamente). No soy socio del Instituto de la Universidad de París, porque aquí lo francés es todo; pero me alegro que se haya fundado.» (Avelino Gutiérrez, «Carta abierta a D. José María Salaverría», El Sol, 20 de abril de 1926.)
«En ese punto ha sido inmensa la reacción bienhechora provocada por la Sociedad Cultural de Buenos Aires, orientada por Avelino Gutiérrez, que siente la misma inquietud de los que se esfuerzan aquí por situar al país en la línea de máximo progreso.» (Américo Castro, «Hispanoamérica como estímulo», Revista de las Españas, Madrid, agosto de 1926.)
«A mí, en las palabras bien escasas con las que quise presentar a Antonio Sempere, entre otras razones, porque es innecesario, se me olvidó decir que ha sido vicepresidente de la Institución Cultural Española de Buenos Aires durante años. Y durante años difíciles para esa Institución, que bien mereciera ser más conocida entre nosotros, porque fue fundamental para las relaciones intelectuales, culturales, entre España y Argentina. Fue fundada en 1914, y pido disculpas en público a Teresa Rodríguez de Lecea, a quien interrumpí porque decía que don Rafael Altamira... No, don Rafael Altamira no fue invitado porque aún no existía la Institución. La fundó un gran médico santanderino, trasladado desde niño con su familia a Buenos Aires, don Avelino Gutiérrez. Inauguró la cátedra don Ramón Menéndez Pidal en 1914, y después la ocupó Ortega y Gasset en el año 1916. Después fueron personas como Blas Cabrera, Rey Pastor, Eugenio d’Ors, Adolfo Posada, &c.» (Antonio Largo Carballo, Un viaje de ida y vuelta: la edición española e iberoamérica (1936-1975), Ediciones Siruela, Madrid 2006, pág. 113.)
Avelino Gutiérrez nombrado en 1920 primer doctor honoris causa de la universidad española
En 1920 pronunció varias conferencias Avelino Gutiérrez en España, en medio de un gran respeto por el prestigio que tenía reconocido. Incluso la universidad española aprovechó para iniciar una institución hasta entonces desconocida en el ámbito universitario civil español, de forma que Avelino Gutiérrez fue el primero en ser nombrado doctor honoris causa, por la Universidad Central. [Otras universidades españolas reclamaron pronto el derecho a enriquecer también sus claustros con doctores honoris causa, y en 1922 la de Salamanca rizó el rizo, y nombró a Santa Teresa de Jesús, suponemos que a título póstumo, doctora honoris causa: a la solemne ceremonia, que se celebró el 6 de octubre de 1922, no asistió la honorífica doctoranda, pero supuso para la mujer una temprana incorporación, lejos cualquier discriminación sexista, a este novedoso reconocimiento académico.]
«Crónica. Con motivo de la venida a España de un eminentísimo médico, D. Avelino Gutiérrez, de la Facultad de Medicina de Buenos Aires, que ha dado varias conferencias, cursillos, en la Facultad de San Carlos, &c., el rector de la Universidad Central, Sr. Carracido, invitó al sabio médico y a los representantes de las naciones americanas a un te. Concurrieron casi todos los profesores que forman el claustro, y entre ellos la eximia escritora condesa de Pardo Bazán. Son estas fiestas de una intimidad y una cordialidad encantadoras. El sabio médico doctor Avelino Gutiérrez habrá visto cómo aquí se le admira en su ciencia y se le aplaude sin reservas. Los méritos y las glorias de América son para nosotros como propios, pues es la Raza la que triunfa.» (La Ilustración Española y Americana, Madrid, 30 de enero de 1920, año 64, nº 4, pág. 50.)
«Y al llegar a la Patria encontró entusiasta acogida. Símbolo y expresión de ella ha sido la que le dispensó S. M. el Rey. Cuando un día el ministro de Instrucción pública D. Natalio Rivas, fue a despachar con el Monarca, éste, según el rito, le preguntó qué novedades había en el departamento de su cargo. Y el ministro contestó: "Señor: La novedad más importante es la llegada del eminente médico doctor Gutiérrez, el gran científico de Buenos Aires, nuestro compatriota..." No fue preciso más. Don Alfonso, que estudia incesante y cuidadosamente todo lo que corresponde a su alta función tutelar de los prestigios de la raza, interrumpió con estas palabras: "Es necesario otorgar a ese insigne español todos los honores, todos los homenajes que le corresponden...".» (José Ortega Munilla, «El maestro Avelino», ABC, Madrid, 6 febrero 1920.)
