GRACIAS POR ESTAR AQUÍ...

GRACIAS POR ESTAR AQUÍ...
...." el pueblo recoge todas las botellas que se tiran al agua con mensajes de naufragio. El pueblo es una gran memoria colectiva que recuerda todo lo que parece muerto en el olvido. Hay que buscar esas botellas y refrescar esa memoria". Leopoldo Marechal.

LA ARGENTINA DEL BICENTENARIO DE LA PATRIA.

LA ARGENTINA DEL BICENTENARIO DE LA PATRIA.
“Amar a la Argentina de hoy, si se habla de amor verdadero, no puede rendir más que sacrificios, porque es amar a una enferma". Padre Leonardo Castellani.

“
"La historia es la Patria. Nos han falsificado la historia porque quieren escamotearnos la Patria" - Hugo Wast (Gustavo Martínez Zuviría).

“Una única cosa es necesario tener presente: mantenerse en pie ante un mundo en ruinas”. Julius Evola, seudónimo de Giulio Cesare Andrea Evola. Italiano.

jueves, enero 02, 2020

Yanquetruz en Valcheta por Jorge Castañeda.

Se llegó a decir que bajo el imperio de los Yanquetruz, a semejanza de la España imperial, “nunca se ponía el sol”. Y su representante más famoso: José María B. Llanquetruz (otra grafía de su apelativo) fue apodado con toda justeza “el cacique talentoso”.
El nombre de esta familia de célebres caciques sería mapuche, a pesar de su estirpe tehuelche según investigaciones del doctor Rodolfo Casamiquela, que glosó en un enjundioso libro todo el linaje de los Yanquetruz.
Bajo la forma de Llancathrur –según Cuadrado Hernández- en idioma mapuche, “deriva de llanca, piedrecillas cobrizas, de color verde-azulejo horadadas, muy estimadas por los mapuches para pagas y adornos, y thrur, que significa hermoso, precioso, sin defecto, con la acepción también de cosa igual, ajustada, compuesta. De manera que Llancathrur o Llanquetruz se traduciría por: piedrecita preciosa o igual a las piedrecitas, o piedrecita perfecta. Por su parte, llanca, es antecedentes de apellidos y es el tótem de muchas estirpes araucanas”.
En la nota que nos ocupa nos referiremos al cacique de estirpe tehuelche patagónica José María Bulnes Yanquetruz, distinguido con el número (3) por Casamiquela. Fue llamado también con los apodos de “el grande”, el “feroz” y tenía “en su haber la inmolación del teniente coronel Nicanor Otamendi y 123 oficiales y soldados que comandaba, en la batalla de San Antonio de Iraola, donde además perdieron la vida numerosos indios”.
El caso que nos interesa es la relación de este cacique con el entonces llamado “paso de Balcheta” y que quedó plasmado en un documento imperdible firmado el 24 de mayo de 1857 suscrito por Valentín Alsina, gobernador; José M. Zapiola, ministro de Guerra y Marina; José María B. Llanquetruz y su secretario, José del Carmen Márquez.
Este acuerdo del gobierno de Buenos Aires con el cacique Yanquetruz consta de 15 artículos por el que han “convenido ambos en ajustar y celebrar el arreglo que prometen solemnemente y obligan a cumplir con entera exactitud y lealtad”.
Entre las disposiciones que, en síntesis contiene el acuerdo se destacan estos puntos: “Libertad de comerciar de una y otra parte. Llanquetruz reconoce que sus antepasados cedieron por tratado al antiguo gobierno de España las tierras que se conocen por Patagones hasta San Javier. La formación de una población destinada a procurar la civilización y adelanto de los indios. El gobierno facilitará herramientas, animales y semillas. Se declara a Llanquetruz comandante en jefe de todo el territorio de la Pampa, que es adyacente a la jurisdicción de Patagones. El gobierno podrá poblar Choelechoel o algún otro punto militar del curso del río Negro para lo cual Llanquetruz prestará todos los auxilios y brazos, los cuales serán debidamente remunerados y pagados. Llanquetruz fijará residencia en el paso de Balcheta y aunque declara que puede disponer de más de 1.000 hombres sólo vendrá con 80 y, además, ocho caciques. La fuerza se pone a los órdenes del gobierno de Buenos Aires y Llanquetruz gozará, como jefe inmediato de ella, de la clase de capitán con grado de teniente coronel y el sueldo mensual de 1.200 pesos; los ocho caciques 100 y cada uno de los 80 hombres 50 pesos. Llanquetruz se obliga a estar siempre pronto para proteger y apoyar las costas marítimas del territorio que queda bajo su mando. En caso de expediciones contra enemigos Llanquetruz deberá ponerse en campaña con una columna que no deberá bajar de 500 hombres, los que recibirán sueldo y alimentación.
El artículo final dispone: “Estando hoy el comandante Llanquetruz en posesión de la parte Sud del río Negro, en todo el curso de este río, y en posesión, por consecuencia, de todos los pasos de él, se obliga también a oponerse absolutamente, y a impedir por todos los medios, a que pase cosa alguna a la parte Norte”.
Del documento se desprende la importancia del reconocido “paso de Balcheta” que ya era un lugar muy recomendado por viajeros, científicos y expedicionarios, como también muy estimado por los pueblos preexistentes y que fuera posteriormente abrigo de muchos caciques, como Sacamata, Chagallo y otros.
Con respecto a la muerte de Yanquetruz en una pulpería en las afueras de la ciudad de Bahía Blanca hay varias versiones, pero ya es motivo de otra nota.
Publicado en Diario "Río Negro", 2 de enero de 2020.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

La diferencia de opiniones conduce a la investigación, y la investigación conduce a la verdad. - Thomas Jefferson 1743-1826.