Roca también tuvo polémica por Colón.

La estatua donada por la colectividad italiana en 1927 vino a reemplazar una de San Martín. Se armó en el pueblo un comité de protesta que se hizo escuchar.

En los finales de la década del 20, en Roca, se desató una controversia con respecto a dos monumentos, el del General José de San Martín y el de Cristóbal Colón. El monumento a San Martín fue inaugurado el 9 de julio de 1916, en la Avenida del Centenario (actual Avenida Roca), entre las plazas San Martín y Belgrano. En 1912 se había iniciado una colecta para su construcción: se reunieron unos 700 pesos, suma que alcanzaba para la realización y posterior emplazamiento.

Por otra parte, a fines de 1927, la colectividad italiana donó a la Municipalidad la estatua de Colón, toda en bronce, fundida en Italia, con escalinata de mármol blanco.

El Concejo Municipal decidió emplazar esta estatua en el lugar donde ya estaba la de San Martín.

Y se desató la polémica: unos consideraban que la resolución era una afrenta porque se estaba sustituyendo a un prócer nacional por uno extranjero. La cosa llegó hasta los ámbitos nacionales: se formó un “Comité de protesta que hizo llegar notas y telegramas al presidente de la Nación, al ministro del Interior, al gobernador de la provincia y al presidente de la Liga Patriótica. El pueblo entero se llenó de planfletos.

La salida fue emplazar la estatua de San Martín en el centro de la plaza. Se sacó un busto de Belgrano, que había quedado arrumbado en un depósito y se dispuso la inauguración en forma simultánea de los dos monumentos nacionales.

Luego de una estadía bastante prolongada en el lugar “usurpado”, Colón fue mudado otra vez. En 1971, durante la gestión de Pablo F. Oreja, se lo sacó de la avenida y se la emplazó en la plaza Naciones Unidas, porque según explicaron allí se valoraría y apreciaría más. En octubre de 2010 tendría otra remoción, pero esta vez más tranquila, ya que fue reubicada dentro de la misma plaza.

Publicado en Diario "Río Negro", 14/10/2017.-