Pichetto: "Recuperé la capacidad de decir lo que pienso".

El jefe de la bancada del Frente para la Victoria en el Senado, Miguel Pichetto, fundamentó el voto dividido del peronismo a las leyes que abren el pago a los fondos buitre afirmando que "nuestro bloque va a votar en un ejercicio de libertad individual".

"Yo lo voy a hacer por la afirmativa", confirmó lo que ya se sabía, poco antes de que se votara "en general" el proyecto del Gobierno.

Argumentó que votó "por la afirmativa" porque consideró "fundamental resolver esta cuestión pendiente con rapidez e inteligencia, haciendo un aporte para el país".

El legislador inició su discurso de 50 minutos aclarando que su bloque votó "en un ejercicio de libertad individual, con posiciones respetables de cada uno".

Admitió que "no me gusta del proyecto el emplazamiento (al Congreso y la sociedad), me hace acordar al (Domingo) Cavallo de ese tiempo", dijo, en alusión a los años 90, cuando el entonces ministro de Economía advertía que debía aprobarse el endeudamiento advirtiendo sobre las consecuencias catastróficas de no hacerlo.

Recordó que "estamos frente a una sentencia (del juez Thomas Griesa), que tiene efecto coactivo" y dijo, tomando palabras de su colega de bloque, Omar Perotti, que "construimos el 93 por ciento del puente (por los tenedores que entraron a los dos canjes de 2005 y 2010), falta el 7 por ciento. Hay que terminarlo, porque si no, el puente no sirve para nada".

Pichetto enfatizó que "si no se arregla (con los holdouts), la litigiosidad va a aumentarse de una manera exponencial, con alto riesgo para el país".

"El problema no es solamente pagarle a estos bonistas malos, malísimos. Nosotros tenemos que recuperar la capacidad de pago para pagarle a los (bonistas) reestructurados, que desde el 30 de junio de 2014 que no cobran", enfatizó.

Además, advirtió que "si la señal que brindáramos esta noche" fuera negativa, eso "va a determinar la aceleración de los bonistas en los títulos que son iguales".

También arremetió contra quienes aseguran que la ley aprobada implica un nuevo endeudamiento para el país: "Anoche yo miraba por TV que en un canal de noticias se decía que la Argentina volvía a endeudarse. Están equivocados. Tienen un problema de formación. La Auditoría General de la Nación tiene registrada la deuda. En el cierre de cuentas de 2014 era 11.532 millones de dólares. No es una nueva deuda. Lo que estamos haciendo es emitir bonos a 10 y 30 años para conseguir efectivo y tratar de resolver el tema de la deuda. No aumentarla".

Finalmente, Pichetto sostuvo: "Tuve un sentimiento de lealtad con mi gobierno hasta el último momento, pero la Presidenta, cuando se fue, nos despidió en Olivos, nos dijo: Hay que tratar de ayudar al gobierno, no hay que bloquear. Ahora viene un debate mucho más horizontal".

"No estoy atado a las obligaciones que me ataba por ser del oficialismo", justificó, y advirtió por último, adelantando la segura aprobación: "No hay nada para festejar acá".

"Tuve una lealtad indisoluble con mi gobierno hasta el último minuto, pero la presidente cuando se fue nos dijo que tratemos de ayudar a gobernar. Y bueno, he recuperado la capacidad de pensar, reflexionar y decir lo que realmente pienso. Ya no estoy atado por las obligaciones que me determinaban el hecho de ser gobierno".

García Larraburu votó en contra y se aleja de Pichetto.

La senadora Silvina García Larraburu fue uno de los 16 votos que en la Cámara de Senadores rechazó el proyecto del gobierno por el pago a los fondos buitres por considerar que significaba un "endeudamiento para el país por 15.000 millones de dólares".

La extensa sesión en el Senado terminó después de la medianoche con 54 votos a favor, 16 en contra y 2 ausencias. Miguel Pichetto acompañó la ley con su voto, la arista Magdalena Odarda estuvo ausente y García Larraburu en contra.

La barilochense ya había anticipado su visión crítica al pago de los fondos buitres con el acuerdo promovido por el gobierno de Mauricio Macri y a pesar de que Pichetto acompañó, siguió con autonomía con esa negativa y la fundamentó en la Cámara Alta cerca de las 18.

"Mi oposición es en representación de todos los rionegrinos que confiaron en mí para que defienda sus intereses en el marco de un proyecto de soberanía e independencia, no de subordinación y dependencia", indicó García Larraburu.

