Por Omar Héctor Zenoff *
La necesidad de planificación del Estado había llevado a Perón, en 1944, cuando era secretario de Trabajo y Previsión, ministro de Guerra y vicepresidente, a crear una Comisión Permanente que presidió el Consejo Nacional de Postguerra para la cual había convocado a los hombres que él creía los más capaces para este cometido, y que después de electo presidente les confiaría ministerios, secretarías y entes encargados de esta planificación.
Con la estructura prevista y los proyectos elaborados con anticipación, a comienzos del segundo semestre de 1946 la Secretaría Técnica de la Presidencia tenía terminado el primer plan quinquenal, presentado el 19 de octubre de ese año como proyecto de ley. Su artículo primero aprobaba las realizaciones e inversiones sobre veintisiete materias, en tres títulos y diecisiete capítulos: 1º) Gobernación del Estado: política; salud pública; educación; cultura; justicia y política exterior. 2º) Defensa Nacional: ejército, marina y aeronáutica. 3º) Economía: población; obra social; energía; trabajos públicos y transporte; producción; comercio exterior y finanzas.
El Plan Quinquenal dependió del IAPI (Instituto Argentino de Promoción del Intercambio) creado también en 1946 para centralizar el comercio y con sus beneficios transferir recursos a otros sectores de la economía nacional y financiamiento de las obras públicas. Los otros planes de nuestro país fueron el de 1816 durante el Directorio de Pueyrredón. Le siguieron los de Wilde en 1821 y Mendelhart en 1836; el de la organización nacional de la Constitución 1953-60, ampliado en 1869-70; luego el de 1876 gobierno de Avellaneda.
Hasta 1930 fueron simples, parciales, dispersos, a veces improvisados y también disimulados. Enrique Domenech en su obra “Algunos comentarios sobre la planificación económico social en Argentina” considera seis etapas: 1ª) 1930-1939. 2ª) 1939-1946. 3ª) 1946-1955. 4ª) 1955-1963. 5ª) 1963-1966 y 6ª) 1966 en adelante. Sin dudas, el Primer Plan Quinquenal fue el mayor, el mejor estructurado, concebido con visión de futuro y basado en principios políticos que significaron importante etapa de nuestra historia y nuestro país.
Arquitectura escolar y modelo letras.
En el capítulo Educación, el gobierno nacional se propuso construir mil nuevos edificios escolares en todo el país según necesidades de cada provincia, aplicando para ganar tiempo una arquitectura con planos tipo, cuyas plantas proyectadas respondían al modelo letras. Casi lo logró, porque concretaron e inauguraron 956. A partir de 1947, de acuerdo con la información del Cuarto Censo Nacional de ese año, se iniciaron las solicitudes de predios donde se edificarían las escuelas. Requerían como ideal tres hectáreas, como óptima dos y como mínimo en las zonas urbanas una hectárea.
En la mayor superficie se contemplaba la instalación de juegos infantiles convencionales: hamacas, toboganes, subibajas, barras fijas, columpios colectivos y escalerillas, además de prever terreno para la práctica de técnicas agropecuarias. Responder a esta requisitoria era la llave principal para que se aprobara la construcción de la escuela. Valga el ejemplo de Las Breñas: para la 374, la Comisión de Fomento, por no contar con espacios amplios próximos a la zona céntrica, compró al panadero Santiago Gómez sobre la última calle del pueblo en ese tiempo su quinta nº 5 de cuatro hectáreas sobre Ameghino y Brown e inmediatamente el 1949 la obra se licitó.
Mientras que el director de la escuela 77 tozudamente insistió con la mitad de la manzana 15 frente a la plaza Sarmiento con una superficie de media hectárea, y por demorarse en reemplazar ese terreno en el plazo requerido no se concretó, destinándose ese edificio con otro modelo a la escuela rural 130 de Pampa Iporá Guazú. Por ese motivo Las Breñas perdió el edificio de la 77. En el caso de Charata, destinó dos manzanas en planta urbana donde se construyeron las escuelas 32 y 142, las más grandes, del modelo H. Los planos estaban identificados con la letra H, las más grandes; la U la intermedia, como la 374 de Las Breñas; y la L con las variantes 1, 2, 3 y 4, la 130 de Iporá Guazú. Los diseños austeros pero logrados por su funcionalidad eran edificios multiuso según necesidades, se podían convertir en alojamiento para un batallón militar o para funcionar como un hospital de emergencia.
Para su construcción se utilizaron materiales de primera calidad, mampostería clásica, piso de mosaico granítico, techos, según la región, de tejas o chapa de zinc, sustentados por cabreadas de pino Tea de Canadá o pino Oregón de EEUU, y carpintería de madera con herrajes de bronce. Constaba de aulas, oficinas, amplia galería principal que servía de salón de actos, biblioteca, espaciosa cocina, depósito, sanitarios con duchas, cisternas de hasta 400.000 litros, torre elevadora de agua, casa para el director y en algunas rurales también para los maestros.
