Conforme a mi propósito de aportar datos que puedan ser útiles para completar el contexto de hechos referidos a nuestra Historia reciente, me ocuparé hoy de un suceso del que fui testigo presencial, a mediados de 1955.
Ya decididamente enfrentado el gobierno de Perón con la Iglesia Católica, el 11 de junio de aquel año tuvo lugar la procesión de Corpus Christi, pese a haber sido prohibida por las autoridades. La misma reunió una inmensa multitud, muchos de cuyos integrantes, seguramente, no concurrieron movidos tan sólo por un sentimiento religioso, ya que la política encendía los ánimos por entonces y aquello se transformó en una manifestación opositora, más allá de las intenciones de los organizadores. Yo fui uno de los concurrentes, de modo que escribiré con conocimiento de causa.
La muchedumbre se movilizó desde la Catedral Metropolitana, por la Avenida de Mayo. Y ocurrió que, al llegar la columna al Congreso, algunos jóvenes intentaron izar en los mástiles del mismo banderas argentinas enlazadas con la bandera papal. Durante el intento, una de ellas –argentina- comenzó a quemarse, al tomar contacto, accidentalmente, con cierta llama votiva que allí ardía, quizá en homenaje al Soldado Desconocido.
Ante esta circunstancia, el muchacho que había trepado para enarbolarla la soltó y cayó al suelo, chamuscada.
Hasta aquí, lo que yo vi. Pero continuaré el relato, informando lo que se dijo en la época sobre el caso.
Entre los partícipes de la procesión el gobierno había infiltrado muchos espías, que tenían por tarea informarle lo que iba pasando. Así llegó al Ministerio del Interior la noticia del accidente. Enterado del mismo, el ministro Borlenghi ordenó a la policía incautarse de la bandera quemada, como prueba de que los católicos habían profanado la enseña patria. Pero la policía no había recogido el pabellón chamuscado. Y, para disimular su omisión, parece que en la Comisaría 6ª se quemó otro, para remitirlo a Borlenghi.
De modo que las banderas quemadas aquella lejana tarde fueron dos. Una por accidente y la otra para ocultar un descuido policial. Ninguna, en realidad, con ánimo de agraviar el símbolo patrio.
Publicado en Diario "La Prensa", 22 de abril del 2021. Imagen del mismo sitio.
http://www.laprensa.com.ar/501301-Banderas-quemadas.note.aspx
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