Se trató del primer juicio por delitos de lesa humanidad en
la Ciudad de Mendoza.
Más de 200 personas contaron a los jueces Juan Antonio González Macías, Héctor Cortés y Alejandro Piña los hechos de los que fueron testigo.
Más de 200 personas contaron a los jueces Juan Antonio González Macías, Héctor Cortés y Alejandro Piña los hechos de los que fueron testigo.
Si ustedes lo permiten,
prefiero seguir viviendo.
Después de todo y de pensarlo bien, no tengo
motivos para quejarme o protestar:
siempre he vivido en la gloria: nada
importante me ha faltado.
Fragmento del poema de “Paco” Urondo “La pura verdad”.
Del otro lado de la reja está la realidad, de
este lado de la reja también está
la realidad; la única irreal
es la reja; la libertad es real aunque no se sabe bien
si pertenece al mundo de los vivos, al
mundo de los muertos, al mundo de las
fantasías o al mundo de la vigilia, al de la explotación o
de la producción.
Fragmento del poema “La única verdad es la realidad” frase
acuñada por el ex - Presidente Juan Domingo Perón. Este poema fue escrito en la cárcel de Devoto
(1973).
Francisco Urondo (Paco Urondo como se lo conoce) santafecino
de nacimiento (1930) fue un poeta, periodista y militante político, del país y
del extranjero, entre ellos, Primera Plana, Panorama, Crisis, La Opinión y Noticias.
A mediados de los años 60, Urondo comienza a transitar el
camino de la militancia polÍtica, ingresando primero al Movimiento de
Liberación Nacional (Malena) formado por intelectuales como Ismael y David
Viñas, entre otros. Posteriormente se integra a las Fuerzas Armadas
Revolucionarias (FAR) y más tarde a Montoneros. Dos meses después de producido
el golpe militar de 1976, la conducción de Montoneros destina a Urondo a la
provincia de Mendoza.
"El hombre para morir debe dejar su mañana algo que
tanto le seduce, alguna bufanda que le acompañó toda su vida, algunas picardías
que le bailaron en los ojos / El hombre para morir debe abandonar -con
tristeza, sí- los temblores y los sufrimientos de su carne, debe olvidar su
caricia, su supuesto abandono / El hombre para morir debe dejar sus papeles en
orden y algún dolor, el aire y los abismos de su vida / El hombre para morir
tiene que entrar en la humildad: tiene que vivir mucho".
Hoy por hoy se recuerda más al militante armado aquí
recordamos al poeta aunque Paco Urondo se unen la poesía y política sino difícil
separarlas.
“En mayo de 1976 Paco Urondo recibió la orden de ir a
Mendoza a reorganizar la regional de Montoneros diezmada por la dictadura. Un
mes después, el 17 de junio de 1976 murió asesinado. Cuando Rodolfo Walsh lo
supo, escribió una semblanza del amigo: “Llegaste a los cuarenta años con la
pasta de los grandes escritores, que no es más que una forma de mirar y una
forma de escuchar, antes de escribir. El problema para un tipo como vos y un
tiempo como éste, es que cuando más hondo se mira y más callado se escucha, más
se empieza a percibir el sufrimiento de la gente, la miseria, la injusticia, la
crueldad de los verdugos. Entonces ya no basta con mirar, ya no basta con
escuchar, ya no alcanza con escribir” (http://www.infojusnoticias.gov.ar/)
Murió el 17 de junio 1976, enfrentando a la dictadura
militar en una cita emboscada que terminó con el secuestro de su esposa Alicia
Raboy y de su hija Ángela.
"Empuñé un arma porque busco la palabra justa",
dijo alguna vez.
Fueron cuatro los ex
policías condenados a cadena perpetua y un militar a 12 años por el asesinato del
poeta, militante, periodista y guerrillero de FAR y montoneros "Paco" Urondo.
La pena máxima recayó sobre el ex comisario inspector Juan
Agustín Oyarzábal, el ex oficial inspector Eduardo Smahá Borzuk, el
exsubcomisario Alberto Rodríguez Vázquez y el exsargento Celustiano Lucero. El
exteniente Dardo Migno recibió 12 años de cárcel el juez de la causa era Juan
Antonio González Macías en el Tribunal Oral Federal Nº 1 de Mendoza, declararon
más de 200 testigos y fue el segundo de la provincia de Mendoza.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
La diferencia de opiniones conduce a la investigación, y la investigación conduce a la verdad. - Thomas Jefferson 1743-1826.