GRACIAS POR ESTAR AQUÍ...

GRACIAS POR ESTAR AQUÍ...
...." el pueblo recoge todas las botellas que se tiran al agua con mensajes de naufragio. El pueblo es una gran memoria colectiva que recuerda todo lo que parece muerto en el olvido. Hay que buscar esas botellas y refrescar esa memoria". Leopoldo Marechal.

LA ARGENTINA DEL BICENTENARIO DE LA PATRIA.

LA ARGENTINA DEL BICENTENARIO DE LA PATRIA.
“Amar a la Argentina de hoy, si se habla de amor verdadero, no puede rendir más que sacrificios, porque es amar a una enferma". Padre Leonardo Castellani.

“
"La historia es la Patria. Nos han falsificado la historia porque quieren escamotearnos la Patria" - Hugo Wast (Gustavo Martínez Zuviría).

“Una única cosa es necesario tener presente: mantenerse en pie ante un mundo en ruinas”. Julius Evola, seudónimo de Giulio Cesare Andrea Evola. Italiano.

jueves, enero 30, 2025

Frenan el proyecto del tercer satélite argentino.-

 


(ADN).- El secretario general del sindicato de las Telecomunicaciones (FOETRA), Claudio Marin, denunció que el proyecto del Arsat-SG1, el tercer satélite nacional, está parado por decisión del Gobierno de Javier Milei, a pesar de que cuenta con financiamiento internacional para su desarrollo.

«El único sentido que tiene esto es lastimar a la compañía», subrayó Marin.

Si bien la empresa estatal recibe el dinero necesario para la finalización del proyecto, no se le paga a los proveedores y, de no modificarse esta situación en los próximos días, se perderá el avance en la construcción del tercer Arsat.

Además, el dirigente sindical reveló que la empresa tampoco mantiene la Red Federal de Fibra Óptica (REFEFO), que atraviesa más de mil localidades de todo el país, y comienza a tener problemas estructurales, entre otras razones, porque los trabajadores abandonan la compañía que hace más de un año mantiene la paritaria congelada.

«El único objetivo de no tener una paritaria razonable o de no invertir el dinero que ya tenés para continuar o terminar proyectos, que de lo contrario te van a significar una pérdida, es maldad», manifestó Marin en una entrevista en AM 750. Y continuó: «Quieren generar desánimo y borrar de la consciencia colectiva que podemos hacer cosas importantes desde nuestra industria».

Publicado en ADN Río Negro.

https://www.adnrionegro.com.ar/2025/01/frenan-el-proyecto-del-tercer-satelite-argentino/

miércoles, enero 29, 2025

Hoy cumpliría 110 años don Jaime Francisco De Nevares. Por Beatriz Chávez.

 


Hoy cumpliría 110 años don Jaime Francisco De Nevares. Lo voy a recordar con datos de su biografía escrito por su secretario y amigo el Padre San Sebastian.

29 de enero de 1915 nació don Jaime Francisco de Nevares. Primer Obispo de la Diócesis neuquina. Hoy cumpliría 110 años.
El nacimiento de Jaime hijo, ESCRIBIÓ SU AMIGO Y SECRETARIO EL PADRE San Sebastián.
José María de Nevares nació el 29 de enero de 1915 en la calle Maipú 1277. Su madre, doña Isabel Casares de Nevares y su padre, el abogado Don Jaime Francisco de Nevares eran conspicuos miembros de la aristocracia porteña.
El solar de la casa paterna donde vio la luz José María, estaba situado en lo que ahora es la plaza San Martín de Retiro, cercana al puerto.
El abuelo José María, de quién heredaba el nombre, era el abuelo que sería el compinche de José María, él lo llevaría al zoológico, al campo.
Cuando José María (Jaime) tenía cinco años, fallece su padre. A José María lejos de olvidársele la imagen del papá, se le agigantó.
A los siete años hace la Primer a Comunión en la Capilla del Sagrado Corazón de Hurlingham, que Doña Isabel ayudó a construir., el día 17 de marzo de 1922, día del segundo aniversario de la muerte de su padre. No es casualidad esta fecha.
Ya a los siete años José María le dice a su madre que quiere llamarse Jaime Francisco como su padre. Al principio esto fue tomado como cosa de niños, pero José María persiste con la idea. En 1925 y 1926 se produce el cambio de nombre, y como su padre tenía un prestigioso Estudio Jurídico en el centro de Buenos Aires (asociado con los doctores Holway, Baqué y Tissone, entre otros) allí se hicieron los trámites para cambiarle el nombre a José María. Y desde 1923 a casi ocho años de su nacimiento, comenzó a existir Jaime Francisco de Nevares, hijo.
RECORDAR SU GRAN OBRA EN EL OBISPADO NEUQUINO ES TAREA REDUNDANTE.
Autora: Beatriz Chávez, historiadora neuquina.

En 1960 Isidoro vino a hacer sus locuras a Bariloche (Río Negro, Patagonia Argentina).

