GRACIAS POR ESTAR AQUÍ...

GRACIAS POR ESTAR AQUÍ...
...." el pueblo recoge todas las botellas que se tiran al agua con mensajes de naufragio. El pueblo es una gran memoria colectiva que recuerda todo lo que parece muerto en el olvido. Hay que buscar esas botellas y refrescar esa memoria". Leopoldo Marechal.

LA ARGENTINA DEL BICENTENARIO DE LA PATRIA.

LA ARGENTINA DEL BICENTENARIO DE LA PATRIA.
“Amar a la Argentina de hoy, si se habla de amor verdadero, no puede rendir más que sacrificios, porque es amar a una enferma". Padre Leonardo Castellani.

“
"La historia es la Patria. Nos han falsificado la historia porque quieren escamotearnos la Patria" - Hugo Wast (Gustavo Martínez Zuviría).

“Una única cosa es necesario tener presente: mantenerse en pie ante un mundo en ruinas”. Julius Evola, seudónimo de Giulio Cesare Andrea Evola. Italiano.

domingo, septiembre 01, 2019

El cacique Yanquetruz escribió sus cartas con sangre.

El cacique Yanquetruz escribió sus cartas con sangre.

Lo determinó un estudio realizado con avanzados métodos científicos. En la carta dirigida al comandante del fuerte de Carmen de Patagones se estaba negociando un pacto de paz.

Hace 163 años, los caciques armaban malones, peleaban y negociaban con los blancos. En 1855 el gobierno de Carmen de Patagones intercambiaba cartas con el cacique indígena José María Bulnes Llanquitruz o Yanquetruz para hacer un acuerdo de paz. La leyenda dice que este líder, usaba sangre humana para escribirlas y hoy un innovador método científico permitió corroborar que eso era cierto.
Yanquetruz fue un cacique que logró de muy joven tener un liderazgo muy fuerte, “controlaba todo lo que es la zona de la cuenca del río Negro y el río Limay en el norte de la Patagonia”, explica hoy la arqueóloga Victoria Pedrotta, investigadora del CONICET y la Universidad Maimónides. Ella, hace un año, se presentó ante el Archivo General de la Nación (AGN) y expresó que deseaba realizar una prueba de tintas sobre una carta que allí se preserva.
Muchos historiadores habían dado por sentado que la carta fue escrita con sangre pero nunca se había corroborado científicamente. La investigadora encontró la carta en el AGN y junto a trabajadores del organismo se comenzaron a trabajar para chequear si este dato era cierto.
Se dirigieron al laboratorio de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA y llegaron hasta el Centro de Estudios Químicos y por Espectrometría de Masa (CEQUIBIEM), que contaba con el equipamiento necesario para hacer lo que se proponían.
Allí, aparece en escena Ricardo Neme Tauil, bioquímico y profesor de historia en esa universidad que luego de acordar el procedimiento, en marzo de este año, tomó la muestra de la carta en el AGN.
“Lo que había que sacar era más pequeño que la punta de un alfiler porque los equipos que disponemos son sensibles. Había que evitar dañar el documento, y a la vez tomar algo del cuerpo del texto”, contó a “Río Negro”.
Tras varios intentos infructuosos, finalmente extrajo un pequeño trozo. Lo conservó en un tubo plástico libre de proteínas y lo llevó al laboratorio donde realizó varias pruebas.

“Debido a la escasez de la muestra y a los años que tiene el documento, se requirieron enriquecimientos sucesivos. El primer problema era disolver eso que había extraído, porque no dejaba de ser una pequeña bolita (de color) ocre y seca, que tal cual estaba, no podía ser tratada”, explicó.
Según Neme los primeros resultados fueron “sorprendentes por la claridad y contundencia: sugerían fuertemente que la muestra estaba concentrada y que era sangre, probablemente humana”.

Con ese estímulo decidió afinar la puntería. Analizó la muestra con un equipo mucho más sensible y apto que tiene mezclas de proteínas, y como resultado del procedimiento se pudo demostrar la presencia de una gran cantidad de proteínas plasmáticas humanas.
Varias semanas de trabajo habían dado su fruto pero “lamentablemente ahí está el límite de estas técnicas porque es virtualmente imposible saber si la sangre era efectivamente de Yanquetruz o de otra persona. “De hecho, a futuro la idea es hacer un análisis genético ya no en nuestro laboratorio, debido a que no tenemos ese tipo de equipamiento para ver ciertos marcadores de líneas indígenas”, concluyó.
La verdad fue revelada públicamente días atrás con la difusión del documental en TECtv, la señal televisiva del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la República Argentina.
La carta en cuestión está en el marco de las negociaciones y elementos que se ponían en juego en las relaciones diplomáticas entre los pueblos originarios y los blancos.
Hijo de un cacique, Yanquetruz a los seis años había sido tomado prisionero por los pehuenches que lo vendieron a la servidumbre de algún potentado que le dio instrucción, por lo que sabía leer y escribir .
Las relaciones entre Yanquetruz y el comandante Julián Murga (fundador de Guardia Mitre en 1862) tuvieron picos de tensión en los que la población entraba en pánico ante un posible ataque y otros de buenas relaciones durante las cuales había múltiples manifestaciones de amistad y se beneficiaba con la transferencia del producto de sus malones en la frontera bonaerense.
Murga, como su sucesor Benito Villar, conocían la importancia de tener de aliado a Yanquetruz, entre otras cosas, para contrarrestar el avance de Calfucura. De allí que insistieran en lograr la paz, ante lo cual se intercambiaron numerosas cartas.
Como dijo la responsable de Capacitación y Desarrollo Archivístico en el AGN “el avance de la ciencia y de la tecnología hoy permite avances que hace años hubiera sido imposible o impensado”.
El adelantado y un cacique alcohólico con vida convulsionada.
La profesora en historia Beatriz del Valle Moldes recordó el tratado firmado en 1857 entre Yanquetruz, con fama de cuchillero, y el comandante Benito Villar.
Sostuvo que en ese tratado se comprometió a proteger las tierras cedidas por sus antepasados al rey de España (que iban de Patagones a San Javier) según el artículo 2°, y ampliadas en otras 13 leguas con destino a establecer una población indígena.
Una condición que Villar puso para liberar a los 18 indios prisioneros fue que el cacique enviara al fuerte fue tener de rehén a su hermano Chingoleo que sería tratado con toda consideración, “ pues tu hermano nos servirá de garantía para que la paz entre unos y otros fuese duradera”, le dijo.
Yanquetruz protagonizó numerosos malones en la Provincia de Buenos Aires y tuvo en su haber la muerte del comandante Nicanor Otamendi durante el Combate de San Antonio de Iraola en 1855.
Luego de firmar el tratado en Buenos Aires, y como producto de su afición al alcohol murió apuñalado en una pelea en Bahía Blanca en octubre de 1858.
Julio Vezub doctor en Historia del Centro Científico Tecnológico- Conicet que funciona en Puerto Madryn “hace tiempo, en una conferencia presentó la nota escrita con sangre”, contó Moldes.
Vezub es autor del libro Llanquitruz y la máquina de guerra mapuche-tehuelche. Continuidades y rupturas en la geopolítica indígena patagónica.

*Autor: Enrique Camino.
Fuente de información e imágenes publicadas en Diario "Río Negro", domingo 1º de Septiembre de 2019.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

La diferencia de opiniones conduce a la investigación, y la investigación conduce a la verdad. - Thomas Jefferson 1743-1826.