«Exposición. Señor: En los proyectos de Estatutos que han de regir la vida universitaria, figura, entre otros particulares, el relativo a conferir títulos honoríficos las Facultades o la Universidad, por servicios meritísimos en pro de la cultura pública. Han llegado a este Ministerio iniciativas muy dignas de ser favorablemente acogidas, y deseando el Ministerio que suscribe atenderlas en lo que a él corresponde no retardando el que puedan conferirse tales distinciones a título excepcional, se permite someter a la aprobación de V. M. el adjunto proyecto de Decreto. Madrid, 6 de Febrero de 1920. Señor: a. l. r. p. de v. m., Natalio Rivas.
Real Decreto. Conformándome con las razones expuestas por el Ministro de Instrucción Pública y Bellas Artes, Vengo en decretar lo siguiente: Artículo 1º. La Universidad de Madrid queda autorizada para otorgar el título de Doctor honoris causae por servicios eminentes prestados a la cultura pública. Art. 2º. Hasta que la Universidad se rija por su Estatuto, la concesión del título se hará, por delegación del Ministerio de Instrucción pública y Bellas Artes, por el Rector, en virtud de propuesta razonada aceptada al menos por cuatro quintas partes de votos del Claustro de la Facultad respectiva y acuerdo del Claustro ordinario. Dado en Palacio a seis de Febrero de mil novecientos veinte. Alfonso. El Ministro de Instrucción Pública y Bellas Artes. Natalio Rivas.» (Gaceta de Madrid, 7 de febrero de 1920, nº 38, págs. 451-452; y corregido un error de copia en el artículo 2º advertido en la Gaceta de 15 de febrero, nº 46, pág. 567.)
«Homenaje al Doctor Avelino Gutiérrez. Bajo la presidencia del doctor Carracido, de los decanos de las Facultades y del encargado de Negocios de la Argentina, Sr. Levillier, quien fue invitado expresamente al acto, se verificó en el salón rectoral de la Universidad el muy solemne de investir como doctor Honoris causa al profesor de la Universidad de Buenos Aires D. Avelino Gutiérrez, persona de grandes merecimientos que, como hombre de ciencia, ha realizado una relevante labor al frente de la Asociación Cultural Española, de la capital bonaerense. Ante la distinguida concurrencia, integrada por gran número de doctores, representaciones de todos los Centros docentes y tres estudiantes de cada Facultad, el secretario, Sr. Castro, leyó el acuerdo de la Junta de catedráticos de la Facultad de Medicina de conferir el título de doctor Honoris causa al Sr. Gutiérrez, quien, previo mandato del presidente, penetró en el salón –siendo recibido por la concurrencia puesta en pie– precedido por el maestro de ceremonias y acompañado de su padrino, el doctor Recaséns, decano de la Facultad de Medicina y del catedrático más joven, doctor Blaus, de la Facultad de Ciencias, y por el de la de Derecho, Sr. Suárez. Después del discurso de presentación hecho por el doctor Recaséns, el doctor Carracido impuso al doctor Gutiérrez el birrete, le hizo entrega del título y le dio el abrazo de ritual, en medio de una ovación; y el agraciado correspondió abrazando a los doctores que figuraban en la presidencia y leyó, emocionado, un discurso de gratitud en su nombre y en el de la Universidad de Buenos Aires. Finalmente hablaron el Sr. Levillier y el doctor Carracido, abogando éste por la confraternidad hispano-argentina.» (ABC, Madrid, martes 2 de marzo de 1920, edición de la tarde, págs. 16-17.)
«—Tiene también importancia la creación del título de doctor honoris causa, que nuestra Universidad no había concedido nunca. Fue instituido en 1920 por Real decreto, para premiar la gran labor patriótica prestada por el insigne D. Avelino Gutiérrez, iniciador de la Cultural Española de Buenos Aires, que sostiene varias cátedras de español en la Argentina. Además de este título a nuestro compatriota, la Universidad Central ha expedido otros a figuras de verdadera significación cultural: a Gomes Teixeira, el gran matemático portugués; a Arce, rector de la Universidad de Buenos Aires... En estos dos casos, la distinción hecha por nuestra Universidad era tanto a los profesores como a los países que representaban. También es doctor honoris causa de la Universidad de Madrid, Einstein...» («Don José Rodríguez Carracido recuerda los hechos salientes de la vida universitaria durante su rectorado», Nuevo Mundo, Madrid, 4 marzo 1927, págs. 24-25.)