 

Las Locuras de Isidoro es una publicación que nació en formato de revista en 1968. El número 26 del 6 de agosto de 1970 fue denominado “Romance en Bariloche”.

Perteneció a la editorial Dante Quinterno, los dibujos eran de Tulio Lovato y los guiones de Mariano Juliá y Faruk (Jorge Palacio). La revista llegó a tener una tirada de 300.000 ejemplares.

Isidoro Cañones no tendría mucho futuro en la sociedad actual, era un playboy chanta y vividor, que dilapidaba el dinero ajeno. Su personalidad de vago, débil, temeroso, afecto a la noche, al juego, a las mujeres y a la bebida, tenía como contrapartida, ser ocurrente y divertido, sabía ser simpático y hacerse querer. Así lo define un artículo de la revista De La Flor.

Isidoro no envejecía ni maduraba, cada una de sus historias estaba acompañada por su tío, el coronel Cañones, el mucamo Manuel y Cachorra, nieta del misterioso coronel Bazuka.

No hay duda de que se trata de una historieta y un personaje controvertidos, que han recibido en el tiempo numerosas lecturas con perspectivas diversas, políticas, semiológicas, feministas. En la sección “Estudios críticos” de AhiRa, pueden leerse las intervenciones de la revista Militancia, Oscar Steimberg, Juan Sasturain y Liliana Viola.

La revista publicó historietas originales hasta mediados de la década de 1970 y luego, como republicación de materiales antiguos y con el título Selección de las Mejores Locuras de Isidoro, apareció hasta bien entrados los años 2000, superando los quinientos números. (Material consultado de José María Gutiérrez, director del Archivo de Historieta y Humor Gráfico Argentinos de la Biblioteca Nacional).

En Bariloche.

En el Nº 26 el tío de Isidoro, llega en avioneta a visitar a un viejo amigo a un campo de la Patagonia. Le iba a pedir un favor muy especial, que se hiciera cargo de Isidoro. La intención era dejarlo confinado como castigo por haberle vendido piezas de su colección privada.

Ninguno de los intentos del capataz fue suficiente para que el joven pudiera enlazar un caballo o realizar las tareas de campo. Hasta que una mañana, llega un grupo de mochileros buscando albergue por una noche para luego, continuar viaje hacia Bariloche.

Escondiéndose en una de esas mochilas, finalmente logró escaparse y llegar a nuestra ciudad. Obviamente que intenta conquistar a una joven adinerada, hace sus “locuras” en el cerro Catedral.

Una anécdota más de la presencia y relevancia que ha tenido Bariloche como ciudad turística en el país y el mundo.

Diario EL CORDILLERANO de San Carlos de Bariloche.

11/2024.

https://www.elcordillerano.com.ar/noticias/2024/11/18/201892-en-1960-isidoro-vino-a-hacer-sus-locuras-a-bariloche

 

Locuras de Isidoro nº 26, agosto de 1970, “Romance en Bariloche”.


martes, enero 28, 2025

Entrevista realizada al Dr. Arturo Illia en la revista Humor.1982.

 


Arturo Illia: " El político ".

"Ser político no es contar con un título de Licenciado en Ciencias Políticas. El político real es el que concibe a la vida política como un que hacer permanente de toda la vida, un arte, una ciencia. No hay nada más difícil y más complicado.
¿Quién, si no el político, puede integrar un científico y hacerlo útil la sociedad?. Al artista, ¿quién le puede crear el ambiente para que pueda trabajar, elaborar sus ideas? El político...
El hombre político, cuando lo es y de verdad comprende, concibe, esta VOCACIÓN, sabe que tiene que tener controles para evitar excesos. En cambio, el que no lo es, el que no entiende de verdad la política, cree que puede imponer sus ideas de manera unilateral y se niega a aceptar los controles. Así, tarde o temprano, terminan por aparecer los hombres autoritarios, que son todo lo contrario del hombre político".
(Fragmento de la entrevista realizada al Dr. Arturo Illia en la revista Humor por Mona Moncalvillo).
Publicado en Revista Humor Número 85, 1982.

En 1982 había declarado, en un reportaje realizado por Mona Moncalvillo para la 
Revista Humor
"Lo que hace falta es aplicar la Constitución, nada más. No hay que pensar en magias ni en milagros. El único milagro posible en nuestro país, después de tanto tiempo, es que se cumpla la ley".

lunes, enero 27, 2025

Murió el empresario Enrique Eskenazi, fundador y presidente del Grupo Petersen.

 


Murió el empresario Enrique Eskenazi, fundador y presidente del Grupo Petersen.

El empresario tenía 99 años. Sus hijos cinco hijos, 14 nietos y 9 bisnietos lo despidieron en una ceremonia íntima.

