Nacida en la localidad rionegrina de Ingeniero Luis A. Huergo el 23 de agosto de 1943. Esta mujer huerguense nieta del gran cacique mapuche, el lonco Paine. Fue cantante, referente de la cultura mapuche "Nuestro Pueblo no ha muerto, aun existe y seguirá' existiendo", repetía una y otra vez. Aimé Painé. Destinada a cubrir un espacio histórico. Tocaba el cultrun y las cascahuillas, la pifilca y el torompe (instrumentos musicales típicos mapuche). Los medios de comunicación la llamaban 'La Princesa', quizás porque era hermosa, de modales finos, con una voz que sobresalía entre los grandes del canto y vivía en un barrio residencial de Buenos Aires.
Su crianza se dio en una familia de muy buena condición económica que la adoptó y la enviaron a estudiar al Colegio María Auxiliadora de Mar del Plata. Siempre y de muy pequeña soñaba con ser cantante y contando con aptitudes para ello, estudió música con profesores privados (guitarra, con Roberto Lara; canto, con Blanca Peralta y Nina Kabanciwa).
Aimé contaba siempre que no veía la hora y que esperaba con gran impaciencia las fiestas de Semana Santa y Corpus Christi, porque era la época de interpretar los Cantos Gregorianos que las religiosas le enseñaban. De niña se dio cuenta que esos tonos y esos cantos eran muy parecidos al Taïel, tonada mapuche que una de las muchas abuelas paisanas (jamás conoció a sus propias abuelas de sangre), la abuela Domitila interpretaba en Mapudungun (lengua Mapuche). Contaba en sus entrevistas que el Taïel era un canto despojado, tan libre y natural como religioso; era cantar la vida.
Cuando contaba con 29 años (1973) ingresó al Coro Polifónico Nacional y allí descubrió lo que verdaderamente significaba la música para ella. Fue, precisamente, durante un encuentro internacional de coros en Mar del Plata, donde cada país había preparado al menos una obra de música indígena o folclórica, menos el coro argentino, allí sintió consternación y humillación de pertenecer a un país que niega sus raíces. Este acontecimiento la llevó al sur a impregnarse de la espiritualidad de sus mayores, allí Aimé Painé descubrió que la música mapuche era una verdadera atracción espiritual, que su música provenía de la experiencia de cantar en un universo de soledad en el que se encontraba su tierra natal.
Su nombre de origen tehuelche no tiene traducción y su apellido mapuche designa al color celeste en esa lengua.
Adaptó sus canciones mapuches con tintes regionalistas pero siempre utilizando el trompe, el kultrun, los cascawillas, y mencionando el uso de la trutruka y del kull kull (salvo el primero, que fue asimilado del huinca, todos instrumentos sagrados mapuches). Cada una de las letras de sus canciones cuentan una historia de los mapuches-tehuelches, corriendo el velo al mundo y haciendo conocer siempre la filosofía natural de sus "hermanos": "Palpé la libertad y la misión de lucha que entraña la libertad, saber de la cultura de su pueblo es saber de uno mismo".
Se encuentra enterrada en su ciudad natal (Ing. Luis. A Huergo, Río Negro, Argentina) junto a la tumba de su padre, don Segundo Painé, fallecido luego que su hija, a los 103 años de edad.
Su crianza se dio en una familia de muy buena condición económica que la adoptó y la enviaron a estudiar al Colegio María Auxiliadora de Mar del Plata. Siempre y de muy pequeña soñaba con ser cantante y contando con aptitudes para ello, estudió música con profesores privados (guitarra, con Roberto Lara; canto, con Blanca Peralta y Nina Kabanciwa).
Aimé contaba siempre que no veía la hora y que esperaba con gran impaciencia las fiestas de Semana Santa y Corpus Christi, porque era la época de interpretar los Cantos Gregorianos que las religiosas le enseñaban. De niña se dio cuenta que esos tonos y esos cantos eran muy parecidos al Taïel, tonada mapuche que una de las muchas abuelas paisanas (jamás conoció a sus propias abuelas de sangre), la abuela Domitila interpretaba en Mapudungun (lengua Mapuche). Contaba en sus entrevistas que el Taïel era un canto despojado, tan libre y natural como religioso; era cantar la vida.
Cuando contaba con 29 años (1973) ingresó al Coro Polifónico Nacional y allí descubrió lo que verdaderamente significaba la música para ella. Fue, precisamente, durante un encuentro internacional de coros en Mar del Plata, donde cada país había preparado al menos una obra de música indígena o folclórica, menos el coro argentino, allí sintió consternación y humillación de pertenecer a un país que niega sus raíces. Este acontecimiento la llevó al sur a impregnarse de la espiritualidad de sus mayores, allí Aimé Painé descubrió que la música mapuche era una verdadera atracción espiritual, que su música provenía de la experiencia de cantar en un universo de soledad en el que se encontraba su tierra natal.
Su nombre de origen tehuelche no tiene traducción y su apellido mapuche designa al color celeste en esa lengua.