Avelino Gutiérrez suegro del matemático Julio Rey Pastor
La Institución Cultural Española invitó en 1917 a Julio Rey Pastor, profesor de Análisis Matemático de la Universidad Central, a trasladarse a la Argentina para impartir un curso sobre «El organismo de la matemática moderna». Aunque estaba previsto que estuviera en Buenos Aires los meses de septiembre y octubre de 1917, permaneció allí buena parte de 1918, y al entrablar relaciones con Rita Gutiérrez, hija del director de la ICE, Avelino Gutiérrez, acabaría ya Rey Pastor el resto de su vida muy vinculado a la Argentina. En diciembre de 1921 contrajeron matrimonio Julio Rey Pastor y Rita Gutiérrez, convirtiéndose por tanto Avelino Gutiérrez en suegro del ilustre matemático, y abuelo de los dos hijos que tuvo el matrimonio.
«Anuncia el telégrafo que el sabio catedrático español señor Rey Pastor, que se encuentra en Buenos Aires, realizando una misión científica, contraerá allí matrimonio con la hija del ilustre médico doctor don Avelino Gutiérrez.» (La Época, Madrid, lunes 11 de julio de 1921, pág. 2.)
* * *
La Academia Nacional de Medicina de Argentina entrega cada dos años un «Premio Avelino Gutiérrez», y algunas escuelas de anatomía denominan «Triángulo de Avelino Gutiérrez» al triángulo húmerotricipital.
«Gutiérrez es una de las figuras más prestigiosas de la ciencia hispanoamericana y se distingue, además, por su acendrado patriotismo, que dicta todos sus actos. Ha sido el iniciador de la Institución Cultural Española de Buenos Aires, Montevideo y Rosario, institución que sostiene una cátedra de cultura española en las Universidades de las dos primeras capitales, y a su iniciativa se debe también la cátedra de investigaciones científicas en España que lleva el nombre de Ramón y Cajal y es sostenida por la colonia española de la capital argentina. Como operador goza de fama universal y como profesor ha formado numerosos y notables alumnos. En 1920 hizo un viaje a España y dio importantes conferencias en las Facultades de Madrid y Barcelona, siendo nombrado doctor honoris causa por la primera.» (EUI 1925, 27:363.)
«Así, Blas Cabrera monta y dirige el Laboratorio de Investigaciones Físicas, en los llamados Altos del Hipódromo, donde actualmente están el Museo de Ciencias Naturales y la Escuela de Ingenieros Industriales, orientándolo fundamentalmente hacia los estudios de magnetoquímica. [...] El impulso creciente y seriedad de los trabajos que se desarrollaban en el Laboratorio de Cabrera atrajo la atención de la Fundación Rockefeller, quien propuso subvencionar la creación de un nuevo Instituto Nacional de Física y Química, para lo que contribuyó con la donación del edificio y con las consignaciones iniciales para la adquisición de instalaciones de importancia. También auxiliaron para esta creación la International Health Board y la International Educational Board, así como numerosos particulares que colaboraron en una suscripción pública abierta para tal fin (entre ellos encontramos el nombre de Avelino Gutiérrez quien donó 25.000 pesetas y el curioso donativo de 125.000 enviado por "un obrero de la Pampa"). El Instituto Nacional de Física y Química fue inaugurado el 6 de febrero de 1932.» (José Vidal Beneyto, Memoria democrática, Foca, Madrid 2007, págs. 224-225.)
Textos sobre Avelino Gutiérrez en el Proyecto Filosofía en español
1920 José Ortega Munilla, El maestro Avelino (6 febrero)
1925 Eduardo Gómez de Baquero, De la discreción en el hispanoamericanismo (10 diciembre)
José María Salaverría, De las palabras y las divisas (20 diciembre)
1926 José María Salaverría, A un compatriota benemérito (26 mayo)
José Francos Rodríguez, Patriotismo práctico (4 junio)
Textos de Avelino Gutiérrez en el Proyecto Filosofía en español
1925 Panamericanismo, latinoamericanismo e hispanoamericanismo (5 diciembre)
1926 Carta abierta a D. José María Salaverría (20 abril).