El fundador del Grupo Petersen Enrique Eskenazi falleció a los 99 años, confirmó la empresa en un comunicado. "Sus hijos Esteban, Ezequiel, Sebastián, Matías y Valeria, sus 14 nietos y sus 9 bisnietos lo despidieron en una ceremonia íntima", informaron desde el grupo.
Enrique Eskenazi nació el 4 de agosto de 1925 en la ciudad de Santa Fe, se graduó como ingeniero químico en la Universidad Nacional del Litoral y se especializó en ingeniería de alimentos en el Research Department of Continental Can Corp. y en el Illinois Institute of Technology, ambos en Estados Unidos.

Inició su actividad en el grupo Bunge y Born. En la década de 1980 ingresó como gerente general en la constructora Petersen, Thiele & Cruz SA. A partir de la década de 1990 lideró el proceso de transformación y expansión de los negocios de la compañía, incursionando en otros sectores estratégicos de la economía argentina, como el de los servicios urbanos, la agroindustria, la energía y el financiero, lo que derivó en la conformación del actual Grupo Petersen.

Comunicado de la empresa sobre la muerte de Enrique Eskenazi.

Con mucho pesar informamos que falleció en su hogar a los 99 años el ingeniero Enrique Eskenazi. Sus hijos Esteban, Ezequiel, Sebastián, Matías y Valeria, sus 14 nietos y sus 9 bisnietos lo despidieron en una ceremonia íntima, cumpliendo con un pedido expreso de quien fuera su padre, abuelo y bisabuelo. Sus restos descansarán ahora junto a los de su amada esposa y madre de sus hijos, Hazel Sylvia Toni Storey de Eskenazi.

El ingeniero Eskenazi atravesó con su larga y prolífica vida dos siglos. Su trayectoria no pasó inadvertida en el país ni en el exterior. En efecto, fue reconocido en diversos ámbitos como un empresario inspirador, de espíritu innovador y excepcional capacidad de liderazgo. Comprendió desde muy joven el compromiso del empresariado con el progreso del país y con el bienestar de su sociedad, principios que transmitió a las nuevas generaciones de su familia. También tuvo un vínculo inquebrantable hasta su último aliento con los valores familiares y humanistas.

Su partida deja un vacío humano y familiar difícil de explicar, aunque sabemos que su legado y sus valores éticos seguirán viviendo en los corazones de quienes lo conocieron durante su incansable trabajo de más de siete décadas, que dejó reflejado en su autobiografía “Soñar la vida y construir los sueños”, el lema que marcó su visión humanista y filantrópica de la vida.

Desde el Grupo Petersen y las Fundaciones Grupo Petersen, que creó y presidió, impulsó innumerables acciones y programas para contribuir al desarrollo sustentable de la comunidad y a la promoción de la excelencia en la educación y la cultura, uno de sus principales desvelos en articulación con organismos públicos y privados de la Argentina y el exterior.

El ingeniero Eskenazi había nacido el 4 de agosto de 1925 en la ciudad de Santa Fe. Su vocación por el conocimiento le permitió una sólida formación intelectual y académica. Se graduó como ingeniero químico en la Universidad Nacional del Litoral y se especializó en ingeniería de alimentos en el Research Department of Continental Can Corp. y en el Illinois Institute of Technology, ambos en Estados Unidos.

El ingeniero Eskenazi inició su actividad en el grupo Bunge y Born. En la década de 1980 ingresó como gerente general en la constructora Petersen, Thiele & Cruz SA. A partir de la década de 1990 lideró el proceso de transformación y expansión de los negocios de la compañía, incursionando en otros sectores estratégicos de la economía argentina, como el de los servicios urbanos, la agroindustria, la energía y el financiero, lo que derivó en la conformación del actual Grupo Petersen.

Ejerció la presidencia, entre otras empresas, de Petersen, Thiele & Cruz; de los bancos San Juan, Santa Cruz, Santa Fe y Entre Ríos. Además, fue vicepresidente de YPF S.A y de su Fundación.

Desempeñó a lo largo de su rica trayectoria empresarial diversos cargos ejecutivos en instituciones de carácter público y privado en la Argentina. Fue miembro fundador de la Coordinadora de la Industria Alimenticia Argentina (COPAL) y del Centro de Investigaciones de Conservación de Frutas y Hortalizas del Sistema INTI (CITEF) entidades en las cuales ejerció durante varios años la Presidencia. A su vez, fue Consejero y miembro del Comité Ejecutivo de importantes entidades públicas, como la CEPAL, la Unión Argentina de la Construcción, la Asociación de Bancos Públicos y Privados de la República Argentina (ABAPPRA) y la Asociación de Bancos Privados de Capital Argentino (ADEBA).

El Ingeniero Eskenazi dictó conferencias sobre su experiencia y sus conocimientos, especialmente invitado, en ciudades de Europa (Bruselas, Londres, Madrid, entre otras) y Estados Unidos (San Francisco y Chicago); en países de América Latina (convocado por la Organización de Estados Americanos); en la Unión Industrial Argentina (UIA); en el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y en otras importantes instituciones y entidades de la Argentina.

