¿A qué no sabés de dónde te estoy llamando? Onelli ya tiene celular.

CLEMENTI ONELLI, LINEA SUR RIONEGRINAS.
Hace 24 años, el pueblo fue pionero en el servicio de teléfono semipúblico. Ahora, las 40 familias que viven allí podrán usar teléfonía móvil.

Clemente Onelli.

“Nos cambió la vida”, aseguran los vecinos de Clemente Onelli. 
Desde el mediodía del miércoles, ya no necesitan trasladarse hasta esa única cabina que, en 1993, se convirtió en el símbolo de la privatizaciones durante el gobierno de Carlos Menem. 
Desde ese día, el pueblo tiene 39 celulares entre las 40 familias que habitan el lugar.

Los habitantes todavía no dejan de asombrarse y según afirman están “locos de contentos”. Venían reclamando el servicio desde hacía años. Y a a medida que pasaba el tiempo, los ganaba la resignación.

Sin embargo, hace una semana, un grupo de técnicos de Movistar llegó al pequeño poblado y pidió al comisionado de fomento, Luis Castillo, un lugar para poder instalar los equipos.

“Me sorprendieron. Llegaron y me dijeron si tenía un lugar en buenas condiciones para instalar los equipos. No lo podía creer. Estuvieron trabajando una semana y el miércoles, a las 13, el servicio quedó funcionando. Nos cambió la vida, estamos locos de contentos porque es un adelanto muy grande para nuestros pueblo”, detalló el comisionado.

Clemente Onelli es el segundo de los 29 parajes de la Región Sur que tiene servicio de celular. El otro es Cerro Policía. Allí hace unos años Claro instaló una antena.

Castillo recuerda cuando hace casi 24 años, Telefónica instaló el único teléfono semipúblico de la aldea. Ese que, de la mano de Sabino Morales, quien por entonces estaba a cargo del Destacamento Policial del lugar, se hizo conocido en todo el país, con aquella publicidad en la que el hombre, bebé en mano, se alegraba: “Vieja, ¿a qué no sabes no de dónde te estoy llamando’”

Tiempo después, Morales emigró a otro paraje, pero el recuerdo de aquella publicidad y de su paso por el paraje aún está vivos aquí.

Lo cierto es que aquella cabina no siempre funcionó bien. En muchas ocasiones, la línea quedaba fuera de servicio y los pobladores debían esperar días para que algún técnico de la empresa de comunicaciones llegara al paraje para solucionar el problema. A ello se le sumaban las distancias de los pobladores a la cabina.

“Si bien durante este último tiempo el teléfono funciono bien, cuando llamaban a algún vecinos teníamos que ir a avisarle a su casa para que venga a la cabina, que lo estaban esperando en la línea, o porque lo iban a volver a llamar. Ahora no, todos podemos hablar desde cualquier lugar del pueblo. Somos 40 familias y deben haber 39 celulares. No tengo dudas que ese número va a aumentar”, agregó el comisionado.

“Te imaginas lo que significa para este pueblo poder hablar desde tu casa a cualquier lado. Es un adelanto muy grande. Yo esto chocho. Antes tenía que ir a la cabina y llamar a un vecino de Jacobacci para que avise en mi casa que los iba a volver a llamar a los 10 minutos”, dijo José Epuyán, que ahora sí, puede llamar desde Clemente Onelli, pero desde cualquier punto del pueblo.

“Antes tenía que llamar desde la cabina a un vecino y esperar a que le avisen a mi familia que los iba a llamar en diez minutos”. José Epuyén, uno de los habitantes del paraje.

Los cambios en el pequeño paraje.

La instalación del sistema de telefonía móvil en Clemente Onelli amplía la posibilidad de estar comunicados a quienes transitan habitualmente por la Ruta Nacional 23. Hasta el pasado miércoles, la franja sin servicio se extendía entre Jacobacci y Comallo a lo largo casi 90 kilómetros. Ahora esa distancia que acortó a la mitad.

El comisionado resaltó el cambio del pequeño paraje ya que al servicio de telefonía celular se le suma Internet y la instalación de garrafones sociales.

Publicado en Diario "Río Negro" (Edición Nro. 24.490), domingo 2 de octubre de 2016, página 36.

LA YAPA ARGENTINA.

Una de las publicidades mas recordadas en la historia de la TV Argentina es la de TELÉFONICA que se hizo inmediatamente despues de la privatizacion de ENTEL. 

Cuenta la historia de Clemente Onelli, un pueblito perdido en La Patagonia Argentina situado en la linea sur rionegrina donde por primera vez, "gracias a Teléfonica" llega el teléfono. 

Adrian Korol viaja a Clemente Onelli 15 años después y recorre el pueblo con el protagonista de aquel aviso, descubriendo que aquel publicitado teléfono sigue siendo el unico del pueblo. 

Aunque algo ha cambiado.