Por Dante Morasani.
En marzo de 1959, a iniciativa del productor publicitario, locutor y dirigente radical Jorge Enrique Gravier, se realizó en Neuquén capital la primera transmisión de TV mediante circuito cerrado, con un alcance mínimo de 200 metros.
El lanzamiento tuvo lugar desde las instalaciones de la histórica Cooperadora “Conrado Villegas”. La imagen que ilustra la presente nota, corresponde al acontecimiento de referencia, y en ella aparecen de izquierda a derecha, Evaristo Del Egido, Miguel Sánchez, Agustín Orejas, el camarógrafo Martín García, Gravier, su esposa Marina Ibars, José Vicuña, Horacio Bravo y Oscar Pablo Gaviglio. En su mayoría, gente vinculada a la Emisora LU5 de Neuquén.
Luego, transmisiones similares se realizaron desde los locales comerciales de Badillo Hnos. y Vaxhaco S.A. de Cipolletti y Roca, respectivamente.
En tanto, este 31 de marzo -vaya la coincidencia del tercer mes del año, con respecto a lo sucedido entre nosotros- se cumplen 79 años del día en que los porteños asistieron por primera vez a un espectáculo de televisión. Esos porteños no fueron más de doscientos, reunidos en el noveno piso de la sede central del Automóvil Club Argentino en donde se había instalado un precario receptor que captó, borrosamente, las imágenes transmitidas desde el Instituto Experimental de Televisión. Esa escuela técnica estaba ubicada en la avenida Corrientes al 1800, a unos dos kilómetros del ACA.
El invento de la televisión fue concebido en Estados Unidos en la década del 20 y aunque su desarrollo sufrió demoras, consecuencia de la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), es cierto que antes de la iniciación de esa contienda se habían concretado auspiciosas demostraciones públicas.
Aquel 31 de marzo de 1944, los espectadores del Automóvil Club vieron reflejada en la pantalla receptora la imagen del ingeniero Eduardo Grinberg, presidente del Instituto Experimental de Televisión, y lo oyeron definir esa transmisión como “el acto inaugural”, en nuestro país, del más moderno medio de comunicación.
Prácticamente, no se registraron nuevos avance hasta 1950, cuando una firma de productos de farmacia introdujo los primeros equipos norteamericanos, puestos al servicio de un importante congreso médico. Desde la Facultad de Medicina de Buenos Aires, las cámaras televisaron intervenciones quirúrgicas que los científicos observaron a través de receptores ubicados en el Plaza Hotel.
Pocos días después, esos mismos equipos se emplearon para brindar el primer “show” de la televisión argentina: fue animado por el recordado locutor Carlos Ginés, tocó el piano la concertista Lía Cimaglia Espinoza, y el billarista Pedro Leopoldo Carrera ofreció una exhibición. Los canales no habían nacido todavía.
PUBLICADO EN DIARIO RÍO NEGRO.
https://www.rionegro.com.ar/opinion/television-en-el-alto-valle-los-pasos-iniciales-2828699/
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