Fue impulsor, además, de la Fundación Ecuménica Conocer, participó activamente de grupos de diálogos interreligiosos y dirigió la Asociación Civil Cultural Centro Histórico Teatro Colón, promoviendo el desarrollo de la Plaza del Vaticano de la ciudad de Buenos Aires.

Su ausencia no será nunca definitiva porque las lecciones de su vida se proyectarán a lo largo de las generaciones que lo sucederán y lo recordarán.

Noticia publicada en Ámbito Financiero.

https://www.ambito.com/negocios/murio-el-empresario-enrique-eskenazi-fundador-y-presidente-del-grupo-petersen-n6107131

domingo, enero 26, 2025

El hombre que soñó el Alto Valle.

 El hombre que soñó el Alto Valle.

POR GIANLUCA V. DI BATTISTA * 

Hablar del Alto Valle es hablar de transformación. De cómo el ingenio humano logró convertir el recién conquistado desierto, que producía algo menos que sombra, en un centro agroexportador de relevancia internacional. Y en el corazón de esa historia, brilla, entre todos los nombres, el del padre Alejandro Stefenelli, un misionero con aires de ingeniero que soñó con un valle productivo y puso su vida al servicio de su ejecución. Este sacerdote salesiano, al que el rey Vittorio Emanuele III condecoró con el título de Colonizador y Civilizador italiano en la Argentina, movido por el ejemplo misionero de Don Bosco emprendió su misión a la Patagonia a los 24 años, allá por 1878 el Valle era una región árida y desolada pero él llegó con una convicción inquebrantable: “La promoción del hombre, de cada hombre, del hombre en su totalidad.”

Realizador incansable, activo, múltiple y práctico, que levantó edificios, compró maquinarias, las transportó tiradas por bueyes durante más de 600 km., abrió canales de riego mecanizados, experimentó la adaptación de cultivos, realizó investigaciones geográficas y meteorológicas, fundó escuelas de oficios. “Mi ensueño es ver estas tierras convertidas en productivos centros agrícolas”, decía, y soñaba con “laboriosos agricultores disfrutando de las aguas corrientes que enriquecen a sus hogares y al país”. Para ello, ideó la nueva bocatoma del primitivo canal Furke, acudió hasta las altas autoridades de la Nación, presidió la Comisión de Riego y colaboró con el ingeniero César Cipolletti en la construcción de un nuevo canal de riego que pondría en producción 60.000 hectáreas.

El trabajo del Patriarca del Alto Valle no se limitó a la infraestructura; también implementó una visión estratégica de desarrollo comunitario. Sabía que transformar un desierto en un vergel requería no solo agua, sino también un cambio en las prácticas agrícolas y en la mentalidad de los habitantes. Por ello, fundó una escuela agrícola que educase a las nuevas generaciones, especialmente a las más pobres, en las técnicas avanzadas de cultivo, y que también promovía el sentido de civilidad, comunidad y responsabilidad colectiva: “Asilar, alimentar, vestir, instruir, moralizar, dar un oficio, enseñarles a trabajar… para la Sociedad y para la Patria.”

Despertó el amor por la tierra, enseñó a cultivar y preparó personal idóneo para el trabajo de campo y su administración. En cada uno de sus proyectos se reflejaba su fe en que, con trabajo duro, “el espinoso piquillín y alpataco” podían transformarse en “árboles frutales, viñedos y olivares” y así fue.

El legado de Stefanelli era, y sigue siendo, una hoja de ruta para el progreso. Su sueño y planificación sentaron las bases para que el Alto Valle se convirtiera en una de las regiones productivas más importantes del país con relevancia internacional. Qué lejos quedaron aquellos días de nobles sueños y grandes empresas.

INVOLUCION.

Hoy, el Alto Valle enfrenta un abandono que amenaza con deshacer todo lo que Stefenelli y otros pioneros construyeron. En la última década, el sistema productivo ha expulsado al 34% de sus chacareros, con 778 familias obligadas a abandonar su estilo de vida. De estos, el 85% eran pequeños productores de menos de 30 hectáreas, aquellos que, como soñó Stefanelli, deberían haber sido el corazón de un valle productivo y próspero. La falta de acción y la ineficacia de las políticas públicas han llevado a la región al borde del colapso. Las últimas administraciones tienen una responsabilidad objetiva e ineludible en este abandono. La falta de planificación, la sobrerregulación, el anquilosamiento en los cargos de las instituciones, la imposibilidad de acceso a la tierra y la brutal concentración de mercado, nos condujo a esta situación que hoy favorece a unos pocos, mientras el valle y sus familias sufren las consecuencias.

Stefenelli, en sus años finales, dejó una reflexión que resuena profundamente en este contexto: “Yo ya estoy cansado de estas promesas incumplidas… en cuanto a lo demás estoy resuelto a decir con más fe: el pan de cada día… y de vencer con la oración y el trabajo todas las dificultades”.

