LITERARIAS
ARGENTINAS
MANUEL GÁLVEZ E HIPÓLITO YRIGOYEN
LO QUE ESCRIBÍA...
LAS COSTUMBRES AUSTERAS DE UN GAUCHO ARGENTINO.
Manuel Gálvez decía de Hipólito Yrigoyen que era uno de los raros gobernantes a quienes el poder no aparta de sus costumbres austeras. “Sigue viviendo en la misma casita modesta, que todo el mundo considera indigna de un presidente. Los que se guían por exterioridades creen que el vivir allí puede restarle autoridad. Es lo contrario: la casita modesta le da mayor autoridad moral ante el pueblo.”“Algunos objetan que la austeridad de Yrigoyen es la del gaucho y que vive pobremente porque, siendo primitivo, carece de necesidades”
*Primitivo: es otro de los conceptos para descalificar a Yrigoyen por parte de sus enemigos porque la la casa la denominan “la cueva” el escondrijo donde vive “el Peludo” como fue apodado irreverente y despectivamente por que nunca salía para ver al mundo.
“El poder convierte en sibaritas a los hombres más austeros. Uno de ellos, elegido gobernador de una provincia, aprendió a fumar y se hacía pagar por el gobierno –millares de pesos cada año- los cigarros habanos para él y sus amigos. Decir de Yrigoyen, a propósito de su austeridad, que es un gaucho, me parece elogiarle. El gaucho fue un pobre tipo humano, que vivió austera pobreza y con rara dignidad.” finaliza el autor.
EL CACIQUE YRIGOYEN
A Don Hipólito se le llama “indio” “Cacique de tribu” es “El jefe de la tribu reparte el pan y la carne, santifica matrimonios, da absolución de los pecados, castiga a los malos, premia a los buenos y vela por el rebaño”
EL SANTO YRIGOYEN
Lo aman como un santo las mujeres de clase media y del pueblo. En las sierras de Córdoba “Llega el carnicero a su negocio, con un rollo. Las mujeres le rodean. ¿A que no saben lo que traigo?” – les pregunta a las mujeres entonces “desenvuelve el rollo y les muestra unos retratos de Yrigoyen, mientras les dice: “El retrato del nuevo santo”. Y las mujeres exclaman, en coro: “¡El doctor Yrigoyen! ¡Ay, deje que le damos un beso!”. Y el día de su entierro vendedores de estampitas pregonan a viva voz: “Lo tre ídolo del pueblo, Teresita, Bernabé, Yrigoyen”. Teresita es la Teresita de Lisieux; Bernabé, el más famoso de los jugadores de fútbol.
DEL ATENTADO A SU VIDA QUE SE SALVA HIPÓLITO YRIGOYEN.
Al mediodía del 24 de diciembre de 1929 Yrigoyen salió de su domicilio de la calle Brasil para dirigirse a la Casa de Gobierno. Acompañado por su médico, el Presidente ascendió al automóvil oficial que conducía un policía a cuyo lado viajaba un comisario. A los pocos metros, un sujeto saltó desde un zaguán hasta la acera y luego hacia el coche presidencial empuñando un revólver e hizo fuego, fracasando en su intento. Los policías que van en el coche de custodia acribillan a balazos al asesino y llevan su cuerpo a la comisaría.
Yrigoyen, que ha subido a un taxi, llega a la comisaría, contempla el cadáver del criminal y lamenta su muerte. Luego concurre al hospital donde están heridos los dos policías que lo acompañaban, y de allí se dirige a la Casa Rosada.
SOBRE LA OBRA Y LOS PROCEDIMIENTOS DE GOBIERNO DE YRIGOYEN
Este texto descriptivo es una verdadera joyita literaria de un gran escritor argentino.
“Su obra de gobernante, como su obra de conductor de hombres, es una prolongación de su interioridad, de sus hondas preocupaciones políticas, sociales y espirituales.
Los grandes gobernantes ante la Historia no son los que construyen caminos y edificios o administran bien, sino los que señalan a su pueblo nobles orientaciones, los que encarnan grandes ideas y tienen el arte de imponerlas.”
Bueno en los tiempos que corren lejos, pero muy lejos estamos de esto…
* Vida de Hipólito Yrigoyen. El hombre del misterio. Ed. Club de lectores, septiembre 1983.
Muy buenos los artículos, rescata personalidades y hechos del campo nacional entre otras cosas. Excelente y lo felicito. Un muy cordial saludo.
ResponderBorrarHéctor de San Luis