Detuvieron al empresario reginense Raúl Vertúa.

El empresario está mencionado dentro de uno de los ocho cuadernos que escribió Oscar Centeno.

El empresario reginense, Raúl Vertúa fue detenido en la noche del viernes en el marco de una serie de operativos dispuestos por el juez federal Claudio Bonadío que investiga la causa de los cuadernos de la corrupción por el pago de coimas durante la gestión presidencia de Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner.

En la misma jornada otros empresarios y ex funcionarios del gobierno nacional fueron detenidos por orden de juez.

Se desconoce si el titular de la empresa Servicios Vertúa, que tiene su base administrativa en Buenos Aires, se acogería, al igual que otros empresarios detenidos a la figura de colaborador para aportar datos a la investigación y en caso de condena, lograr el beneficio de atenuación de la misma.

Vertúa había sido convocado por el juez Bonadío para prestar testimonio el miércoles, jornada en la que también se presentaron ante el magistrado el ex juez federal Norberto Oyarbide, Oscar Parrilli quien fuera Secretario General de la Presidencia y el empresario Jorge Rodríguez.

El empresario reginense está mencionado dentro de uno de los ocho cuadernos que escribió Oscar Centeno, ex chofer de Roberto Baratta, segundo de Julio De Vido mientras se encontraba al frente del Ministerio de Planificación Federal de la nación.

En 2013 el gobierno nacional le había adjudicado a la empresas Servicios Vertúa la construcción de un tramo del Gasoducto Troncal del Noreste Argentino (GNEA), que preveía en este caso el tendido de cañerías a lo largo de 230 kilómetros desde el gasoducto Juan Azurduy en Salta hasta el límite con Formosa. La obra nunca se terminó de ejecutar, aparentemente por diversos conflictos con agrupaciones aborígenes asentadas en las tierras por las cuales debía pasar el tendido.

Sin embargo y pese a que no completó la obra, la empresa le cobró al Estado Nacional 733 millones de pesos, en tanto que posteriormente inició un reclamo por vía judicial para lograr el pago de otros 538 millones de pesos en concepto de “días improductivos” por las jornadas en la que la obra estuvo paralizada debido a los conflictos con las agrupaciones de pueblos originarios en el norte del país.

Fuente de información e imagen: Diario "Río Negro", sábado 11 de agosto de 2018.