Fuente de información e imagenhttp://www.filosofia.org/ave/001/a341.htm

domingo, septiembre 29, 2019

Aparición de San Miguel Arcángel en el monte Gargano en Italia el 29 de Septiembre del 493.


San Miguel Arcángel, defiéndenos en la lucha. Sé nuestro amparo contra la perversidad y acechanzas del demonio. Que Dios manifieste sobre él su poder, es nuestra humilde súplica. Y tú, oh Príncipe de la Milicia Celestial, con el poder que Dios te ha conferido, arroja al infierno a Satanás, y a los demás espíritus malignos que vagan por el mundo para la perdición eterna de las almas.
Amén.

SOBRE LA FIESTA DE SAN MIGUEL ARCÁNGEL.
Monseñor Martín Dávila.

En esta fiesta recordamos, la tercera aparición de San Miguel Arcángel en el monte Gargano en Italia el 29 de Septiembre del 493. Siendo este santo Arcángel general de la milicia celestial, el primero de los bienaventurados espíritus que asisten continuamente al trono de Dios, y componen el coro octavo en la jerarquía del Cielo.

San Miguel siempre ha sido venerado por la Iglesia de Dios como el protector especial de los cristianos, del mismo modo que antes de fundarse el Cristianismo lo había sido del pueblo judío.

Prácticamente fueron cuatro apariciones las que tuvo San Miguel, en la gruta del monte Gargano, la primera el 8 de Mayo del 490, la segunda el 19 de Septiembre en 492, y la cuarta el 22 de Septiembre de 1655.

Esta tercera aparición fue muy consoladora y muy célebre, y en reconocimiento de los beneficios que procuró a la Iglesia el enviado del Omnipotente, se estableció esta fiesta para recordar este acontecimiento y en honra de San Miguel; fiesta que desde el siglo V se celebra el 29 de setiembre, y que era en otro tiempo muy solemne en varios países de Occidente.

Antes de continuar con todo lo relacionado con San Miguel Arcángel, vamos a tratar de la existencia y esencia de los ángeles en general.

¿Quiénes son los Ángeles?

Los ángeles constituyen una realidad de la fe. Ya que son servidores y mensajeros de Dios, porque como Nuestro Señor Jesucristo dice: “Ven continuamente el rostro de mi Padre, que esta en el cielo” (Mt., XVIII, 10). Además, en cuanto oyen su voz se convierten en poderosos ejecutores de Su Palabra, como lo dice el Salmo CIII, 20.

