Nombre científico:
Rhea pennata
Una de las dos especies de ñandúes en el norte patagónico, son aves corredoras incapaces de volar, inconfundibles por su forma y gran tamaño.
Llega a pesar 25 kg. Patas largas y muslos musculosos. Cabeza pequeña, con ojo grande. Pico corto y aplanado.
Parecido al ñandú pampeano, algo menor y con diferente coloración. Las plumas de las alas cubren el dorso y están manchadas de blanco en el extremo, dándole un aspecto moteado, que permite diferenciarlo del ñandú pampeano. Tiene tres dedos con uñas muy desarrolladas: deja una huella fácil de identificar.
La hembra es más pequeña, pálida y con manchado blanco poco notorio. Habita estepas arbustivas y herbáceas en grupos familiares de 5 a 10 individuos, a veces acompañando otros herbívoros como guanacos u ovejas. Muy esquivo, en caso de peligro corre veloz; sin ser perseguido es muy confiado. Come materia vegetal, incluidas semillas y hierbas; también pequeños animales como insectos y crías de lauchas o lagartijas. Cría en primavera y verano, los machos incuban los huevos y cuidan la prole. Ha desaparecido o se ha vuelto muy escaso en muchas localidades de Río Negro y Neuquén: sufre gran presión de caza, persecución por perros y recolección de huevos.
Consejos para avistaje
• Habita la estepa patagónica. En tierras bajas del norte y este de Río Negro es reemplazado por el ñandú pampeano de mayor tamaño y cuello negro.
• Es posible verlo desde la ruta en campos y banquinas.
Publicado en Suplemento "Voy" del Diario "Río Negro" (Edición Nro. 24.677), domingo 9 de abril de 2017, página 7.
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