El Gobierno adjudicaba las obras a constructoras o concesionarias que se hacían responsables de entregar la obra terminada. Las escuelas de Las Breñas fueron concesionadas a Jacobo Raskin, desmotador de algodón que había sido a mediados de 1940 presidente de la Comisión de Fomento de Las Breñas y en 1947 se radicó en Buenos Aires, donde se relacionó con el ente de la obra pública nacional. Él a su vez tercerizó la obra de albañilería de la escuela 374 con la empresa de Avenire Melli de Las Breñas, con dirección técnica del ingeniero Juan Lansky. La 130 de Iporá Guazú la construyó Domingo Vieto de Sáenz Peña, y las de Resistencia, Ciro Todaro.
Casi mil escuelas en todo el país.
En todo el país se construyeron 956 escuelas con un promedio de inversión de un millón de pesos por unidad. El Chaco todavía como Territorio Nacional fue el distrito más beneficiado. De acuerdo con las cantidades, de mayor a menor: 1º) Córdoba 108 escuelas. 2º) Chaco 74. 3º) Catamarca 73. 4º) Corrientes 69. 5º) Tucumán 64. 6º) Santa Fe 59. 7º) Salta 46. 8º) Mendoza 43. 9º) Entre Ríos 43. 10º) San Juan 37. 11º) La Rioja 36. 12º) Rio Negro 35. 13º) La Pampa 35. 14º) Formosa 32. 15º) Neuquén 28. 16º) Misiones 28. 17º) San Luis 27. 18º) Chubut 26. 19º) Zona Militar de Comodoro Rivadavia 24. 20º) Jujuy 21. 21º) Capital Federal 20. 22º) Provincia de Buenos Aires 9. 23º) Santiago del Estero 13. 24º) Santa Cruz 4. 25º) Tierra del Fuego 2.
Siete décadas.
Transcurridos setenta años las escuelas del Primer Plan Quinquenal se encuentran todas en pie, no se les ha movido ni una sola chapa del techo, las que contaron con el correspondiente mantenimiento permanecen casi intactas, en servicio, manteniendo en su frontis escrito en letras sobre relieve el número de la escuela y el rótulo Ministerio de Educación de la Nación. Otras fueron ampliadas, en algunas se respetó la continuidad de su línea arquitectónica original, en otras no.
El Primer Plan Quinquenal fue santificado por unos y condenado por otros, no por razones técnicas ni científicas, sino por emociones políticas, auténticas o inducidas. Quedó comprobado que la planificación es fundamental para el desarrollo de un país y no existe incompatibilidad entre el principio político y este instrumento, como el tiempo se ha encargado de demostrar con los edificios de las escuelas del plan quinquenal.
* El autor es miembro de número de la Junta de Estudios Históricos del Chaco y durante 43 años fue corresponsal de diario NORTE en Las Breñas.
74 edificios escolares en el Chaco.
Con una inversión de 73.450.000 pesos se construyeron 74 escuelas en el Chaco cuando era gobernador Nicolás Russo, aunque habían sido gestionadas por su antecesor Antenor Farías. Se licitaron en 1948 y 1949 y los trabajos se cumplieron a pleno durante todo 1950, Año del Libertador General San Martín, para ser inauguradas en 1951. Al publicarse la memoria gubernamental de 1950 se detallaba que en el Chaco habían concluido las obras de 6 edificios escolares y estaban en ejecución 68.
Fueron las primeras en entregarse: la 33 y 54 de Resistencia; 44 de El Zapallar; 63 de Machagai; 58 Presidencia de la Plaza; y 252 de Sáenz Peña. Los otros establecimientos de enseñanza primaria beneficiados fueron: 12 de Margarita de Belén; 24 y 430 de Charadai; 18 de Puerto Bermejo; 32 y 142 de Charata; 26 de Resistencia; 183 Santa Elena; 340 Napalpí; 56, 100 y 363 El Zapallar; 36 A. Quintana; 279 Machagai; 13 La Liguria; 127 y 387 de Pinedo; 11, 82 y 140 de Villa Ángela; 180 y 363 de José Mármol; 6 de Vicentini; 230 Campo del Cielo; 43 T. de Agua; 10 Colonia Benítez; 51 y 99 Selvas de Río de Oro; 202 Las Avispas; 67 La Verde; 305 Santa Sylvina; 374 Las Breñas; 130 Iporá Guazú, zona rural de Las Breñas; 435 El Palmar; 144 La Lola; 37, 306, 352 y 367 de Sáenz Peña; 278 La Florida; 68 Colonia Baranda; 18 Mesón de Fierro; 103 Fontana; 23 Enrique Urien; 61 La Eduvigis; 389 El Porvenir; 169 San Martin; 104 El Abate; 186 Pampa Dorotier; 50, 282 y 384 de Quitilipi; 34 Makallé; 86 La Blanca; 29 Colonia Paso; 17 Cancha Larga; 242 Villa Libertad; 432 San Eduardo; 20 General Vedia; 114 Colonia Elisa; 420 Colonia Matheu; 219 La Clotilde; 204 Lote Fiscal; 115 El Aguará; 178 El Curundú; 113 Cote Lai; 193 Las Tolderías Colonia Necochea; 237 San Bernardo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
La diferencia de opiniones conduce a la investigación, y la investigación conduce a la verdad. - Thomas Jefferson 1743-1826.