Etimológicamente, “ángel” significa “mensajero”, lo que indica, como lo afirma San Agustín, su función pero no su naturaleza.
Los ángeles pueden ser definidos como “sustancias intelectuales, puramente espirituales, creadas por Dios y superiores a los hombres”. Siendo “espíritus” no poseen un cuerpo como el género humano. Fueron también, creados para adorar, alabar y bendecir a Dios, así como dice San Pablo: “Que adoren todos los ángeles de Dios” (Heb., I, 6).

En la Sagrada Escritura existen testimonios de estos espíritus puros. Nos baste con recordar a los “Querubines que custodian el paraíso terrenal” (Gén., III, 24); “Los tres ángeles que se le aparecen ante Abraham” (XVIII, 19); “Al Arcángel Rafael, quien acompañó a Tobías y lo liberó” (Tob., V, 1ss); “Al Arcángel Gabriel, quien anunció la Encarnación del Verbo divino”; “Los ángeles que anuncian el nacimiento de Jesús a los pastores, y su resurrección” (Lc., I, 11, 26; XXIV, 4ss); “Y los innumerables ángeles del Apocalipsis” (I; XI; VIII, 4ss).

Con fundamento en la Escrituras y la tradición; la Iglesia católica definió como “verdad de fe” no sólo la existencia de los ángeles, sino también su creación. Es común que se considere que fueron creados antes que los hombres, y en un número indeterminado.

La Santa Biblia, en especial San Pablo, quien evoca la tradición, nos dice que los ángeles están divididos en nueve jerarquías: Querubines, Serafines, Tronos, Dominaciones, Virtudes, Potestades, Principados, Arcángeles y Ángeles.

Se desprende claramente de las Sagradas Escrituras que los ángeles no son semejantes en dignidad; existen ángeles superiores e inferiores. Sus funciones también son diferentes: La Biblia menciona a los ángeles de la guarda (Mt., XVIII, 10; Hech., XII, 15), los guías de los hombres (Tob., XII), los ángeles que alaban a Dios y ejecutan Sus órdenes (Lc., II, 13ss), los ángeles que están frente al trono de Dios (Tob., XII, 15).

También se menciona en varias ocasiones las hileras innumerables de inmensos ejércitos celestes. Todo esto no lleva a pensar en un orden, en una jerarquía celestial, que ya, se ha mencionado, al frente de la cual está el Arcángel San Miguel (Apoc., XII, 7-9)

En el momento mismo de la creación, los ángeles fueron “elevados a un nivel sobrenatural”, sin embargo, no todos se sujetaron a esa condición. Muchos abusaron de su libertad; y en un acto de soberbia se rebelaron contra Dios por lo que inmediatamente fueron castigados al infierno.

Santo Tomás de Aquino nos enseña que un ángel es apenas diferente a los demás, sin embargo, es en sí mismo una “especie”. Además, continua S. Tomás, los ángeles se encuentran en determinados lugares, donde llevan a cabo sólo su función especifica, y no la de los demás.

¿Quién es San Miguel Arcángel?

En la creación del mundo angélico, Dios colocó a San Miguel en el segundo puesto después de Lucifer. El creador dividió a los Ángeles en tres grandes jerarquías y en nueve coros. Sus nombres están revelados en la Sagrada Escritura: Serafines, Querubines, Tronos, Dominaciones, Potestades, Principados, Virtudes, Arcángeles y Ángeles. Los Ángeles se quedarán eternamente en el mismo coro. Todos estos fúlgidos Espíritus arden por el deseo de Cumplir la Santa Voluntad de Dios con la velocidad del pensamiento.

¡San Miguel, al ver que era uno de los primeros Príncipes, revestido de poder, gloria esplendor más que los demás, se humilla, se pone a los pies de Dios y reconoce con profunda gratitud que la magnificencia en la naturaleza angélica y todos los dones y privilegios de la Gracia son gratuitos por la bondad del Creador, sin ningún mérito suyo y sin ningún derecho a dicha dignidad en cuanto fue creado de la nada y su origen será siempre la nada!

