Era el cumpleaños del General. Sería el último, eso era
previsible, pero en rigor nadie se animaba a asumirlo.
Ferdinando Pedrini, un diputado chaqueño brillante y
luchador, nos invitó a unos pocos a saludar al Presidente. Pensábamos saludar e
irnos, Olivos tenía demasiado movimiento. Entramos y nos hizo sentar.
Finalmente nos quedamos más de dos horas, el General quería
hablar con nosotros.
Le entregaron algunos regalos caros. Miró el nombre de la
joyería para decir, sonriendo, este señor fulano se hizo el día. Le dedicó
entonces la atención a un regalo absurdo, inocente y de poco valor de una
diputada de Tierra del Fuego, la Señora Fadul de Sobrino.
Y nos habilitaba a hablar con la mirada; era uno de esos
hombres distintos, sabios y que infunden asombro y respeto al tenerlos delante.
Quería hablar del Congreso. Podría recordar cada palabra,
cada frase de ese rato que parecía eterno.
Concentraba la atención como nadie. Nos dijo, "no
tenemos dirigencia política, pero producimos alimentos, el mundo los va a
necesitar y eso nos ayudará mucho"
Me animé a preguntarle como imaginaba al parlamento y me
respondió como si esa fuera la pregunta que había estado esperando.
Primero se autocriticó por no haber entendido antes el lugar
del Congreso. Dijo luego: "Necesitamos un parlamento de lujo, que contenga
los grandes debates de la sociedad".
Pongan en la primera fila las cuatro o cinco primeras
espadas para que conduzcan el debate, detrás los mediocres para que voten,
agregó.
Y con su reiterado guiño de picardía nos miró sonriendo y
nos dijo: "Al fondo pongan a los grandotes, por si un día hay piñas para
que peguen".
Y volvió al tema de los grandes debates que la sociedad
necesitaba y el Congreso debía contener. A la producción de alimentos, a su
industrialización.
A la integración social, al futuro de los argentinos, a los
grandes temas que ocuparon su vida.
Insistió en el encuentro con las otras fuerzas políticas, en
la democracia y el respeto entre todos, en su acercamiento con los viejos
adversarios.
Publicado en Infobae, 8 de octubre 2016.
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