Esa fe, combinada con el trabajo incansable, es el faro que aún puede guiar al Alto Valle hacia un futuro digno de su historia. Pero para que eso ocurra, es necesario retomar la planificación, el compromiso y la acción que hicieron de este desierto un vergel, sin esperar a que el Estado venga a socorrernos. Al igual que el Alto Valle se construyó a espaldas de la política, debemos hoy retomar las riendas del progreso, con una visión libre y autosuficiente. La memoria de Stefenelli no debe quedar como un recuerdo lejano, sino como un llamado urgente a recuperar lo que nunca debimos dejar caer.

* Instagram: gian.dibattista / giandibattista@gmail.com

Publicado en LA PRENSA.

https://www.laprensa.com.ar/El-hombre-que-sono-el-Alto-Valle-555348.note.aspx

Dos siglos del asesinato de Monteagudo. Por Roberto L. ELISSALDE.

 


Dos siglos del asesinato de Monteagudo. 

Por Roberto L. ELISSALDE.

En la noche del 25 de enero de 1825 caía apuñalado en un callejón de Lima el controvertido tucumano Bernardo Monteagudo. Sobre su muerte rodeada de misterio se afirma que ocurrió momentos después de despedirse de una dama con la que había estado conversando en la calle. Ramón Moreira y Candelario Espinosa fueron los autores materiales del homicidio.

El general San Martín, con quien había colaborado el 25 de abril de 1833 en carta fechada en París a Mariano Álvarez, residente en Lima, deseoso de alcanzar la verdad del luctuoso episodio le escribió para hacerle “una pregunta la cual hace años deseo tener una solución verídica y nadie como Ud. puede dármela con datos más positivos, tanto por su carácter, como por la posición de su empleo. Se trata del asesinato de Monteagudo: no ha habido una sola persona que venga del Perú, de Chile o Buenos Aires, a quien no haya interrogado sobre el asunto, pero cada uno me ha dado una diferente versión: los unos lo atribuyen a Sánchez Carrión, los otros a unos españoles, otro a un coronel celoso de su mujer. Algunos dicen que este hecho se halla cubierto de un velo impenetrable, en fin, hasta el mismo Bolívar no se ha libertado de esa inicua imputación, tanto más grosera cuanto que prescindiendo de su carácter particular incapaz de tal bajeza, estaba en su arbitrio si la presencia de un Monteagudo le hubiese sido embarazosa, separándolo de su lado, sin recurrir a un crimen, que en mi opinión jamás se comenten sin un objeto particular”.

Rafael Alberto Arrieta, en estas páginas, el primer día del año 1931 afirmaba que “la leyenda, nutrida por la calumnia de sus enemigos, lo presenta como un ser lúbrico, fastuoso y cínico. Sólo se sabe que amaba las joyas y los perfumes; que se alimentaba de manjares y de vinos exquisitos, aunque con sobriedad; que vestía con lujo y cultivaba una coquetería femenina sin perder su porte viril. Era un tipo hermoso, ligeramente amulatado, de facciones regulares y suaves; pero los ojos negros y centelleantes, endurecían el rostro con su mirada -la calificación pertenece a una dama- de salteador. Durante su apogeo limeño vivió en mansión opulenta, entre tapices. Cierto comentarista cree ver entonces el advenedizo afortunado y lo juzga despreciativamente. Diríase que sonríe, con la misma intención, pero desde el extremo antípoda, al modo del supuesto testigo porteño de otras horas. Y en Buenos Aires, como en Lima, la distinción, y el boato, la dignidad señoril y los hábitos aristocráticos, fueron siempre atributos naturales de Monteagudo, a despecho del misterio de su cuna, generador de tantos reproches crueles…”.

Sus métodos no merecieron en ningún momento el apoyo de muchos de sus contemporáneos. Don Cornelio de Saavedra tan mesurado en sus juicios, supo escribir que Monteagudo tenía “el alma más negra que la madre que lo engendró”.


REPATRIADO.

Sus restos fueron repatriados en 1918 por la fragata Presidente Sarmiento que arribó al puerto de Buenos Aires el 14 de febrero, siendo recibidos por una comisión de homenaje en nombre de la que el historiador Carlos I. Salas según las crónicas de la época pronunció un “elocuente discurso”. El presidente Hipólito Yrigoyen y el ministro de Relaciones Exteriores Honorio Pueyrredon acudieron a la Recoleta, oportunidad en la que el último dijo las palabras de homenaje.

Podía verse en una foto de Caras y Caretas el cuerpo de Monteagudo a través de un vidrio, hoy descansa desde el 2016 en Tucumán su tierra natal.
Fue Mariano Pelliza quien escribió en 1880 el primer ensayo biográfico titulado Monteagudo, su vida y sus escritos, editado por la Librería de Mayo propiedad de Carlos Casavalle, en la calle Perú 115. En 1916 estos escritos recopilados y ordenados por Mariano Pelliza, con prólogo de Álvaro Melián Lafinur, fueron publicados por La Cultura Argentina.