Un amor seráfico, una dedicación profunda inunda su radiante espíritu y se humilla en la contemplación de la Bondad y del Amor Divino. En esta tranquila armonía del Cielo nada podía presagiar los funestos eventos de una guerra inminente que destruirá sus filas en todos los coros angélicos.

La prueba de los Ángeles y la derrota de los rebeldes por medio de San Miguel

Antes de que Dios ponga el fundamento invisible de la Creación, puso como fundamento invisible la OBEDIENCIA en todas las criaturas razonables, Jesucristo adquiere su nueva gloria como Jefe de la humanidad, mediante la obediencia a los decretos eternos de la Santa Trinidad. María Santísima recorre el camino real de la Maternidad Divina con su humilde: “Fiat mihi secun-dum verbum tuumo”. Es el camino maestro también para los Ángeles.

Para admitir estos sublimes Espíritus a la visión Beatificada en la gloria eterna y confirmarlos en la Gracia, Dios quiere someterlos a una prueba. Todos los Ángeles recibieron una visión clara del Ser Divino y de sus infinitas perfecciones, debían reconocer la Majestad Divina como súbditos del señor. Creador de su radiante existencia: adorarlo, servirlo como su Único y Sumo Bien.

Gran parte de ellos obedeció con alegría y con humildad, ofreciendo con amor a la propia adoración y a la propia existencia para obedecer en todo a la voluntad Divina. También Lucifer se sometió, pero más por conveniencia que por amor, siéndole por el momento imposible retirarse ante una orden tan amorosa. También porque el orgullo estaba apenas germinando en su espíritu. Era la pequeña semilla del mal que luego se convirtió en el árbol gigantesco los pecados de toda especie trasplantado en el mundo visible.

En un segundo tiempo, como vio María Agreda Abadesa en el maravilloso libro de la “Mística Ciudad de Dios” y es la opinión de muchos teólogos, entre ellos Tertuliano, san Cipriano, san Basilio, san Bernardo y otros santos, Dios mostró a los Ángeles al Verbo Divino su Unigénito, revestido con la naturaleza humana, preferida por El y muy favorecida, hasta ensalzarla en el Trono eterno de la Santísima Trinidad.

Pidió a los Ángeles que lo adoren como a su Rey, no solo en su Naturaleza Divina, sino también unida hipostáticamente con la naturaleza humana y servirlo. Con la luz de la Gracia actual, Dios iluminó a todos los Ángeles los méritos infinitos del verbo humanado y que, ha merecido también para cada uno de ellos todas las Gracias y Dones que poseen, comprendida la gloria y la felicidad sin fin que nos espera a todos en la Visión Beatífica.

“A este precepto, todos los obedientes y Santos Ángeles se rindieron y prestaron asenso y obsequio con humilde y amoroso afecto de toda su voluntad”

Exultación y sumisión por parte de los Ángeles obedientes. Para sí hosanna, admiración, gran estupor, gran condescendencia y humillación del Verbo Divino.

Pero no Lucifer. Su repugnancia por la naturaleza crece, y si antes obedecía de mala gana, ahora no puede más. La envidia inunda su espíritu soberbio, cegado por su suprema belleza y poder personal, resiste a la Voluntad Divina. Invita también a los otros Ángeles para que desobedezcan, prometiéndoles un Reino independiente del de Cristo Humanado. El, Lucifer, sería el jefe, y ellos, príncipes. Decía con soberbia:

“Subiré al Cielo (visión beatífica), sobre los astros de Dios, ensalzaré mi trono… subiré a la altura de las nubes… seré igual al Altísimo” (Is 14,14)

Este insensato grito de rebelión se hizo eco en el ambiente celestial y fue acogido por un tercio de los Ángeles. Inició así la grande y tremenda guerra para destronar a Dios y apropiarse de su trono. Viendo San Miguel el caos y el tumulto provocado por los rebeldes, con una gran voz exclamo: “¿Quién (ES) COMO DIOS?”, sumergiéndose en su nada ante el Creador de toda existencia. Lo adora, ofrece su amor fiel, todo su ser al servicio de la Majestad Divina, para defender su Honor y la Gloria humillada por los rebeldes ingratos.

