Bariloche es la cuna de la energía nuclear argentina. Durante años el secreto signó la actividad del austríaco Ronald Richter, que convenció a Perón de haber dominado la fusión nuclear en la isla Huemul y fue refutado por José Antonio Balseiro. Y así se mantuvo, durante seis décadas, como un código tácito de una cofradía científica que prefiere que su actividad no sea difundida más que por las publicaciones especializadas.
El Centro Atómico Bariloche, la planta piloto de enriquecimiento de uranio de Pilcaniyeu o la Planta Industrial de Agua Pesada de Arroyito son organizaciones cerradas. Detrás de argumentos que hacen hincapié en la seguridad o en una estrategia nacional, el área nuclear nunca perdió cierta influencia del mundo militar.
Invap fue creada durante la última dictadura y bajo la gestión del vicealmirante Carlos Castro Madero aunque a instancias de físicos e ingenieros de Bariloche. En los últimos años quebró buena parte del sigilo nuclear, tal vez porque siempre vivió de sus ventas y porque es propiedad del Estado rionegrino.
La empresa estuvo manejada por Conrado Varotto, un físico del Balseiro que en la década del 90 y hasta hace dos meses se alejó de Bariloche para presidir la Comisión Nacional de Actividades Espaciales. Lo reemplazó como CEO otro físico del Balseiro, Héctor Otheguy, bajo cuya conducción la empresa se apoyó en los gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández para crecer.
Colocaron obligaciones negociables que adquirió Anses y así pudieron levantar el complejo del Este de Bariloche. La caja jubilatoria recuperó, con intereses, cada peso prestado. Y fue el brazo tecnológico de proyectos claves de la década kirchnerista, como los dos satélites de comunicaciones Arsat, además de radares, antenas y receptores de televisión digital, centros de medicina nuclear y los proyectos nucleares que el país desarrolla hace muchos años: Carem y RA-10. Era la “época de la magia”, dijo el presidente.
Cuando asumió Mauricio Macri la presidencia, la figura de Otheguy había quedado ligada al kirchnerismo: sus apariciones en el programa “678” quedaron en el registro de Youtube y en la memoria de más de un integrante del gabinete nacional.
Fue allí y no ahora cuando se cortaron los contratos: el Arsat-3, que estaba en pleno proceso de ingeniería preliminar, y toda el área de televisión digital quedó discontinuada. El grupo fundacional de Invap tomó la decisión de quitar a Otheguy de la primera línea (es ahora presidente del Directorio) y reemplazarlo por Vicente Campenni, una cara nueva que cae mejor en la Jefatura de Gabinete. Y también resolvieron relanzar el área nuclear, en la que Invap tiene prestigio internacional. No porque sí vienen de ganar por segunda vez una licitación en Holanda (la primera la habían anulado por la crisis financiera del 2009), con lo que la empresa hace pie por primera vez en Europa, luego de dos contratos muy importantes en Egipto (1997) y Australia (2006).
La crisis actual de la empresa es porque el gobierno incumplió con el pago de los contratos, no por la caída de algunos negocios (esa crisis se podría decir que estaba en proceso de resolverse).
El actual gobierno firmó de hecho nuevos contratos en los últimos meses con Invap, todos ligados a la seguridad:
• Control en puntos calientes de las fronteras terrestres, de los que no hay mayores detalles.
• Construcción y modernización de radares aéreos y terrestres, algunos de los cuales serán usados para la cumbre de presidentes y jefes de Estado del G20 en noviembre en Buenos Aires.
• Sistema de trazabilidad de las armas de los efectivos de fuerzas de seguridad federales. Parece insólito, pero existe la sospecha de que se utilizan para cometer delitos y que en algunos casos son alquiladas por los efectivos. Será como un seguimiento satelital, tipo GPS.
El gobierno de Macri acordó finalmente un plan de pagos de la deuda. Invap goza de prestigio y la alerta que encendió la frase del presidente amenazaba con hundir un poco más la imagen de la gestión nacional, dañada por la situación económica.
Nota de opinión publicada en Diario "Río Negro", domingo 29 de Julio de 2018. Foto: Archivo.
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