Hace unos meses Villa Ediciones, que el Dr. Horacio Garcete dirige, y tiene como fin la reedición de algunas obras clásicas fuera de comercio, dio a conocer nuevamente el Monteagudo de Pelliza, que como lo señala en su presentación, para estar acorde con el controvertido biografiado (agregamos nosotros) dio lugar “ a una extendida polémica alrededor de la construcción del retrato del prócer concebido por un caricaturista de la época a pedido del autor. Anécdota que constituye una historia en si misma, reveladora además de la siempre enigmática, clandestina y, por tantas razones apasionante vida de Bernardo Monteagudo”.

Publicado en LA PRENSA.

https://www.laprensa.com.ar/Dos-siglos-del-asesinato-de-Monteagudo-555347.note.aspx

viernes, enero 24, 2025

Gardel y Le Pera: una dupla inolvidable. Por Walter Santoro.

 

Gardel y Le Pera: una dupla inolvidable.

Cuarta crónica basada en la correspondencia personal del genial Morocho y de los testigos que vivieron su gesta hace 90 años. Mediante un sencillo sistema de notación musical, el cantor recordaba las melodías creadas en momentos de inspiración.

Por Walter Santoro*

Para la segunda película que Carlos Gardel se aprestaba a filmar en París en 1932 para la Paramount se necesitaba imperiosamente un guionista. Se sugirió el nombre de Alfredo Le Pera, y luego de una reunión con Gardel se sumó rápidamente al equipo de trabajo.

Si bien en la etapa francesa hubo otros colaboradores como Mario Battistella y Horacio Pettorossi, en esta nueva etapa en Nueva York, el dueto Gardel-Le Pera se encargó de crear todas las canciones de las películas. Juntos potenciaron sus capacidades creativas y crearon una veintena de canciones que siguen vigentes y son actualmente interpretadas por solistas y orquestas de todo el mundo.

Si bien al comienzo de su carrera Gardel creó música para numerosas letras, en esta nueva etapa se reveló como un compositor sobresaliente, superándose a sí mismo. Gardel no sabía escribir música, tarea que recaía en su colaborador musical Terig Tucci, que traducía al pentagrama las melodías creadas por el cantor.

Pero si Gardel carecía de educación musical, lo compensaba con creces su talento innato, su admirable percepción melódica. Todos sus colaboradores admiraban su maravillosa y sorprendente intuición.

“Bueno -afirmaba Gardel- yo no entiendo mucho de notas ni de técnica, pero tarareando aquí y sugiriendo allá, compongo con la ayuda de alguien que toque el piano”“En mi caso, cuando tengo que componer un tango o un vals, la primera cosa que hago es compenetrarme bien de la situación, de los motivos que dan impulso a la acción, y de ellos procuro sacar el grado de sentimiento o de alegría que debe inspirar la canción. Sin pensar en las palabras, comienzo a tararear a media voz hasta que doy con la melodía apropiada para la ocasión. Llamo entonces a mi simpático compañero y amigo Alfredo Le Pera y con su ayuda y la del pianista, inmediatamente compongo la melodía definitiva, como también la letra. A veces, eso nos demanda una o dos horas, y en algunas ocasiones la falta de inspiración nos obliga a suspender el trabajo para reiniciarlo al día siguiente. No hay duda que llevo una ventaja sobre los demás compositores, pues compongo las canciones para mí, mientras que ellos las hacen para Bing Crosby, José Mojica y otros, y es evidente que la tarea de ellos es más difícil que la mía”.

Todas las letras de las canciones de las películas fueron escritas por Le Pera y musicalizadas por Gardel. Como el cantor no sabía escribir música, ocurría muy a menudo que las melodías creadas se perdían irremediablemente al no poder ser recordadas por él. Cuando Terig Tucci, que era el encargado de transcribir al papel las melodías de Gardel, se encontraba presente no había problema, pero más de una vez, sintiéndose inspirado, a Gardel se le ocurría alguna melodía y, ante la ausencia del músico, se perdía irremediablemente. Muchas veces éste llegaba para encontrarse con un Gardel compungido que le decía casi colérico: “Anoche, después de acostarme, se me ocurrió una idea para una linda melodía de tango. La canté y volví a cantarla veinte veces para que se grabara en mi mente... y hasta lo desperté a Le Pera para cantársela y para que me ayudara a recordarla cuando vos llegaras...”Pero ninguno de los dos la recordaba, se había perdido para siempre. Para subsanar este inconveniente Terig Tucci creó un sistema de simple anotación que ayudaría a Gardel a retener los frutos de su inspiración.

 EL METODO.

El cantor tenía la costumbre de buscar en las teclas del piano -favorecía las teclas blancas- las notas de su canción, un fragmento, generalmente tres o cuatro compases. Al encontrarlas colocaba en ellas pedazos de papel, dispuestos por orden alfabético. Por ejemplo: comenzaba con la primera nota de la melodía y le ponía la letra A, a la segunda la letra B, a la tercera la C y así sucesivamente. Para determinar la duración de las notas maquinó un sistema con números: una semicorchea llevaba debajo de la letra el número 1, una corchea el número 2, una negra el 3 y una blanca el 4.