Con un discurso inflamado por la Gloria del Señor, exhorta a todos los Ángeles para que resistan a la malsana rebelión de Lucifer, recodándoles el sagrado deber de adoración y de gratitud para con Dios y la humilde sumisión por los inmensos beneficios recibidos.

Exhorta a todos para que acepten con un amor humilde todos los planes y proyectos que se refieren a la Encarnación del Verbo Divino. El hijo unigénito del Padre es siempre su Rey y Creador aún bajo las condiciones de la naturaleza humana.

En este punto Dios interviene, con su tercera orden, disimulando con Paciencia Divina al tumulto causado por Lucifer y por sus seguidores. La autenticidad de este hecho vio y lo describió San Juan Apóstol en el Apocalipsis:

“una gran señal apareció en el cielo: una mujer vestida de sol, con la luna bajo sus pies y una corona de doce estrellas sobre su cabeza. Está en cinta y grita con los dolores de parto y con el tormento de dar a luz” (Ap. 12.1).

En este cuadro estupendo Dios mostró a todos los ángeles la divina maternidad de María Santísima e intelectualmente la unión Hipostática de la Naturaleza Divina con la naturaleza humana en la Sagrada Persona de Jesucristo: “Mágnum pietatis Sacramentum” (Tm 3,16).

Para salvar a los Ángeles tribulados y vacilantes San Miguel gritó:

“Veneremos a esta mujer singular y bendita, que será la obra de arte de la Santísima Trinidad, la Madre futura del Verbo Divino y nuestra futura, gloriosa y admirable Reina Arrodillémonos ante los planes divinos que recaen sobre Ella”.

Respondió Lucifer. “No ¡Nunca serviré a una naturaleza inferior de la mía, como es la naturaleza humana!”. Y con él gritaron muchísimos Ángeles.

Dios respondió: “Y bien, esta Mujer a la que le has negado veneración, será Aquella que te aplastará la cabeza y por ella serás vencido y aniquilado. Porque si por tu soberbia entrará la muerte en el mundo del futuro, por su humildad entrará la vida y la salud a todos los mortales, los cuales gozarán del premio y la corona que tú y los tuyos han perdido”.

Los buenos entonan cantos armoniosos en honor de María Santísima para alabar su futura existencia y deciden unánimemente defender contra los rebeldes el honor del Verbo Encarnado y de su futura Madre y Reina.

En este punto Lucifer prorrumpe contra la Mujer predilecta con insultos ásperos y blasfemias que eran inauditos en el ambiente del Cielo.

“¿Quién (ES) COMO DIOS?, exclama nuevamente San Miguel y desencadena una gran guerra en el Cielo, como vio San Juan Apóstol en la isla de Pathmos y describe su visión del Apocalipsis: “Entonces se entabló una batalla en el cielo: Miguel y sus ángeles combatieron contra el dragón. Lucharon encarnizadamente el dragón y sus ángeles, pero fueron derrotados y los arrojaron del cielo para siempre” (Ap 12. 7-8).

A la derrota de Lucifer, sigue un castigo adecuado para su pecado. El ángel rebelde se vio trasformado de Espíritu de Luz en un monstruo horrible con siete cabezas, que significaban las siete legiones en las cuales fueron divididas y ordenados los ángeles caídos, transformados también ellos en seres repugnantes, en diablos, Lucifer nombra un jefe para cada Legión, según los siete vicios capitales: Soberbia, avaricia, lujuria, ira, gula, envidia, pereza. Pecados con los cuales más tarde, arrastrarán a los hombres para poblar su reino del eterno dolor.