La senadora dijo que "se trató de una negociación acelerada, que nos pone de rodillas y repite recetas externas que no han funcionado; ya conocemos el enlatado foráneo que se presenta como una panacea pero viene con condicionamientos anexos ".

Para la barilochense con este acuerdo "no se puede hipotecar el futuro de nuestros hijos y nietos a costa de la desesperación y el amateurismo político de este gobierno".

Acusó que Macri y su equipo "en campaña no nos dijeron que nos iban a endeudar de este modo, con las cifras más abismales que jamás hubiéramos imaginado".

"Me alarma ver que los principales ministerios de Nación tienen la cabeza puesta en la salvación externa a través de los holdouts y en el ajuste permanente del Estado; este es un gobierno que no reconoce las capacidades del interior profundo, no propone un solo plan de contingencia ante los más de 100 mil despidos y circunscribe su mirada al mundillo financiero, sin industria, sin trabajo ni valor agregado", afirmó.

Con decisivo apoyo de la oposición, gobierno logra la ley para pagarles a los fondos buitre.

Las primeras veces no son fáciles, pero, luego de semanas de negociaciones, el Gobierno logró un éxito importante: en una sesión de gran significado político, el oficialismo consiguió anoche la sanción de su primera ley enviada al Congreso. El Senado aprobó el proyecto para pagar la deuda a los holdouts con 54 votos a favor, de los cuales la mitad provino del Frente para la Victoria, que se sumaron a los de Cambiemos, el peronismo disidente y el Gen. Aunque sólo necesitaba 37 votos, fue aprobado por mayoría absoluta. Hubo sólo 16 votos en contra y 2 abstenciones.

La sesión en el recinto de la Cámara Alta comenzó minutos antes de las 11 de la mañana. Con más de medio centenar de oradores anotados, se extendió por casi 14 horas y se desarrolló sin grandes cruces, en contraste con el debate tenso en diputados de hace dos semanas.

No obstante, quedó evidenciada la interna que se vive en el PJ, divido virtualmente en dos entre un sector más dialoguista, que garantizó la aprobación del proyecto, y un sector duro, kirchnerista, que criticó duramente la iniciativa del ejecutivo.

El proyecto permite tomar deuda por 12.500 millones de dólares para hacer frente al pago con los holdouts. Además, contempla la derogación de la ley cerrojo, que impide abrir nuevas negociaciones, y la ley de pago soberano, sancionada para esquivar el fallo del juez Thomas Griesa, que prohibía el pago a los bonistas que sí entraron en las reestructuraciones de 2005 y 2010.

Todo los miembros del bloque del FpV que votaron a favor coincidieron en la necesidad de cerrar de una vez por todas el tema de los fondos buitre y facilitarle al Gobierno las herramientas para salir del default, poder acceder al crédito internacional y gobernar. Algunos recordaron que militaron con Daniel Scioli y que su equipo económico tenía el plan de cerrar un acuerdo. Otros reconocieron que la situación de las provincias y el apoyo de los gobernadores influyó. La mayoría reconoció dudas y no ahorró críticas contra el Gobierno.

Entre aquellos que votaron en contra, no faltaron los pases de factura a los que acompañaron. Calificaron como mal acuerdo el propuesto por el oficialismo, que no garantiza que el 93% de los acreedores que ingresó a la reestructuraciones no dispare nuevos litigios contra la Argentina. Además, criticaron la posibilidad de que se incurra en un nuevo ciclo de sobreendeudamiento.

Los únicos ausentes a la hora de la votación fueron el bonaerense Pino Solanas (Proyecto Sur) y la rionegrina María Magdalena Odarda (F. Progresista). Sí estuvo Carlos Menem (PJ La Rioja), que votó a favor.

Curiosamente, la imagen de Néstor Kirchner y Juan Domingo Perón fue utilizada para sostener posiciones tanto a favor del acuerdo, como en contra.

Desde el oficialismo, el peronismo disidente y el GEN se destacó la necesidad de sancionar la iniciativa para acceder al crédito y atraer inversiones. El acuerdo fue defendido como el mejor posible, considerando la existencia de un fallo en contra. Por otro lado, aseguraron los senadores, se estaría tomando deuda más barata para pagar una deuda más cara, teniendo en cuenta los punitorios de las sentencias. Tras las cortinas escuchaba el ministro Alfonso Prat Gay: ahora comienza la búsqueda de fondos.

Publicado en Diario "Río Negro" (Edición Nro. 24305), jueves 31 de marzo de 2016.