¿Será un conejo? ¿Será un pato? ¿Serán ambas cosas? ¿O será simplemente una mancha de tinta? Estas preguntas son las que llevan desconcertando a la humanidad desde hace más de 100 años. Concretamente desde 1892, época en la que la ilusión óptica que se puede ver en la parte superior de esta noticia fue publicada en una revista alemana de humor. A día de hoy, el debate continúa.
Si nos lo permiten, les adelantaremos que no deben destrozarse la vista, pues en la imagen aparecen tanto un pato como un conejo. Sin embargo, lo importante no es solo descubrir el número de animales que hay en el dibujo, sino el tiempo que tarda nuestro cerebro en descubrirlos. Y es que, según los expertos, atendiendo al tiempo que tardemos en ver los dos descubriremos cuál es nuestra rapidez mental.
Mientras buscan a los susodichos bichos y calculan el tiempo que tardan, les diremos que esta imagen apareció por primera vez en Alemania en 1892. Su soporte no fue otro que una revista de humor llamada «Fliegende Blätter». Ya entonces tuvo mucho éxito. No obstante, se hizo realmente famosa más tarde, en 1899. Y gracias al psicólogo Joseph Jastrow. Este utilizó la ilustración para demostrar que «vemos» con nuestro cerebro y no solo con nuestros ojos.
Así pues, y según el estudio de Jastrow, las personas que pudieron captar rápidamente el cambio entre el conejo y el pato llegaron a un promedio de casi cinco usos innovadores de utensilios cotidianos. Sin embargo, aquellos que no pudieron descubrir el conejo o el pato cuando ya habían visto uno de ellos encontraron menos de dos usos para esos objetos.
Esto sugiere que el cambio rápido de una imagen a otra indica la creatividad. El momento en el que se cambia de pato al conejo es como si un relámpago de creatividad llegara, el momento en el que se ve el mundo de una manera diferente. ¿Y tú? ¿Qué ves?
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La diferencia de opiniones conduce a la investigación, y la investigación conduce a la verdad. - Thomas Jefferson 1743-1826.