Gardel comprendió perfectamente el sistema. De allí en adelante todas las mañanas, al llegar a la casa del cantor, Tucci encontraba el piano “empapelado” con alguna melodía que se le había ocurrido la noche anterior y que, dicho sea de paso, ya se le había olvidado, pero que se podía evocar ahora por medio del sistema. Gardel estaba encantado de la sencillez de este método de anotación musical. Sobre el final del film “El día que me quieras” Gardel canta el tango “Volver”, que fue precisamente compuesto a través de este curioso sistema de anotación musical.

 Walter SantoroPresidente de la Fundación Internacional Carlos Gardel.

Publicado en LA PRENSA.

https://www.laprensa.com.ar/Gardel-y-Le-Pera-una-dupla-inolvidable-555287.note.aspx

jueves, enero 23, 2025

El Perón que no escuchamos: su visión sobre el deporte. Por Aldo Duzdevich para la Agencia Paco Urondo.


El Perón que no escuchamos: su visión sobre el deporte.

Por Aldo Duzdevich para la Agencia Paco Urondo.

En mi nota anterior expresé con el título “El Perón que no escuchamos”, en primera persona del plural, estoy haciendo una referencia literal a nuestra generación de los setenta. “La juventud maravillosa”, “La gloriosa JP”. La gran mayoría de los setentistas que conozco (me incluyo) nos estamos enterando hoy, de cuáles eran las principales preocupaciones del último Perón, y por donde surcaba su espíritu e intelecto en sus últimos meses de vida.

Para darnos una idea de la importancia que le daba al deporte, del 15 de enero al 27 de mayo de 1974, dedica siete reuniones con deportistas de distintas disciplinas.

Perón tenía la virtud de hablar de temas profundos en un lenguaje sencillo entendible por el pueblo llano. Usaba mucho la frase “un ejemplo suele aclararlo todo”. Por eso solía hablar con metáforas y/o contar anécdotas, que no siempre eran textuales, pero cumplían eficazmente con lo que quería comunicar y que resultan más fáciles de recordar. En uno de estos discursos hay una que seguramente nos quedara grabada.

Dice Perón: “Recuerdo que, en el año 1953, se presentó un día Pettinato  que era el jefe del Servicio Penitenciario, y me dijo: “mi General, hay que hacer algo, porque nos estamos quedando sin presos”… Creo que tenemos que volver a hacer algo para quedarnos sin presos, y eso se puede hacer tanto en la escuela primaria, secundaria y universitaria, pero se puede lograr de la mejor manera en los campos de deportes. Los deportistas no son jamás hombres con inclinaciones hacia ningún tipo de delincuencia. El cultivo del espíritu es paralelo al cultivo del cuerpo; por ello pienso, y lo hemos de hacer así, que hay que dar la más extraordinaria importancia posible al deporte popular, para que todos puedan practicarlo.”

En los siete discursos va a reiterar dos ideas, el amor que sentía por el deporte y pensar el deporte como escuela de vida física y espiritual.

“Los años más felices de mi vida los viví cuando hacía deportes. (…) No exagero si digo que, en este momento, me siento como en mis mejores tiempos, porque siempre he vivido un poco entreverado entre los deportistas argentinos.”

“Un país no vale ni por la extensión de su territorio ni por la cantidad de vacas que tiene; vale por la calidad de los hombres que lo pueblan y lo sirven. El deporte está dirigido a eso, a formar, por sobre todas las cosas, una buena persona y, después, para darle todas las armas que sea posible. Pero es necesario partir primero de un material humano puro, es decir, de un alma pura.”

Como los siete discursos son demasiado texto para una nota de domingo, voy a extraer solo algunos conceptos fundamentales.

Estas entrevistas forman parte del libro “Perón 1974”, editado por la Biblioteca del Congreso Nacional cuyo texto puede bajarse gratuitamente https://bcn.gob.ar/publicaciones/juan-domingo-peron

15 de enero 1974: ante un grupo de deportistas.

Palabras pronunciadas ante una numerosa delegación de deportistas de distintas disciplinas que lo visitaron en la Residencia Presidencial de Olivos. Se entregaron medallas a basquetbolistas juveniles (recientes campeones sudamericanos) y se reconoció al piloto Carlos Reutemann (a quien el Ministerio de Bienestar Social comenzó a apoyar económicamente en su carrera deportiva). Perón entregó también medallas de reconocimiento por su labor deportiva a varios basquetbolistas argentinos (Pagella, De la Cruz, Pace, Santini, Allende, Apostólico y Martín); al jinete Hugo Arrambide; al nadador Horacio Iglesias; y al tenista Guillermo Vilas. También entregó subsidios a distintas federaciones del interior del país para estímulo del deporte.