Adaptó sus canciones mapuches con tintes regionalistas pero siempre utilizando el trompe, el kultrun, los cascawillas, y mencionando el uso de la trutruka y del kull kull (salvo el primero, que fue asimilado del huinca, todos instrumentos sagrados mapuches). Cada una de las letras de sus canciones cuentan una historia de los mapuches-tehuelches, corriendo el velo al mundo y haciendo conocer siempre la filosofía natural de sus "hermanos": "Palpé la libertad y la misión de lucha que entraña la libertad, saber de la cultura de su pueblo es saber de uno mismo".
Se encuentra enterrada en su ciudad natal (Ing. Luis. A Huergo, Río Negro, Argentina) junto a la tumba de su padre, don Segundo Painé, fallecido luego que su hija, a los 103 años de edad.
* Fuente: internet.
NOTA DEL DIARIO RÍO NEGRO.
NOTA DEL DIARIO RÍO NEGRO.
ESCRIBEN BIOGRAFÍA DE AIMÉ PAINÉ.
La voz del pueblo mapuche.
La historia de la cantante que se dedicó a rescatar la música de sus ancestros.
La voz del pueblo mapuche.
La historia de la cantante que se dedicó a rescatar la música de sus ancestros.
La periodista Cristina Rafanelli escribió la biografía de Aimé Painé
"Ojalá las palabras pudieran expresar lo que Aimé emanaba: belleza, seriedad, dulzura y convicción en la búsqueda de sus raíces", dice León Gieco en la contratapa de "Aimé Painé. La voz del pueblo Mapuche", biografía sobre la cantante que se dedicó a rescatar y difundir la música folclórica de su pueblo.
Aime Paine nació en Ingeniero Huergo, Río Negro, el 23 de agosto de 1943 y, como dicen sus allegados, "falleció antes de tiempo" en Asunción, Paraguay, el 10 de septiembre de 1987.
Hoy hay muchos centros culturales y calles a lo largo del país que llevan su nombre.
Incluso en el salón de mujeres de la Casa Rosada hay una imagen de ella.
"Aimé me pareció siempre una mujer increíble, bellísima, con ideas muy claras. Tenía un sentimiento muy profundo hacia su gente", dice la periodista Cristina Rafanelli, que ayer presentó en Buenos Aires la biografía de la cantante, que aparecerá en las librerías de todo el país en las próximas semanas.
Rafanelli, que vive en Bariloche hace más de 25 años, conoció a Aimé personalmente porque la entrevistó varias veces para diferentes medios periodísticos.
La primera nota fue en 1979 para la mítica revista de rock "Expreso Imaginario".
–¿Cómo fue que una revista de rock se interesó en Aimé Painé?
–El rock en general, como movimiento musical, siempre estuvo reconociendo el derecho indígena sobre los territorios. Y se preguntó por qué los indígenas fueron eliminados, cuáles fueron los intereses para que eso sucediera…
Desde León Gieco hasta Almafuerte cantan sobre esto. Mientras que las revistas de rock, con "Expreso Imaginario" como pionera, también se interesaron en mirar lo que iba en paralelo a la cultura rock, como la ecología o la preocupación por el planeta Algo que justamente siempre se le valoró a los pueblos originarios es su relación con la naturaleza. Siempre hubo notas en "Expreso Imaginario" sobre el cuidado de la Tierra que tenían los Incas, por ejemplo.
Tiene que ver con una concepción diferente de todo lo que nos quieren mostrar. No son los indios los malos y los blancos los buenos.
–¿Por qué Aimé decidió volver a su pueblo?
–Ella decide volver a sus raíces después de la derrota que significó "La Campaña del Desierto".
Ellos, los mapuches, aceptan la derrota y pasan un largo período de silencio, de ocultamiento de valores, no se habla de la cultura ni su lengua. Si bien es una cultura oral, para sobrevivir en la cultura de los blancos los jóvenes se van a las ciudades y tratan de evitar que se sepa que son indios. Esconden su origen de alguna manera. Hay que pensar que gran parte de esto ocurre durante la dictadura militar.
–¿Qué fue lo que más le llamó la atención de Aimé?
–Tal que no es la mapuche que nace en una comunidad y sale a difundir su pueblo. Hace exactamente lo contrario. Aimé es abandonada a los tres años por su familia y es criada en un colegio de monjas sin saber quiénes son sus padres ni cuál es su origen. Solo sabía que era india por el apellido, pero no conocía nada sobre su pueblo. Cuando crece, a los veintipico, decide comenzar a investigar sobre su origen y su pueblo. Entonces viaja al sur y hace el proceso inverso. Hay que tener en cuenta que cuando empieza este proceso, ella era integrante del coro polifónico nacional. Y en determinado momento ella tiene un sentimiento de necesidad de identidad.
–¿Qué sucedió?
–Los coros eran muy lindos pero ella se preguntaba por qué no estaba cantando temas de su pueblo. Ahí decide dejar el coro para dedicarse al canto mapuche. Empieza a aparecer vestida de paisana y a hablarle a los mismos mapuches y a la gente blanca.
