Ignacio Pirovano y Evita. Por JUAN LUIS GALLARDO.

 

Robarto E. Elissalde, académico y escritor de fuste, publicó recientemente en este diario un artículo titulado `Ana de Pombo, la Diseñadora de Evita'. En el mismo, con erudición y sólidos fundamentos, trata sobre la mujer de Perón y la moda. También, incidentalemente, sobre Ignacio Pirovano, fundador de la afamada casa de decoración Comte.­

Y ocurre que Ignacio era tío mío, según permite sospecharlo mi nombre: Juan Luis Gallardo Pirovano.­

De modo que es natural que el artículo me haya interesado y que haya resuelto escribir esta nota a su respecto, acotando el trabajo de Elissalde.

Informo, por lo pronto, que Ignacio Pirovano era nieto del otro Ignacio, cirujano de nota e integrante de la célebre Generación del 80, prohijada por el general Roca y que tantos talentos aportó a la cultura argentina.

En cuanto al Ignacio al cual se refiere Elissalde, es sobrino del escultor Rodolfo Pirovano, fundador del pueblo de Pirovano y teñido su nombre por la sangre de la llamada Tragedia de Pirovano, ocurrida allí cuando la revolución de 1905.­

Rodolfo Pirovano dijo un día: "Con estas manos que Dios me dio, las cosas que haría si tuviera talento''. Pero lo tenía. Y es el autor de la gran estatua de Cristo que se alza al terminar la escollera del Puerto de Pescadores, en Mar del Plata.­

Rodolfo era totalmente sordo, pero leía bien los labios. De modo que, al caer la tarde en Cume Co, reclamaba: Prendan las luces que no oigo.

En cuanto al Ignacio que me ocupa, fue un impulsor de la cultura nacional, pintor él e importador de estilos pictóricos europeos. Como era rico, pudo darse el gusto de donar al país un museo que acoge importantes colecciones de cuadros y tapices que le pertenecieron.

Su abuelo pobló una bella estancia, contigua al pueblo, denominado Pirovano. Se llama Cume Co, perteneció originariamente a Eduardo Madero, el del puerto, y en sus esquineros de fierro lucen las iniciales EM, correspondiente a Madero. ­

El casco fundador, era una típica casa criolla, en forma de H, pintada a la cal. Que don Ignacio reemplazó por otra, más lujosa, de estilo normando.

Gran benefactor del pueblo que lleva el apellido de la familia, en el centro de la plaza principal del mismo luce un busto de Ignacio, fundido en bronce. Apoyada en el pedestal se ve a una matrona despechugada, obra del conocido escultor francés Drivier.

En oportunidad de inaugurarse tal monumento, cuentan que un paisano comento: Yo, al dotor Pirovano no lo conocí, pero la señora Cata está igualita. Catalina Pirovano de Pirovano es mi abuela materna.

PUBLICADO EN DIARIO LA PRENSA.

https://www.laprensa.com.ar/518537-Ignacio-Pirovano-y-Evita.note.aspx