"Eramos una máscara, con los calzones de Inglaterra, el
chaleco parisiense, el chaquetón de Norteamérica y la montera de España. El
indio, mudo, nos daba vueltas alrededor, y se iba al monte, a la cumbre del
monte, a bautizar sus hijos. El negro, oteado, cantaba en la noche la música de
su corazón, solo y desconocido, entre las olas y las fieras. El campesino, el
creador, se revolvía, ciego de indignación, contra la ciudad desdeñosa, contra
su criatura. Eramos charreteras y togas, en países que venían al mundo con la
alpargata en los pies y la vincha en la cabeza".
Así pensaba un HOMBRE LIBRE CON DECORO QUE LUCHÓ POR LA LIBERTAD.
"Hay hombres que viven contentos aunque vivan sin decoro. Hay
otros que padecen como en agonía cuando ven que los hombres viven sin decoro a
su alrededor. En el mundo ha de haber cierta cantidad de decoro, como ha de
haber cierta cantidad de luz. Cuando hay muchos hombres sin decoro, hay siempre
otros que tienen en sí el decoro de muchos hombres. Esos son los que se rebelan
con fuerza terrible contra los que les roban a los pueblos su libertad, que es
robarles a los hombres su decoro".
José Julián Martí Pérez era hijo de hijo de Mariano de los
Santos Martí y Navarro que era
valenciano y de Leonor Pérez Cabrera proveniente de Santa Cruz de Tenerife, en
Canarias, de escasos recursos económicos, radicados en Cuba.
Martí nació en la Habana el 28 de enero de 1853, en la calle Paula (hoy Leonor Pérez, 314), fue bautizado 15 días más tarde, el 12 de febrero, en la Iglesia del Santo Ángel Custodio de La Habana.
Martí nació en la Habana el 28 de enero de 1853, en la calle Paula (hoy Leonor Pérez, 314), fue bautizado 15 días más tarde, el 12 de febrero, en la Iglesia del Santo Ángel Custodio de La Habana.
Las hermanas fueron Leonor Petrona; Mariana
Matilde Salustiana; María del Carmen; María del Pilar
Eduarda; Rita Amelia; Antonia
Bruna y Dolores Eustaquia.
Se lo considera con justicia como el más genial y universal
de los pensadores cubanos.
Por 1866 se matricula en el Instituto de Segunda Enseñanza
de La Habana. Ingresa también en la clase de Dibujo Elemental en la Escuela
Profesional de Pintura y Escultura de La Habana, más conocida como San
Alejandro.
Estudió bajo el cuidado del poeta Rafael María de Mendive.
A los dieciséis años fue encarcelado por sus ideas
revolucionarias y posteriormente indultado y deportado a España. Continuó su
educación en la Universidad de Zaragoza donde se licenció en las carreras de
Filosofía y Letras y en Derecho, ambas
en 1874.
Vivió luego en México y Guatemala, regresando a Cuba.
Contrae matrimonio con Carmen Zayas-Bazán e Hidalgo; una
hermosa camagüeyana que se convertiría en su esposa el 20 de diciembre de 1877,
tras contraer nupcias en la Catedral Metropolitana, según consta en acta
matrimonial. El 22 de noviembre de 1878
nace su hijo José Francisco.
En 1881 le dedicara a su hijo su primer libro de versos:
Ismaelillo.
Fue fundador del Partido Revolucionario Cubano y uno de los
grandes artífices de la guerra de independencia, es considerado el prócer
nacional cubano.
"La política es el arte de inventar un recurso a cada nuevo recurso de los contrarios, de convertir los reveses en fortuna; de adecuarse al momento presente, sin que la adecuación cueste el sacrificio, o la merma importante del ideal que se persigue; de cejar para tomar empuje; de caer sobre el enemigo, antes de que tenga sus ejércitos en fila, y su batalla preparada”.
Fundó y dirigió "Patria" que fuera el órgano oficial del Partido Revolucionario Cubano. Escritor de una prosa estupenda y una poesía insuperable se destacan el Ismaelillo (1882), Versos libres (1878-1882, publicados póstumamente), Versos sencillos (1891), Flores del destierro, así como sus opiniones de diversas temáticas de Nuestra América.
Entre 1880 y 1890 Martí alcanzaría renombre en la América a
través de artículos y crónicas que enviaba desde Nueva York a importantes
periódicos: La Opinión Nacional, de Caracas; La Nación, de Buenos Aires y El
Partido Liberal, de México.
Fue cultor de la Patria Grande el panamericanismo, y junto a
Francisco de Miranda, a Simón Bolívar. a un José de San Matín quienes soñaron siempre
con la unión de Nuestra América como un solo país, desde el Río Bravo hasta la
Patagonia, por su origen, su lengua y su historia.
En el año 1882 manifestaba José Martí: "El arte de
curar consiste más en evitar la enfermedad y precaverse de ella por medios
naturales, que en combatirla por medios violentos e inevitablemente dañosos
para el resto del sistema, cuyo equilibrio es puesto a contribuir en beneficio
del órgano enfermo. La higiene va siendo la verdadera medicina, y con un tanto
de atención, cada cual puede ser un poco médico de sí mismo. Debía hacerse
obligatoria la enseñanza de la higiene en las escuelas públicas" una idea que
con discurrir sería tomada con seguridad (la conociese o no) por el que fuera
el Primer Ministro de Salud de la Argentina Don Ramón Carrillo.
Durante su exilio en EE.UU. se dedicó al periodismo y fundó
el Partido Revolucionario Cubano en 1892.
José Martí perteneció al influyente y poderoso” Club
Crepúsculo”, de Nueva York, fundado en 1882, luego de la visita del filósofo
inglés Herbert Spencer.
Dicho Club contó como miembros a Walt Whitman, Mark Twain;
se vinculó de lleno al Club, porque como gestor al fin de una Revolución
independentista, quiso conocer a las figuras que lo formaban, críticos del
expansionismo estadounidense, y eso beneficiaba su lucha en los últimos años de
su juventud.
Perteneció al movimiento literario del modernismo.
Su única novela, Amistad funesta, también llamada Lucía
Jérez y firmada con el pseudónimo de Adelaida Ral, fue publicada por entregas
en el diario El Latino-Americano en 1885.
Murió en combate en 1895 durante su lucha contra las tropas
españolas en Dos Ríos, actual provincia de Granma, en el oriente cubano.
Y ahora como cierre un fragmento de “José Martí Pregonero”
de Mario Benedetti.
José Martí pregonero
no moriste en tu pregón
tus versos viven y son
pregones de un pueblo entero.
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