Entre el inmenso asombro de San Miguel y de los Ángeles buenos se abrió el infierno donde Lucifer se precipito transformando en un Dragón Rojo con todos sus secuaces.

En la profundidad del infierno Lucifer comprendió su equivocación que terminó en tragedia irreparable: “La diadema de nuestra cabeza ha caído; ay de nosotros que hemos pecado” Pero era tarde… demasiado tarde… para siempre, para la eternidad.

Cuando regresó la calma después de la separación, las tinieblas del pecado de la Luz de la Gracia, la mirada adolorida de Dios busca consuelo ante la Imagen de la “Mujer vestida de Sol” suspirando el tiempo de su creación y con ímpetu divino susurra… Ave, Ave oh llena de Gracia… ¡Yo estaré siempre contigo!

Luego Dios se dirigió a San Miguel y lo felicitó por su fidelidad y por su espléndida victoria.

Dios Omnipotente, para premiar la fidelidad heroica de San Miguel, le dio el puesto dejado vacío por Lucifer, lo constituyó en el Primer Ministro de la Santa Trinidad, Príncipe de los príncipes angélicos y jefe Supremo de los nueve coros de Ángeles, lleno de poder, honor y gloria y más cerca del trono Divino. Su esplendor está en grado de iluminar toda la tierra, como vio San Juan en el Apocalipsis.

Restablecido el orden en los cielos angelicales, el campo de batalla donde prosiguió la lucha entre la luz y las tinieblas pasó a la tierra de los hombres.

El ángel destronado consiguió seducir a nuestros primeros padres para hacerlos pecar, como él, contra el
Altísimo, queriendo ser como dioses (Gen 3, 5) y el Señor declaró la guerra al tentador: “Enemistad pondré entre ti y la mujer, y entre tu linaje y su linaje” (Gen 3, 15).

A partir de este momento, la historia humana está atravesada por una ardua lucha contra el poder de las tinieblas. Iniciada al comienzo mismo del mundo, esta batalla durará hasta el último día, según las palabras del Señor. El hombre, inserto en esta batalla, debe luchar por sumarse al bien.

Es por eso, que en estos días es muy importante, que se consideren las palabras que San Miguel, le confía a Sor Filomena: “Haz conocer a los hombres mi gran poder ante la Santísima Trinidad. Diles que me expongan con confianza todos sus deseos y necesidades espirituales y corporales. ¡Qué sepan, que mi especial protección a favor de mis devotos es ilimitada! ¡Haz conocer mi grandeza”, fue la orden dada a sor Filomena y por medio de ella a todos los cristianos!.

El Papa Pío XII, con respecto a éstas palabras inspiradas por San Miguel y divulgadas por Sor Filomena dice: “¡Extrañamente, recurrir al Arcángel es mucho más urgente que que entonces! El mundo, intoxicado por la mentira y por la deslealtad, herido por los excesos de la violencia, ha perdido la santidad moral y la alegría”.

San Miguel, también le dice a Catalina Emmerick: “Hasta que todos los cristianos no imploren mi socorro, mis Ángeles y yo no restableceremos el orden en la tierra”.

Así es que, si queremos salir victoriosos, en este combate, además de las armas decisivas de la gracia de Dios, que los sacramentos nos proporcionan en superabundancia, los hombres cuentan con el auxilio y la protección de los ángeles.
Al príncipe de la Jerusalén celestial corresponde la capitanía de todas legiones angélicas en la lucha contra las fuerzas del infierno por la salvación de las almas. Así es, como san Miguel prosigue en la tierra la lucha triunfal que comenzó en el Cielo.


Gran parte de este escrito fue tomado del libro: “ ¿Quién es San Miguel Arcángel? De Gloria Crux.
Fuente de información: