Las escuelas “Mercante”.

Es muy común verlas algunas todavía tal y cual fueron construidas otras con ampliaciones en el campo, a la vera de las rutas y en los barrios que alguna vez fueron alejados de la ciudad. “Son escuelas Mercante”. Pero a que se refieren con esto ¿a un modelo? ¿Una tendencia? ¿Un estilo arquitectónico? Y aunque todas tienen características similares se refieren al Gobernador que las construyó.

En el partido de Ramallo, por la Ruta 51, cinta asfáltica que une la cabecera del partido con Arrecifes se encuentra a unos pocos cientos de metros de la autopista el “Paraje Zino”. Por allí hay una escuela rural, la número 2 con el típico diseño de las construidas durante la gobernación de Domingo Mercante en la provincia de Buenos Aires, coincidente con el primer gobierno de Juan Domingo Perón.

En realidad a lo largo de toda la ruta 51 en este segmento de unos 70 kilómetros (Autopista-Arrecifes) encontramos tres escuelas primarias, todas con el mismo diseño.

Las bitácoras y los recuerdos nos llevarán a algunas historias anteriores a la existencia de estas escuelas, a historias de maestros y de aparecidos.

Pero antes me parece muy interesante abrir un paréntesis, para abordar el tema de la construcción de escuelas. Popularmente sabemos que fue Domingo Faustino Sarmiento el “padre de la educación” en nuestro país, promotor e impulsor de la ley 1420 que hizo obligatoria a la educación primaria. Lo cierto es que esta ley recién pudo “hacerse de letra plena” durante el primer Gobierno de Perón, período en el que se garantizó el acceso a la educación a todos los Argentinos (en contraposición del lema que tantas veces se asoció con este gobierno “alpargatas si, libros no”). Todo lo contrario, los números son claros y elocuentes.

Objetivo central

“Al hacerse cargo Mercante de la gobernación el tema de la educación primaria fue uno de los objetivos prioritarios. Se proponía atender la creciente población escolar y contar con ámbitos higiénicos y pedagógicamente apropiados.

Aunque deja pasar un tiempo para la designación del Director General de Escuelas, comenzó por relevar la cantidad y calidad de los edificios escolares.

De las 2500 escuelas primarias que funcionaban en la provincia, unas 1.600 lo hacían en edificios alquilados y cuya gran mayoría no eran apropiados a la función. De los 900 restantes, propiedad del fisco, requerían refacciones, ampliaciones o simplemente la reconstrucción.

Recordemos que desde 1884, fecha de la sanción de la Ley Sarmiento (1420) se habían anunciado tres o cuatro planes de construcciones escolares pero no habían alcanzado la magnitud necesaria para hacer masivo el acceso a la educación, porque sencillamente estos planes que nacían ambiciosos luego fracasaban por “falta de recursos” aunque en realidad fracasaban por asignación de recursos a otros fines. Es decir, que aunque se planteaba el plan, luego la educación no se presentaba como “prioritaria” (uno define las prioridades donde pone el presupuesto, los recursos y no donde “dice” tener las en palabras).

Nada fácil

A Mercante que tenía la decisión de construir más de 1000 escuelas, tampoco le resultó fácil la empresa. “La gestión educativa de Mercante estuvo a cargo de dos directores generales los Doctores Alejandro Greca y Estanislao Maldones y un Ministro, Dr. Julio César Avanza, cuando en 1949 fue creado el Ministerio de Educación provincial, en reemplazo de la vieja estructura. Durante el mandato del Dr. Greca, entre Junio de 1946 y julio de 1947 se elevó a la Cámara de Diputados, a través de la Comisión Especial de Construcciones Escolares y Hospitalarias, el 5 de febrero de 1947 el plan de construcciones.

En los objetivos se planteaba: “proveer al sistema educativo del número necesario de edificios escolares propios y que permitieran el desarrollo de tareas pedagógicas en condiciones de bienestar para maestros y alumnos”.

Los planes de gobiernos anteriores fijaban sus objetivos en función de los recursos disponibles; la originalidad de este Plan era pretender “la completa solución al grave problema” con la construcción de 1419 edificios, 83 a reconstruir y 589 a refaccionar, con un presupuesto de $147 millones.

Pero la cosa no avanzó. Fue “cajoneado” en el Senado. Tras las elecciones legislativas de 1948, con mayoría en ambas cámaras para el oficialismo todo parecía allanarse. Pero surgieron problemas personales entre el Ministro de Educación y los Senadores. Tras la renuncia de Greca y asunción de Maldones como ministro se reformula el plan que ahora contemplaba “la construcción de 1504 nuevas y 115 escuelas reconstruidas, agregándoles 112 jardines de infantes y 300 comedores escolares, más un 10% para la compra de terrenos. A éstos, a pesar de las donaciones, se les fijaron dos criterios: “llevar la escuela a la población y no la población a la escuela”; “el terreno no podía medir menos de 2.500m2”.

“Tras arduas discusiones en la Legislatura durante 587 días, donde se llegaron a analizar tres planes distintos; finalmente el Plan Maldones con algunas modificaciones (se suman 500 unidades sanitarias), ahora presupuestado en $600 millones, resulta aprobado el16 de septiembre de 1948 por Ley N° 5.283.

En solo tres años, hacia 1951 hay 1600 escuelas terminadas más las “en ejecución”, totalizan 1721 edificios nuevos.

Impacto que solo volverá a repetirse en la historia de nuestro país durante esta última década con la construcción nuevamente de mas de mil escuelas. Mañana nos vamos de nuevo al Paraje Zino.

Autor: Daniel M Gatti.

http://diarioelnorte.com.ar/nota6036_las-escuelas-%E2%80%9Cmercante%E2%80%9D-.html

Diario Del Norte, 1º de marzo de 2012.