Señores:

“Es para mí un inmenso placer poder compartir siquiera sea un momento con los deportistas, en cuyo contacto siempre he vivido y a quienes también he ayudado en lo que podía, desde el punto de vista deportivo.” (...)

“Yo creo que una de las actividades permanentes en la vida de los pueblos modernos es el deporte. Todas las deformaciones a que asistimos en la humanidad son, precisamente, más profundas donde se ha pasado por alto o se ha olvidado al deporte.”

El deporte es una escuela de formación de hombres, no solo física, sino también moralmente. El espíritu de los hombres se cultiva también en los campos de deportes. Ese espíritu que nosotros apreciamos es indispensable en la vida de los hombres. Yo he asistido durante mi larga vida al desenvolvimiento de nuestro país en las etapas florecientes del deporte, y les puedo decir que, cuando se practicó más deporte, la gente era mejor.”

“Por eso, convencidos de esa necesidad, es que estamos dispuestos a dar al deporte el auge más extraordinario que podamos. No habrá recursos que no se pongan a disposición de las necesidades para cultivar a nuestra gente en el deporte, en su alma y en su cuerpo. Si lo logramos, como espero, estoy seguro de que habremos mejorado al pueblo argentino en sus valores morales y espirituales.” (...)

“En este sentido, hemos ya establecido en nuestro Plan Trienal y en los planes del Ministerio de Bienestar Social todo lo que sea indispensable para el desarrollo del deporte, en su práctica desde la niñez hasta la vejez del hombre, porque los viejos también pueden hacer deporte. (...)”

Ante un grupo de deportistas (6 de febrero de 1974)

Durante un acto en el que se otorgaron subsidios a diversas instituciones y se entregaron medallas al mérito deportivo a los jugadores de fútbol de Rosario Central (campeón del Torneo Nacional de 1973) y Huracán (campeón del Torneo Metropolitano de 1973); a los ciclistas Ernesto Contreras y José Serrano, ganadores del Cruce de los Andes; a Horacio Ponce, golfista, campeón municipal Caddies; y al primer alférez Alberto Serrano, por haber ascendido recientemente a la cima del Aconcagua.

Señores:

“Muchas veces he dicho que, a mi regreso, después de dieciocho años, encuentro que de todas las destrucciones que se han producido, quizá la más trascendente y la más peligrosa es la destrucción del hombre argentino, que también se destruye. Todo lo demás puede reconstruirse con facilidad; el hombre no es tan fácil de reconstruir. (...)”“El abandono de los lugares de deportes es el abandono del hombre, de nuestra juventud. Indudablemente, una juventud abandonada puede tomar cualquier camino, y eso lo estamos viendo todos los días en la Capital, en el resto del Gran Buenos Aires y en el Interior.” (...)

“El cultivo del espíritu es paralelo al cultivo del cuerpo; por ello pienso, y lo hemos de hacer así, que hay que dar la más extraordinaria importancia posible al deporte popular, para que todos puedan practicarlo.”

“De la misma manera, hay que organizar y ordenar el deporte efectivo como el deporte espectáculo.”

“He oído a algunos criticar duramente al fútbol, diciendo que juegan unos pocos y miran muchos. Eso también forma y da a la gente aliciente para imitar, ver y practicar el deporte por su cuenta. Si se lo emplea y organiza bien, el deporte espectáculo es tan importante como el otro. La gente entra con entusiasmo cuando hay posibilidades, y todos los que hemos practicado deportes sabemos que en esto también el apetito viene comiendo. Muchas veces mirando también viene el apetito. (...)”

Ante los equipos campeones de los torneos “Evita” y “Argentina Potencia” 7 de marzo 1974

Al recibir a un grupo de jóvenes deportistas triunfadores en los torneos infantiles “Evita” y juveniles “Argentina Potencia,” en fútbol, básquet y ajedrez, cuya etapa final tuvo lugar en la Unidad Turística de Embalse, Río Tercero (Córdoba), en diciembre de 1973.

Señores:

“Quiero adherirme a las palabras del señor ministro con una profunda sinceridad de viejo deportista y también con la asunción de la responsabilidad que nos cabe en la formación de lo más valioso que el país tiene: sus hombres y sus mujeres. (…)”

El deporte es, indudablemente, la mejor escuela para la formación del alma. Son los valores espirituales los que se cultivan con el deporte. Eso es lo que nosotros pretendemos al dedicarle una gran parte de nuestra actividad, especialmente al deporte infantil y juvenil.”

“Ni los griegos ni los romanos habrían llegado a ser lo que fueron en la historia del mundo si no hubieran cultivado profundamente los deportes en todos sus aspectos y actividades. Imitemos esos ejemplos que hicieron grandes y poderosos a los pueblos. (...)”

“Nuestros muchachos y nuestras niñas deben volver a ser los únicos privilegiados. En ellos está nuestra esperanza, y para cultivarla debemos pensar que ellos son los únicos que, entre toda la población, deben gozar de un privilegio especial. (...)”