¿ Por qué REGINA se llama REGINA ?

Regina -esta Villa Regina- lleva el nombre de la esposa, del que fuera Presidente de la República Argentina, Doctor Marcelo Torcuato de Alvear, esa esposa que sacrificó el amor del arte lírico de su tiempo, y que cumplió sus deberes de esposa, compañera y amiga del Presidente Argentino, en un país amante de la Democracia.
Villa Regina, recuerda a quien lleva su nombre, doña Regina Pacini de Alvear, que vivió, hasta sus ultimos días en "Don Torcuato", entre los rosales plantados por la voluntad de la belleza, de un hombre que amó todas las cosas nobles de la vida.
Esa mujer, que conquistó como artista, el aplauso de una época y que por el ejemplo de su sencillez, de su decoro, de su abnegación, alcanzó otra gloria: "…la de merecer el cariño de muchas de las gentes de su pueblo."
Regina Pacini de Alvear nació en Lisboa, el 6 de enero de 1871, allí en esa casa poblada de memorias argentinas, un hogar, donde son familiares las voces de mando, victoriosas de Ituzaingó, donde la sensación de una Buenos Aires que crece, puede verse en la mirada de un retrato y en el cual, la certeza de la República y las luchas de la democracia, se identifican para la dueña, con el nombre querido de un varón; allí, en medio de un pasado de arte, de gracia, el ser que emprendió temprano un vuelo de esplendor.
La Casa del Teatro, es una creación de su espírito. Ella, la fundó, ella la alentó, ella ha vivía preocupada de su destino.
Practicó la caridad sin ostentación y construyó en la localidad de "Don Torcuato", el Templo de San Marcelo y el Colegio anexo, en memoria de su esposo.
Es por ello que en su retiro, en tan gratos días fue rodeada permanentemente, de memorias agradables a su corazón.
En honor de la distinguida esposa del Presidente Alvear, la Colonia fue bautizada con el nombre de Regina Pacini de Alvear, después denominada Colonia Regina Alvear, para conocerse más tarde, como el pueblo y colonia de Villa Regina.
Villa Regina, recuerda a doña Regina Pacini de Alvear, dando muestras de ser, un pueblo donde su historia, la cultura y el amor, se profesan con cariño y gratitud, como un homenaje de la ciudad que escribe su nombre con orgullo.

Por Franco González exclusivo para Villa Regina Digital (extraído del mismo sitio).