“Hay que dejar de embanderarnos con la figura del Che”.
La politóloga guatemalteca Gloria Álvarez desmitifica la figura del revolucionario Che Guevara y los ideales progre que le siguieron.
La politóloga guatemalteca Gloria Álvarez visitó Buenos Aires para presentar su nuevo libro, “Cómo hablar con un progre” (Planeta). Crítica de los gobiernos populistas en la región, y de los modelos culturales, dispara desde la portada de su trabajo contra las figuras revolucionarias latinoamericanas. Concretamente contra el Che (convertido en ícono pop), del que se cumplieron esta semana 50 años de su muerte: se lo celebró con actos oficiales en Cuba, Bolivia y Venezuela.
Noticias: ¿Tu libro sería el manual del pensamiento liberal?
Gloria Álvarez: Este libro lo que recoge es el descontento que tienen las juventudes latinoamericanas con sus gobiernos, se quejan de la corrupción, y sin embargo siguen apostando por agendas fracasadas. Los jóvenes están profundamente indignados por la pobreza, por la corrupción y por las injusticias que hay en sus países, pero no se dan a la tarea de profundizar en las lecciones que la historia y la economía nos dan para buscar nuevas soluciones. Por eso desde la portada hago una referencia a la necesidad de dejar de embanderarnos con la figura del Che. El líder político juvenil por excelencia sigue siendo un asesino que arremetió contra la vida y la propiedad privada de todo aquel que no pensaba como él.
Noticias: ¿La culpa es finalmente del electorado?
Álvarez: Por un lado sí. El conformismo hace que caigan en figuras mesiánicas. Y al final la factura se paga es muy cara. Y lo que hemos visto a través de la historia latinoamericana. Le seguimos delegando todas las tareas al gobierno y el gobierno va a seguir robando en todas las áreas en donde se le da carta blanca.
Noticias: En Argentina y en varios países de Latinoamérica tenemos regímenes presidencialistas muy fuertes. ¿Cómo se cambia el rumbo?
Álvarez: Entendiendo que los presidentes tampoco son monarcas absolutos. En América Latina creemos que con cambiar de presidente se cambia de sistema. Y la verdad es que no es así. Tenemos profundas crisis institucionales, empezando por sistemas judiciales que son parciales; congresos que no son representativos, donde las oposiciones son o muy débiles o se quedan en lo discursivo; y políticos que venden como libertad de mercado situaciones que nunca colaboraron en eso.
Noticias: ¿Por ejemplo?
Álvarez: Cuando hay privatizaciones se hacen de manera monopólica y oligopólica para los amigos del presidente de turno. Es el caso de los gobiernos de derecha de los ’90, pero también cuando gobierna la izquierda. En lugar de hacer redistribución crean una nueva oligarquía como sucedió con el kirchnerismo, el chavismo, etcétera. Tanto derecha como izquierda no sueltan la concepción de que la economía no debe ser controlada desde el gobierno.
Noticias: Vos sos muy crítica del EBK (estado de bienestar keynesiano). ¿Por qué crees que el estado tiene que intervenir menos en la vida de la población?
Álvarez: Para mí, lo que paso con los países latinoamericanos es que hacen demasiado de lo que no deberían de hacer. Lo que necesita el ciudadano de su gobierno es que se le garantice un marco jurídico donde esa persona pueda progresar libre y en paz. Eso es precisamente lo que los inmigrantes latinoamericanos se van a buscar a Estados Unidos. Los gobiernos latinoamericanos los tres derechos que menos respetan son el de la vida, la propiedad privada y por supuesto las libertades.
Noticias: Y después está lo que vos llamás Ministerios de la Felicidad.
Álvarez: Absolutamente. Vienen a poner de ejemplo el bienestar de los países escandinavos, donde la gente destina el 40 por ciento de su sueldo a impuestos. Pero ni en Suecia ni en Finlandia, ni en Dinamarca se concebiría jamás ir a expropiar. La propiedad privada es sagrada. Y la libertad de mercado es de las mayores en el mundo. Si vamos a copiar algo de los países escandinavos, copiémoslo bien. No me vengan a vender un comunismo que no existe.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
La diferencia de opiniones conduce a la investigación, y la investigación conduce a la verdad. - Thomas Jefferson 1743-1826.