Arturo Umberto Illia fue Presidente de la Nación Argentina
entre el 12 de octubre de 1963 y el 28 de junio de 1966.
Hoy 12 de Octubre se
cumple el 50° Aniversario de la asunción del Dr. Arturo Illia a la Presidencia.
Asumieron, también los ministros de Interior Juan Palmero, de Relaciones Exteriores Miguel Angel Zavala Ortiz, de Defensa Leopoldo Suárez, de Economía Eugenio Blanco, de Justicia y Educación Carlos Alconada Aramburú, de Obras Públicas Miguel Ferrando, de Salud Pública Arturo Oñativia y de Trabajo Fernando Solá.
Dejó un legado de honradez, decencia, modestia, austeridad republicana
de gestión; fue como una “isla de libertades cíviles y
derechos políticos”; dejó, también, la herramienta
principal de reclamo de soberanía de nuestras Islas Malvinas e Islas de Atlántico Sur, que es la Resolución 2065 de
las Naciones Unidas (ONU); aprobada un 16 de diciembre de 1965, por instrucción del
Presidente Arturo Umberto Illia, asesorado por el Canciller Miguel Ángel Zavala Ortíz,
el enviado diplomático del Estado Argentino, Lucio García del Solar.
En esta
Resolución se invitaba “a los gobiernos de la Argentina y del Reino Unido a
proseguir sin demora las negociaciones recomendadas por el comité especial” por
la soberanía de las Islas Malvinas”.
Arturo Umberto Illia que le tocó gobernar en una Argentina
con inestabilidad política, con un peronismo proscrito y un Perón en el exilio
madrileño que preparaba el terreno para el retorno, “con el peligro rojo cubano
amenazante sobre el continente” (leáse “los barbudos” de Cuba: Fidel Castro y el “Che”
Guevara), un radicalismo divido entre radicales del Pueblo e Intransigentes
(típico del radicalismo cuando asume un gobierno “empiezan las internas”).
Arturo Umberto Illia demostró en los hechos que el principio
de la Austeridad Republicana no es una consigna para el discurso florido de la
tribuna política.
Algunos aseveran que “valdría la pena preguntar por qué
Illia murió pobre”.
Hace unos 50 años cuando llega a la Casa Rosada con un
patrimonio y se retiró con el mismo patrimonio. Resulta ser acreedor del Tesoro
Nacional, por gastos realizados en su último mes, que no reclamó. ¡inaudito!
Rechazó
un automóvil oficial el día que fue echado por “los generalitos” y tampoco
aceptó la jubilación porque esta provenía de un gobierno de facto; no quiso, ni
impulsó un incremento en sus haberes mientras ejerció su mandato presidencial.
Su primer acto de gobierno consistió en eliminar las
restricciones que pesaban sobre el peronismo.
Desde la mal llamada “Revolución Libertadora” las manifestaciones de ese partido estaban prohibidas
por el Decreto 4161/56; el 17 de octubre
de 1.963 se realizó un acto conmemorativo en Plaza Miserere sin limitación
alguna. Durante su período se levantaron las restricciones electorales,
habilitando la participación del peronismo en los comicios legislativos del año
1965. También se levantó la prohibición que pesaba sobre el Partido Comunista
(PC).
La fórmula presidencial de la Unión Cívica Radical del
Pueblo (URCP) conformada por Illia-Perette triunfa con un magro 25,8% llega
débil al gobierno y en una Argentina donde la inestabilidad política y económica es desde
años y años la reina y señora.
La segunda fórmula presidencial fue la de la Unión Cívica
Radical Intransigente (UCRI), encabezada por otro médico, Oscar Eduardo Alende
(ex Gobernador de la provincia de Buenos Aires), y tercero entró el general y
ex presidente de la mal denominada "Revolución Libertadora", Pedro
Eugenio Aramburu.
Durante su gestión se fomentó la industria nacional, se
destinó el 23% del presupuesto nacional a la educación (la mayor cifra en la
historia del país), el PBI y el Producto Externo Industrial crecieron (el
último a un vertiginoso 19% en 1964), bajó la desocupación, se disminuyó la
deuda externa, se llevó adelante un plan de alfabetización y se sancionaron las
leyes de Salario Mínimo, Vital y Móvil y la llamada Ley de Medicamentos que promovía la industria de los laboratorios nacionales, disminuyó el costo e los remedios medicinales, considerados un bien social. Esta Ley fue una de las causales de su derrocamiento.
Durante su gestión no existió un solo acto de corrupción en la Administración Pública.
Se promovió la modificación del Código Penal para que en casos de sospecha sobre funcionarios por actos de corrupción y enriquecimiento ilícito, se invirtiera la carga de la prueba, como una forma de proteger el erario.
Después de jurar como Presidente, Illia viajó hasta la Casa
Rosada en el Cadillac oficial descapotable flanqueado por el comandante en jefe
del Ejército, general Juan Carlos Onganía, y el por entonces titular de la
Armada, Eladio Modesto Vázquez.
Durante su gobierno visitaron el país el Presidente de
Francia, Charles De Gaulle, el Rey de Bélgica, el Presidente italiano Saragat,
el de Chile Eduardo Frei Moltalva.
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