–¿Con qué intención?
–Era una manera de devolverles la identidad y el orgullo de ser indígena. Le empezó a hablar a los más chicos y comenzó a ser cada vez más didáctica en sus presentaciones. En sus últimos tiempos ya iba a ver a los tobas y a los indígenas del norte, haciendo un intercambio cultural. Pero realmente murió muy joven.
Juan Ignacio Pereyra
Reportaje del Sr. Juan Ignacio Pereyra publicado en la edición del Diario Río Negro, 19/04/2011 como así las imagenes corresponden a la misma nota.
"Ojalá las palabras pudieran expresar lo que Aimé emanaba: belleza, seriedad, dulzura y convicción en la búsqueda de sus raíces", dice León Gieco en la contratapa de "Aimé Painé. La voz del pueblo Mapuche", biografía sobre la cantante que se dedicó a rescatar y difundir la música folclórica de su pueblo.
Aime Paine nació en Ingeniero Huergo, Río Negro, el 23 de agosto de 1943 y, como dicen sus allegados, "falleció antes de tiempo" en Asunción, Paraguay, el 10 de septiembre de 1987.
Hoy hay muchos centros culturales y calles a lo largo del país que llevan su nombre.
Incluso en el salón de mujeres de la Casa Rosada hay una imagen de ella.
"Aimé me pareció siempre una mujer increíble, bellísima, con ideas muy claras. Tenía un sentimiento muy profundo hacia su gente", dice la periodista Cristina Rafanelli, que ayer presentó en Buenos Aires la biografía de la cantante, que aparecerá en las librerías de todo el país en las próximas semanas.
Rafanelli, que vive en Bariloche hace más de 25 años, conoció a Aimé personalmente porque la entrevistó varias veces para diferentes medios periodísticos.
La primera nota fue en 1979 para la mítica revista de rock "Expreso Imaginario".
–¿Cómo fue que una revista de rock se interesó en Aimé Painé?
–El rock en general, como movimiento musical, siempre estuvo reconociendo el derecho indígena sobre los territorios. Y se preguntó por qué los indígenas fueron eliminados, cuáles fueron los intereses para que eso sucediera…
Desde León Gieco hasta Almafuerte cantan sobre esto. Mientras que las revistas de rock, con "Expreso Imaginario" como pionera, también se interesaron en mirar lo que iba en paralelo a la cultura rock, como la ecología o la preocupación por el planeta Algo que justamente siempre se le valoró a los pueblos originarios es su relación con la naturaleza. Siempre hubo notas en "Expreso Imaginario" sobre el cuidado de la Tierra que tenían los Incas, por ejemplo.
Tiene que ver con una concepción diferente de todo lo que nos quieren mostrar. No son los indios los malos y los blancos los buenos.
–¿Por qué Aimé decidió volver a su pueblo?
–Ella decide volver a sus raíces después de la derrota que significó "La Campaña del Desierto".
Ellos, los mapuches, aceptan la derrota y pasan un largo período de silencio, de ocultamiento de valores, no se habla de la cultura ni su lengua. Si bien es una cultura oral, para sobrevivir en la cultura de los blancos los jóvenes se van a las ciudades y tratan de evitar que se sepa que son indios. Esconden su origen de alguna manera. Hay que pensar que gran parte de esto ocurre durante la dictadura militar.
–¿Qué fue lo que más le llamó la atención de Aimé?
–Tal que no es la mapuche que nace en una comunidad y sale a difundir su pueblo. Hace exactamente lo contrario. Aimé es abandonada a los tres años por su familia y es criada en un colegio de monjas sin saber quiénes son sus padres ni cuál es su origen. Solo sabía que era india por el apellido, pero no conocía nada sobre su pueblo. Cuando crece, a los veintipico, decide comenzar a investigar sobre su origen y su pueblo. Entonces viaja al sur y hace el proceso inverso. Hay que tener en cuenta que cuando empieza este proceso, ella era integrante del coro polifónico nacional. Y en determinado momento ella tiene un sentimiento de necesidad de identidad.
–¿Qué sucedió?
–Los coros eran muy lindos pero ella se preguntaba por qué no estaba cantando temas de su pueblo. Ahí decide dejar el coro para dedicarse al canto mapuche. Empieza a aparecer vestida de paisana y a hablarle a los mismos mapuches y a la gente blanca.
–¿Con qué intención?
–Era una manera de devolverles la identidad y el orgullo de ser indígena. Le empezó a hablar a los más chicos y comenzó a ser cada vez más didáctica en sus presentaciones. En sus últimos tiempos ya iba a ver a los tobas y a los indígenas del norte, haciendo un intercambio cultural. Pero realmente murió muy joven.
Juan Ignacio Pereyra
Reportaje del Sr. Juan Ignacio Pereyra publicado en la edición del Diario Río Negro, 19/04/2011 como así las imagenes corresponden a la misma nota.
Recién hoy supe d esta gran mujer, y no paro d emocionarme, como luchó para defender su raza.
ResponderBorrarMuy bueno tu blog Guiyermo..!!